Sequía, incendios y calor alteran llegada de Mariposa Monarca a México
En 2022 la UICN añadió a la mariposa monarca migratoria a la Lista Roja de especies en peligro de extinción. Alertan que el cambio climático ha impactado significativamente en esta especie
La mariposa Monarca migratoria (Danaus plexippus plexippus) ya se encuentra en su área de descanso, en la Reserva de la Biosfera de la Mariposa Monarca la cual se localiza entre el Estado de México y Michoacán. Sin embargo, observadores del Correo Real-Mariposa Monarca del Programa de Fauna Mexicana (Profauna) señalaron en un comunicado del 8 de noviembre pasado que fue una “llegada tardía”.
Este año, tanto el cruce de frontera como la llegada de la mariposa Monarca al sitio de descanso tuvo “un ligero retraso”, según las fechas que especialistas del proyecto Correo Real ya tienen identificadas tras 30 años de dedicarse a la observación de la ruta migratoria de la mariposa Monarca.
De acuerdo con Correo-Real, este ligero retraso en su llegada a México puede deberse a la fuerza de los vientos del Norte o las condiciones climáticas que las hagan volar tan alto que no se puedan percibir.
Rocío Treviño Ulloa es ingeniera y coordinadora del Proyecto Correo-Real, una iniciativa de ciencia ciudadana acompañada por especialistas dedicados a la observación de la migración de la mariposa Monarca.
Mariposa Monarca llegaba para el Día de Muertos; ahora lo hace más tarde
En entrevista para Animal Político, explicó que tras recibir el anuncio del ingreso de la mariposa Monarca -el pasado 13 de octubre- por la frontera norte del país, los observadores en el municipio de Acuña, en Coahuila reportaron haber visto a 30 mariposas aisladas.
Para el 22 de octubre los observadores presentaban un nuevo reporte, un reporte de avistamiento con más de cinco mil mariposas Monarca en la Presa de la Joya, Ejido San José de la Joya, Saltillo. Y fue entre el 3 y 8 de noviembre cuando ya se reportó la presencia de esta especie en su sitio de descanso.
Treviño Ulloa explicó que, de las tres décadas que ha dedicado su trabajo en la observación de esta especie, la llegada de la mariposa Monarca migratoria se esperaba durante los festejos de Día de Muertos.
Las Mariposas Monarcas “no han tenido los fríos necesarios”
Treviño Ulloa analizó que el clima en los últimos 30 años también cambió mucho.
Recuerda que de 1992 a 2002 acostumbraba a salir con grupos escolares para observar a las mariposas Monarca que ya se encontraban perchadas a los árboles en grandes cantidades de la Universidad Agraria “Antonio Narro”. Pero, del año 2000 hasta ahora, dejó de hacer estas actividades porque la presencia de la mariposa ya no era segura.
“Llegó un momento que ya no se veían [las mariposas]. Otra cosa que recuerdo mucho es que, cómo íbamos vestidos en esas salidas de campo donde los niños llevaban chamarra, gorra, bufanda y guantes pero en estos últimos años los octubres tienen otras temperaturas. Desde entonces sí ha cambiado la temperatura o se perchan más dispersas. Otro problema son los lugares donde las íbamos a ver con los grupos escolares y es que se [ahora] volvieron pavimentos y casas. Entonces, sí ha cambiado un poco la fecha de entrada del avance de las mariposas”, explica.
La coordinadora de Correo Real resalta, además, lo significativo que ha sido este año ya que aún en la semana del 9 de octubre señaló que observadores estaban reportando mariposas recién nacidas en Canadá “porque no han tenido los fríos necesarios”, alerta la experta.
“No digo que muchas pero si uno revisa los correos [de los observadores en Canadá y Estados Unidos], reportan que tienen orugas o crisálidas, o emergiendo. Hay un nacimiento cuando allá, ya se supone que debería estar el frío y no está”, añade la experta.
Orley R. “Chip” Taylor es fundador del Monarch Watch, un programa de educación, conservación e investigación sin fines de lucro en la Universidad de Kansas que concentra sus estudios en la mariposa monarca, su hábitat y su migración durante el otoño, escribió un artículo en agosto pasado donde advierte sobre los efectos de la sequía que se estaba presentando y las dificultades que tendría la mariposa para obtener néctar.
