En mayo zarpará misión para observar cómo están las vaquitas marinas y sus crías en Alto Golfo de California
Los trabajos de observación tienen el objetivo de revisar cómo se encuentran las vaquitas marinas, especie en peligro de extinción; hasta 2023 se tenían registro de entre 10 y 13, de las cuales dos eran crías
En mayo próximo zarpará en México el Crucero de Observación de la vaquita marina, especie en peligro de extinción, en su edición 2024 con el objetivo de actualizar los datos sobre la población de esta marsopa.
Del 3 al 27 de mayo se llevarán a cabo los trabajos de observación de vaquitas marinas en el Alto Golfo de California y será un mes después cuando se conozcan los primeros resultados.
En esta edición de observación también participarán 19 jóvenes observadores comunitarios quienes, en su mayoría, son hijas e hijos de pescadores en San Felipe. Este grupo saldrá con su propia embarcación y equipamiento con apoyo de la comisión.
¿Cuántas vaquitas marinas hay en México y cómo las buscan los expertos?
A estos jóvenes se sumará un grupo de expertos para recabar nuevos datos sobre la población de vaquitas marinas. Hasta 2023, había registradas oficialmente un total de entre 10 a 13 vaquitas marinas, de las cuales dos eran crías.
Los expertos nacionales e internacionales utilizarán dos embarcaciones de la organización Sea Shepherd en donde usarán hidrófonos para realizar un monitoreo acústico de las vaquitas marinas. Los dispositivos serán colocados en la Zona de Tolerancia Cero (ZTC) de la vaquita marina.
“Esta tarea la lleva a cabo pescadores locales capacitados con experiencia en manejo de hidrófonos y dirigido por personal técnico especializado de la Conanp”, señaló María Luisa Albores, titular de la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales en conferencia de prensa.
El Crucero de Observación vaquita marina 2024 es parte del Plan de Acción que se estableció ante la Convención sobre el Comercio Internacional de Especies Amenazadas de Fauna y Flora Silvestres (CITES) para la protección y conservación de la vaquita marina (Phocoena sinus) y la totoaba (Totoaba macdonaldi), ambas especies en peligro de extinción.
Observadores analizarán el estado actual de las crías de vaquitas marinas registradas en 2023
En esta segunda edición, los científicos podrán determinar el número mínimo de individuos de vaquita marina actual con el objetivo de detectar su condición corporal observable y la presencia de crías.
Además de avistar más individuos de vaquita marina, la titular de Semarnat dijo que se continuará con el entrenamiento de observadores locales en San Felipe, Baja California.
“De esta forma impulsamos acciones de participación comunitaria en favor de la conservación”, añadió.
¿Qué es el Crucero de Observación vaquita marina?
El Crucero de observación y monitorización de vaquita marina es una iniciativa que Semarnat y Conanp presentaron ante CITES como parte del Plan de Acción para comprometerse con el cuidado y protección de la vaquita marina para determinar la población actual de esta especie que habita en el Alto Golfo de California.
En 2024 se llevará a cabo la segunda edición de este Crucero de Observación en la que participarán y se entrenará a jóvenes de la comunidad de San Felipe.
Las observaciones se realizan en conjunto con Conanp, Semarnat, la Procuraduría Federal de Protección al Ambiente (Profepa) y la Secretaría de Marina (Semar). También se suma la organización internacional Sea Shepherd y la Administración Nacional Oceánica y Atmosférica (NOAA, por sus siglas en inglés) con expertos en observación de marsopas en el mundo.
En 2023, los resultados del Crucero de Observación tuvo 16 avistamientos y 61 encuentros acústicos de vaquita marina. Además, se confirmó una población de 10 a 13 marsopas y de una a dos crías.
En esa edición el Crucero 2023 capacitó a ocho observadores locales miembros de la comunidad de San Felipe.
Además se reportó que al 31 de diciembre de ese año se realizaron 46 mil 204 horas de monitoreo en la Zona de Tolerancia Cero y 208 detenciones acústicas en 25 de los sitios, mayormente en la zona oeste de la ZTC.
De acuerdo con el titular de la Conanp, Humberto Adán Peña Fuentes, todos los individuos que se avistaron en el 2023 “se vieron sanos”.
¿Qué observará el crucero en la edición 2024?
Para esta segunda edición el Crucero de Observación de vaquita marina tendrá dos embarcaciones principales por parte de la organización Sea Shepherd: Seahorse y Sirena de la Noche.
En ambas embarcaciones habrá más de ocho observadores de la comunidad de San Felipe, Baja California. Mientras que, 11 más se encontrarán en otras naves.
Para las capturas audiovisuales que se prevé tener de vaquitas marinas, la Conanp confirma que contarán con el apoyo de cámaras fotográficas y drones.
“Es un ejercicio que por segundo año sigue las mismas metodologías porque queremos que tengan sus márgenes de comparabilidad, que puedan tener una evolución en el componente en el comportamiento de las poblaciones pero, sobretodo que nos permita tomar decisiones en la gestión y protección de esta especie y de la cual el Estado es responsable ya que es endémica en nuestros mares”, añadió en conferencia Peña Fuentes.
