Subcomandante Marcos critica reforma judicial

Carlos Álvarez
21 agosto 2024

El líder del Ejército Zapatista de Liberación Nacional acusa de AMLO se asemeja ex presidentes priistas y panistas, dice

Rafael Sebastián Guillén Vicente, conocido como Subcomandante Marcos, vocero del grupo armado indigenista Ejército Zapatista de Liberación Nacional, criticó al Presidente Andrés Manuel López Obrador, de quien dijo, que por sus actos se parecía a los presidentes de la República que entre 1964 al 2018 gobernaron México, postulados por los partidos Revolucionario Institucional y Acción Nacional.

Asimismo, a través de un texto titulado “El Viaje” y publicado en la página web oficial del EZLN, sostuvo que lo que estaba en juego, en la reforma judicial enviada por el Presidente al Congreso de la Unión, no era la autonomía de los jueces, sino “quien maneja el negocio de la compraventa de la justicia”.

“No olvidar que Chalco, hace más de 30 años, era la joya emblemática de Carlos Salinas de Gortari y de su programa ‘Solidaridad’, antecedente intelectual y práctico de los programas de ‘Bienestar’. Con lo que ahora se padece en ese lugar, ¿dónde está Salinas de Gortari para dar cuentas? Los súbditos de hoy, ¿estarán para dar cuentas en las previsibles catástrofes en las que desembocarán sus megaproyectos del ‘Bienestar’?”, indicó.

“Los opositores conservadores fueron ‘adversarios’. ¿Y quienes se rebelan y resisten al sistema? Ah, ésos sí eran (y son) enemigos. Merecían y merecen la muerte, el desprestigio y el olvido. O todo junto. Por eso el olvido, la impunidad y la ignorancia frente al asesinato del hermano Samir Flores Soberanes y todos los guardianes de la Tierra asesinados, desaparecidos y encarcelados en la llamada ‘revolución de las conciencias’”, agregó.

“No importa el nombre, es lo mismo. Basta una mirada serena para entenderlo. Claro, eso si se quiere entender y no sólo confirmar fobias y filias personales (gratuitas o pagadas). En el oficialismo no todos son iguales, es cierto. Los hay criminales impunes, que ya lo eran en el PRI, el PAN, el PRD, el PT y el PVEM antes de brincar al oficialismo; o como el futuro encargado de Educación Pública. Y los hay quienes son simplemente estúpidos, como el paradójico Marx Arriaga [Navarro]”, escribió.

“El error que se cometió antes del ‘beneficio de la duda’, se repite. Quienes nos criticaron por no apoyar y criticar el cambio de piel de la víbora, fueron los más ferozmente atacados por su defendido. Ahora lo vuelven a hacer, amparándose en que ‘es mujer’. Hombre, mujer, otros, no importa. Allá arriba está el problema, no la solución. Si no miran hacia abajo, seguirán tropezando con la misma piedra. Y eso ya sería patológico. El oficialismo no busca apoyo, sino complicidad”, dijo.

“Tuvo el autoritarismo de Gustavo Díaz Ordaz; el nacionalismo de cartón piedra de Luis Echeverría Álvarez, la demagogia corrupta de José López Portillo, la mediocridad administrativa de Miguel de la Madrid, la perversidad de Carlos Salinas de Gortari, la vocación criminal de Ernesto Zedillo, la ignorancia enciclopédica de Vicente Fox, el militarismo y la mecha corta de Felipe Calderón, y la frívola superficialidad de Enrique Peña Nieto. ¿Quién es? Ah, y la corte de aduladores de todos ellos. Cambian los presidentes, cambian las nóminas. Lo del autoelogio y lo chillón, sí es parte del ‘estilo personal de gobernar’”, comparó.