“Mi objetivo es siempre llegar a la mejor comprensión de lo que está sucediendo o sucederá (...) Se está desarrollando una sequía al sur de 35N y, a menos que haya varias pulgadas de lluvia desde ahora hasta principios de octubre, el néctar será escaso a medida que las monarcas pasen por el sur de Oklahoma y Texas y quizás por el noreste de México. Los efectos de la sequía en la producción de néctar son difíciles de desentrañar. Las sequías al principio de la temporada de crecimiento pueden atrofiar las plantas, de modo que la producción de néctar puede ser limitada incluso si hay lluvias adecuadas más adelante en la temporada”, se lee en el artículo que puedes consultar aquí.
En julio de 2022 la Unión Internacional para la Conservación de la Naturaleza (UICN) agregó a la mariposa Monarca migratoria (Danaus plexippus plexippus) a su Lista Roja de especies en peligro, las destrucción de su hábitat y el cambio climático fueron los principales motivos para este decreto.
“El cambio climático ha impactado significativamente a la mariposa monarca migratoria y constituye una amenaza de rápido crecimiento, la sequía limita el crecimiento del algodoncillo y aumenta la frecuencia de incendios forestales catastróficos, las temperaturas extremas desencadenan migraciones más tempranas, antes de que el algodoncillo esté disponible, mientras que los episodios meteorológicos severos matan a millones de mariposas”, anunció la UICN en un comunicado.
En México la mariposa Monarca se encuentra sujeta a protección especial de acuerdo con la Norma Oficial Mexicana NOM-059-SEMARNAT-2010.
Un hábitat amenazado para las Monarca
Rocío Treviño Ulloa, coordinadora de Correo Real desde hace tres décadas, señala que la mariposa Monarca llegó con un ligero retraso ya que, en otros años, a partir del 12 de octubre ya contaban con avistamientos de esta especie en la región norte del país.
“En la frontera, la gente ya está esperandolas (...). Pero ahora con la siembra de tantas asclepias y tanto crecimiento de mariposas en época que no debe ser ya no sabemos si son migratorias o residentes”, señala Rocío Treviño, coordinadora del proyecto de observación y ciencia ciudadana de la mariposa Monarca.
Información proporcionada por la Comisión Nacional para el Conocimiento y Uso de la Biodiversidad (Conabio) señala que la degradación y fragmentación del hábitat de esta especie está desapareciendo como consecuencia de las actividades humanas. Ejemplo de esto, son los sitios de hibernación que se encuentran amenazados y fragmentados por la pérdida de la cobertura forestal debido a la tala hormiga.
También señalan que la tendencia poblacional de esta especie está decreciendo y su estado de conservación ha llevado a que muchas poblaciones de mariposa monarca redujeron su tamaño o fueran extirpadas de sus sitios de distribución por la degradación y fragmentación de su hábitat, según información de Enciclovida de Conabio.
El biólogo Carlos Galindo Leal analizó en su libro Mariposa Monarca los cambios significativos que ha tenido el paisaje por donde viaja la mariposa Monarca, en su mayoría por la actividad humana. En Estados Unidos y Canadá las alteraciones comenzaron en el año 1600 con la transformación de su ecosistema para uso agrícola en sitios de grandes extensiones de bosques y pastizales, fragmentando el paisaje y alterando el clima.
“La expansión urbana ha provocado una disminución en la distribución y la abundancia de las poblaciones de algodoncillo, planta de la que dependen las mariposas Monarca”, escribe en su libro.
Otra de los peligros que menciona el especialista en su libro es el uso de DDT o dicloro difenil tricloroetano, un insecticida que se usó para el control de insectos transmisores de enfermedades como malaria y fiebre amarilla en Estados Unidos y que en 1972 quedó prohibido su uso. En el caso de la mariposa Monarca no se tiene registro del impacto que su uso causó en los sitios de hibernación de las Monarcas.
Lo cierto es que desde que se inició el registro de monitoreo de la mariposa Monarca, en los años noventa, “se ha documentado una disminución paulatina en sus poblaciones hasta llegar a niveles alarmantes en comparación a las primeras estimaciones”, señala Galindo en su libro.
Especialistas y observadores se encuentran en alerta por el impacto que pueda tener los efectos de la sequía en la vegetación de la que se alimenta este polinizador, ya que necesita del néctar de las asclepias para tener reservas de grasa necesarias en su viaje por los estados de Coahuila de Zaragoza, Nuevo León, Tamaulipas, San Luis Potosí, Hidalgo, Querétaro, Morelos, Michoacán, Estado de México, Oaxaca.
“Nos preocupa que no vayan a encontrar suficiente alimento. Muy posiblemente lleguen a Michoacán pero no sabemos si resistirán [y] si su grasa les permita sobrevivir toda la temporada de hibernación”, añade.