Así será el monitoreo acústico y visual de la vaquita marina
El doctor Armando Jaramillo Legorreta, director regional de la Península de Baja California y Pacífico Norte de la Conanp, explicó cómo será el trabajo de campo que realizarán sobre la monitorización acústica y visual durante el crucero de observación.
Para los registros acústicos utilizarán un detector acústico autónomo denominado F-POD. Esta herramienta tiene forma de tubo, son automatizadas y funcionan a partir de baterías y tarjetas de memoria.
Estos detectores se colocan en alguno de los 55 sitios de muestreo dentro de la Zona de Tolerancia Cero de la vaquita marina. Para ello, se preparan e intercambian esos detectores para tenerlos en, al menos, 30 sitios donde se conoce que hay gran cantidad de actividad acuática de vaquitas marinas.
Este muestreo se realiza diariamente durante los trabajos de observación para analizar los datos que arroje. Esto permite saber en qué regiones geográficas dentro de la ZTC hubo actividad de esta marsopa en las últimas 24 horas.
“Esos datos los analizamos y realizamos un pequeño informe que se distribuye al componente acústico para planear cuáles son los sitios en los que se enfocarán en los siguientes días de navegación”, añadió Jaramillo Legorreta.
De acuerdo con la Conanp, el trabajo de campo se desarrolla por un grupo de pescadores con más de diez años de experiencia en preparación de anclajes y lances de equipo, según informaron en conferencia.
En cuanto al trabajo visual de campo, este se enfoca en recibir la información acústica de cada día para que, desde el mar y bajo buenas condiciones climáticas, se utilicen los datos acústicos recabados para decidir las zonas de búsqueda del día.
Para esto, las embarcaciones que se utilizarán pertenecen a la organización Sea Shepherd con la nave principal que es el Seahorse y la segunda, Sirena de la Noche. Además de la embarcación que los jóvenes de San Felipe utilizarán.
Según explicó la Conanp, en la embarcación de Seahorse utilizarán instrumentos de observación como el Bigeyes que son binoculares de gran alcance para los avistamientos principales, es decir, para detectar crías de vaquita marina.
Desde la embarcación Sirena de la Noche los observadores a bordo usarán binoculares de mano para seguir grupos de vaquitas en el mayor tiempo posible, según señaló el doctor Jaramillo Legorreta.
“Esto les permite ingresar información para saber hacia donde se ha movido el grupo de vaquitas que están avistando en ese momento y, de manera importante, a bordo hay equipo electrónico y software especializado que permite hacer un seguimiento fino para saber hacia donde están yendo las vaquitas para tratar de seguirlas el mayor tiempo posible”, añadió.
Cabe destacar que este Crucero de Observación recorrerá las zonas este y norte de la Zona de Tolerancia Cero con el objetivo de buscar vaquitas marinas donde históricamente hubo avistamientos.
“Queremos corroborar si sigue habiendo vaquitas para establecer mejor medidas de conservación”, señaló Jaramillo Legorreta.
Una vez recolectados los datos, los observadores ingresarán la información en un expediente para responder a dos preguntas importantes durante el trabajo de campo: cuántas crías distintas se observaron y cuántos animales distintos, incluídas las crías se observaron.
A ese método se le conoce como ‘Elicitación de expertos’ y será guiado por un profesional que moderará la sesión y eliminará sesgos a partir de la información que se tenga disponible.
Esta información permitirá tener de forma probabilística, según explicó la Conanp, de avistar animales distintos durante el Crucero de Observación acorde con la experiencia de los observadores.
Disminuye presencia de pangas y redes de enmalle
Peña Fuentes añadió también que, de acuerdo con los resultados del Crucero de Observación de 2023 se observó una disminución de más de 90% de la presencia de pangas y redes de enmalle dentro de la Zona de Tolerancia Cero de la vaquita marina.
El capitán Juan Luis Miraflores Ruiz de la Secretaría de Marina, habló también de los trabajos que realizan con el Plan de Acción de CITES como integrantes del grupo intergubernamental para la protección de vaquita marina.
“Sabemos que el plan es un verdadero ejemplo de los esfuerzos que realiza nuestro país para la protección de la vaquita marina. De manera complementaria, la Secretaría de Marina a través de la Unidad de Investigación y Desarrollo Tecnológico está realizando dos líneas de acción dentro de este plan”, señaló Miraflores Ruiz.
Semar señaló mantener el compromiso de tener un sistema de videovigilancia de largo alcance para identificar todo tipo de embarcaciones que ingresen a la ZTC, así como al área de refugio de la vaquita marina, tanto en el día como en la noche.
También mencionó el sistema de monitoreo satelital que realizan en colaboración con pescadores de San Felipe. Según informó el capitán, en marzo pasado, realizaron pruebas de este sistema que “traerá beneficios para el control de la pesca en el Alto Golfo de California”.
Por último, Semar recordó el Proyecto Bloques de Concreto en el mar con el que, hasta ahora, han colocado poco más de 400 bloques. Según un vídeo que mostraron en conferencia de prensa, desde su colocación, los ganchos que forman parte de los bloques de concreto solo muestran microorganismos como consecuencia de la oxidación del metal.
El capitán Miraflores Ruiz recordó que la Manifestación de Impacto Ambiental del Proyecto Bloques de Concreto se realizó por cinco años.