“La estrategia de la mal llamada oposición de ‘no a la sobrerrepresentación’, no busca el inexistente, desde hace décadas, equilibrio de poderes. Lo que quieren es elevar el precio de venta de sus decisiones en las cámaras. Lógica de mercado, pues. La supuesta ‘defensa’ del Poder Judicial no es sino una autodefensa. Los criminales tienden a unirse cuando se ven amenazados. Lo que está en juego no es la autonomía de los jueces, sino quien maneja el negocio de la compraventa de la justicia”, enfatizó.

“Los autores intelectuales de ‘la unidad opositora’ no explican el fracaso. Los errores los pagan otros, no ellos, así que no hay problema. La derrota de Bertha [Xóchitl Gálvez Ruiz] demuestra que el asunto no es de género ni de columnas de ‘especialistas’, sino de aparato. Y ése ya se los arrebató el oficialismo hace seis años”, comentó.

“Se quejaron, se quejan y se quejarán de lo mismo que practicaron por años: la mentira, la calumnia, el insulto, el ninguneo, el escupitajo mediático, el ‘no presentar pruebas de lo dicho’, el abuso de Poder en medios, el tribunal mañanero. Y de una plataforma informativa ridícula, como la que han construido en décadas. Chillones, pues. En plural”, explicó.

“En serio pensaron que personajes como [Rafael Alejandro Moreno Cárdenas] Alito, los Chuchos y como se llame el presidente del Acción Nacional [Marko Cortés Mendoza], ¿serían una opción elegible? ¿Qué las bobadas de Bertha ‘jalarían’ al electorado joven?. No supieron presentarse como opción de ‘centro’ (no sólo porque eso no existe, pero eso es otro tema), y tampoco como opción de derecha. Pero no se preocupen, eso de la ideología es eso, ideología. Y lo que importa es el negocio. Es decir, la política realista. Pues eso”, finalizó.

Durante una gira por Chiapas, el Presidente López Obrador tuiteó, el 7 de julio de 2019, una fotografía de 1994 en la que aparecía con el subcomandante Marcos e integrantes del Ejército Zapatista de Liberación Nacional, además de Rosario Ibarra de la Garza y Cuauhtémoc Cárdenas Solórzano, entre otros.

“Ayer me regalaron esta foto que fue tomada en 1994 en Guadalupe Tepeyac, Las Margaritas, Chiapas. En esa ocasión, el tema fue conseguir la paz. Yo solo recuerdo que ‘una imagen vale más que mil palabras’”, escribió en su cuenta de Twitter. Ello, después de que el sábado 6 de julio de 2024, al visitar Ocosingo, el Presidente llamara a la unidad.

“Respetamos mucho al movimiento zapatista y mi recomendación fraterna respetuosa es que no nos peleemos, ya basta de divisiones, necesitamos unirnos todos, como esa estrofa del himno de Chiapas: que se acabe la odiosa venganza, que termine por siempre el rencor [...] Todos juntos unidos como hermanos”, dijo.

En 2018, el EZLN tampoco apoyó la candidatura de López Obrador, impulsando en cambio las aspiraciones presidenciales por la vía independiente, de María de Jesús Patricio Martínez -”Marichuy”, indígena nahua defensora de los derechos humanos-, misma que por falta de firmas de apoyo, no se concretó.

En 2006, la primera vez que López Obrador fue candidato a la Presidencia de la República, el subcomandante Marcos -por años vocero del EZLN-, llamó abiertamente a no votar por él.

El Ejército Zapatista de Liberación Nacional se alzó en armas el 1 de enero de 1994, el mismo día que entró en vigor el Tratado de Libre Comercio de México con Estados Unidos y Canadá.

Los combates duraron 12 días y dejaron decenas de muertos, la mayoría zapatistas. Tras un alto al fuego se abrió un proceso de diálogo. Aunque ambas partes firmaron, el 16 de febrero de 1996, los Acuerdos de San Andrés sobre Derechos y Cultura Indígena, los zapatistas interrumpieron el diálogo al no aprobarse una reforma constitucional que garantizaba su autonomía.