La historia de cómo Televisa infló el fantasma de 'Frida Sofía' en el sismo del 19 de septiembre de 2017

SinEmbargo.MX
19 septiembre 2020

"Sinfín de tuiteros recordaron el montaje realizado especialmente por la cadena Televisa, en voz de sus conductores principales Denise Maerker, Carlos Loret de Mola y Joaquín López Dóriga, además de la reportera Danielle Dithurbide, quien estuvo por varias horas en el lugar de los hechos"

Ciudad de México.- Hoy se cumplen tres años del sismo magnitud 7.1 que dejó 369 muertos en la Ciudad de México, y usuarios de redes sociales recuerdan la tragedia, pero también el relato de "Frida Sofía", una niña inexistente, producto de la televisión, pero que en ese momento significaba una víctima más sumergida entre los escombros del colegio Enrique Rébsamen.

Sinfín de tuiteros recordaron el montaje realizado especialmente por la cadena Televisa, en voz de sus conductores principales Denise Maerker, Carlos Loret de Mola y Joaquín López Dóriga, además de la reportera Danielle Dithurbide, quien estuvo por varias horas en el lugar de los hechos.

“Se cumplen tres años del terremoto de 2017. También se cumplen tres años del montaje de la niña #FridaSofía. No olvidamos cómo @CarlosLoret levantó sus manitas cuando admitió que todo fue un engaño”, comentó un usuario.

Otros señalaron a la periodista Dithurbide como una representante del “periodismo basado en la mentira”.

“Hace tres años, cuando la tragedia nos llegó en forma de sismos, la “periodista” @daniellemx_ difundió que la niña Frida Sofía estaba atrapada, pero viva. Era mentira: show. Dithurbide representa desde entonces a un periodismo mexicano basado en la mentira, la farsa y el engaño”.

“Oye @daniellemx_ todos queremos saber si a fin de cuentas encontraste a Frida Sofía. ¡¡¡Mañana se cumplen 3 años de que nos tienes con mucho pendiente!!!”, también tuitearon a manera de sarcasmo.

Los usuarios recordaron que el caso de Frida Sofía no ha sido el único en la historia mediática de los sismos en nuestro país, pues mencionaron al famoso “Monchito”, un niño supuestamente desaparecido durante los sismos de 1985.

FRIDA SOFÍA, EL MONTAJE ENTORNO AL SISMO

Esa mañana, la del 19 de septiembre, niños y niñas fueron acompañados por sus familiares hasta la puerta de la institución educativa. Llegaron desde Acoxpa o Calzada del Hueso, se encaminaron por División del Norte y doblaron en las esquinas de Brujas y Rancho Piomo, sin imaginar que era un día de tragedia.

Y dieron las 13:14 horas en la Colonia Nueva Oriental Coapa y la alerta sísmica sonó cuando ya los edificios del Enrique Rébsamen crujían.

Sí, la mayoría de las personas salieron en el momento, pero decenas quedaron atrapadas bajo los salones y el mármol del departamento de Mónica García Villegas, dueña de la escuela.

Polvo, descontrol, gente corriendo y gritando. El terror se apoderó de la zona. Se convirtió en un microcosmos del dolor.

“¡Se quedó gente abajo! ¡Están gritando! ¡Doblen la varilla para que puedan salir!’’, gritaba un hombre junto a la estructura que acababa de vencerse.

De un agujero en la pared, sobre la calle de Rancho Pío, se asomó un pequeño uniformado, pantalón rojo con cuadros y suéter con el escudo del CER. Estaba llorando.

Entre las ranuras que dejó el movimiento telúrico fue rescatado junto a una de sus compañeras, de acuerdo a las escenas que compartió en redes sociales un héroe que arriesgó su vida para intentar salvar otras.

El Rébsamen ya era noticia minutos después del sismo de magnitud 7.1 . Los testigos y los voluntarios que arribaron al lugar adoptaron, de inmediato, un lenguaje ahora ya conocido: Puño cerrado es igual a “silencio”, palma equivale a “nadie se mueva”, dedo significa “seguimos trabajando” y las manos arriba son para pedir agua.

Así corrieron los minutos y el sudor. Así se rescató a 11 personas en 24 horas. Y así, también, se localizaron los cadáveres de 21 niños y 5 adultos.

Llegó la comida, y los paramédicos. Arribaron las malas noticias, y la muerte. Hubo lámparas, y silencios prolongados. El área fue acordonada, y las autoridades, junto a voluntarios y “Los Topos”, dirigidos por Héctor “El Chino’’ Méndez, tomaron el control de los escombros (si es que se puede tener control sobre algo así).

Sin embargo, varios medios de comunicación informaron que aún faltaba una niña por sacar de los escombros, de nombre Frida Sofía.

Entonces Televisa comenzó a dar cobertura especial al caso, envió a la reportera Danielle Dithurbide a cubrir en directo las 24 horas del día el “rescate”. Y desde el estudio, Loret de Mola, Maerker y López Dóriga relataban los actos de heroicismo por parte de bomberos y “Topos” al televidente.

Así, al filo de la butaca, lo mantuvieron durante varias horas. Incluso el entonces Secretario de Educación Pública Aurelio Nuño se mantuvo durante más de 10 horas buscando entre los escombros del Enrique Rébsamen a la tal “Frida Sofía”.

Después de varios días de búsqueda, la Secretaría de Marina confirmó que ya no había más niños entre los escombros, pues todos ya había sido identificados. Lo que indicó que sólo se trató de una estrategia mediática para ganar audiencia.