Histórico, AMLO, en homicidios, desapariciones y crisis forense
Los números más positivos de la primera administración de la 4T se reflejan en la economía y la lucha contra la erradicación de la pobreza
El gobierno del Presidente Andrés Manuel López Obrador cierra hoy con cifras históricas de homicidio doloso, de personas desaparecidas y de una crisis forense, por un número escandaloso de cuerpos de personas sin identificar.
Pero también hay logros históricos, como el caso de las cifras de salario mínimo, salarios cotizados ante el Seguro Social y variaciones en tipo de cambio, porcentaje de desempleo y la informalidad laboral.
El rubro más criticable para el gobierno de AMLO sin duda es el de Seguridad y Justicia, por los números que muestran estos comparativos con los sexenios anteriores.
En el rubro de homicidios dolosos, la administración de Felipe Calderón cerró con 121 mil 613 homicidios dolosos, mientras que la de Enrique Peña Nieto terminó con 157 mil 158 personas asesinadas.
La de López Obrador cierra con 191 mil 143 asesinatos, lo que significa 57.5 por ciento más que el sexenio de Calderón y 21.6 por ciento más que con Peña Nieto.
En el caso de las personas desaparecidas, el problema ya rebasó el medio centenar de miles de casos con AMLO.
El gobierno de Calderón cerró con 17 mil 210 casos y con Peña Nieto subió a 35 mil 305, mientras que con López Obrador cerró con 51 mil 703, cifras que superan en 200 por ciento a las de la administración panista y 46.4 por ciento del priista.
Mientras que la crisis forense de AMLO supera también a los casos de cadáveres sin identificar de los sexenios de Calderón y de Peña Nieto.
El gobierno de Caldeón cerró con 10 mil 185 cuerpos sin identificar, después el de Peña Nieto con 19 mil 680 y el de López Obrador con 34 mil 699.
Los logros del Presidente López Obrador sí se pueden ver en otros rubros como la economía y en el combate a la pobreza.
Los mejores números se reflejan en el salario mínimo, por ganancia de pesos diarios que varió un 181.8 por ciento al ir de 88 a 248 pesos, y esto sin duda repercutió en el salario medio cotizante ante el Instituto Mexicano del Seguro Social, que se fue de 353 a 578 pesos con una variación de 63.74 por ciento.
El porcentaje de desempleo bajó de 3.40 por ciento a 2.3 por ciento, una variación positiva de 32.35 por ciento, mientras que la informalidad laboral bajó 3.89 por ciento, de 56.5 por ciento a 54.3 por ciento.
Pero no todo fue positivo, puesto que en la inflación tuvo números rojos, lo mismo que en la deuda externa, el precio de la gasolina y las tortillas.
En el caso de la pobreza, tuvo una variación de 40.1 a 35 unidades, para un 12.72 por ciento, mientras que en la pobreza general bajó de 51.9 a 46.8 unidades, con una variación de 9.83 por ciento de reducción.