Educación no fue prioridad para candidatos presidenciables en sus campañas: Mexicanos Primero

Luis Adrián Ramírez
29 mayo 2024

Las diversas propuestas dejan ver un cierto desconocimiento de las diversas dificultades que el personal docente, el estudiantado y las familias enfrentan para que día a día, los estudiantes estén, aprendan y participen en la escuela y ejerzan su derecho a aprender, señala la organización

Durante el tiempo de campañas, los candidatos presidenciables no trataron el tema de la educación con la prioridad que corresponde a su trascendencia o a la envergadura y complejidad de su problemática, señaló la organización Mexicanos Primero en su reciente comunicado ¿#AprenderImporta?

“Durante esta campaña presidencial se plantearon una variedad de propuestas, pero todavía no se alcanza a apreciar cómo se articulan dentro de un proyecto educativo con una visión de largo plazo, vinculado a su vez, al proyecto de desarrollo del País que cada contendiente habría de liderar si llega a ocupar la Presidencia de la República”, destacó el documento.

Hizo énfasis que las diversas propuestas de los tres candidatos presidenciables dejan ver un cierto desconocimiento de las diversas dificultades que el personal docente, el estudiantado y las familias enfrentan para que día a día, las niñas, niños y adolescentes estén, aprendan y participen en la escuela y ejerzan su derecho a aprender.

“De inicio, esto es evidente en el tiempo que se destinó a la educación en el primer debate presidencial que apenas rebasó los 10 minutos en el que se incluyó la educación como parte de los temas sociales del País”, denunció Mexicanos Primero.

La organización apuntó sobre la cuestionable factibilidad de las propuestas que hacen los candidatos, como la entrega becas a estudiantes de educación básica y media superior, en algún caso, a la totalidad, y la ampliación de la jornada escolar.

Mexicanos Primero enlistó una serie de preguntas en cuanto a la factibilidad de las pocas propuestas que lanzaron los candidatos: ¿Se destinarían los recursos presupuestales necesarios para hacer esto posible? ¿Cómo asegurar los requerimientos de personal docente o de alimentación, entre otros, en las escuelas con jornada extendida? Pero, más allá de esto, ¿en qué medida la implementación de propuestas como estas contribuiría a que las y los estudiantes alcancen, por lo menos, un nivel de desarrollo en sus aprendizajes fundamentales que les permita seguir aprendiendo?

¿De qué forma se resolvería la falta de docentes durante todo el ciclo escolar en cada grupo de estudiantes? ¿De qué forma se fortalecería al personal docente y al modelo educativo para resolver este problema? Y, más aún, ¿qué futuro pueden tener como adultos quienes en su momento no consiguieron desarrollar estos aprendizajes?

“Cuando en las escuelas, lo básico no está garantizado y hay un incumplimiento considerable del objetivo por excelencia de la educación, es totalmente pertinente cuestionar las propuestas que se hacen en las campañas electorales”, señaló Mexicanos Primero.

“En México, una de cada tres personas está en edad de cursar la educación básica y media superior; sus opciones de futuro dependen en medida importante de la calidad de la educación que se les ofrezca hoy. La tarea educativa es una responsabilidad de toda la sociedad, por lo que las aportaciones de distintos actores sociales coadyuvarían a tomar las decisiones de política educativa más pertinentes”, agregó.

Enfatizó en que en México es impostergable garantizar las condiciones para que niñas, niños y adolescentes, cuenten con una educación que garantice su derecho a aprender.

Infraestructura educativa

Mexicanos Primero explicó en su comunicado que el derecho a la educación no se puede entender sin la triple inclusión que comprende las dimensiones de estar, aprender y participar en la escuela, las cuales integran el derecho a aprender, finalidad última del derecho humano a la educación.

“Estas dimensiones se conciben en el marco de las perspectivas de derechos humanos, igualdad, equidad, inclusión y de género”, se lee en el comunicado.

Mexicanos Primero puso de relieve una serie de problemas del sistema educativo y en particular, de la educación básica, que afectan el cumplimiento de este derecho.

“Con base en el análisis riguroso de la evidencia disponible, la organización señaló que, en las escuelas, lo básico no está garantizado. Esta expresión se refiere a las condiciones de infraestructura y equipamiento de las escuelas, pero también a que éstas cuenten con el personal docente con el perfil de desempeño adecuado y en número suficiente”, señaló.

Detalló que una alta proporción de escuelas carecen de los servicios básicos de electricidad y agua potable, así como de sanitarios adecuados e independientes para niñas y niños o las y los adolescentes, además de las deficiencias en el mantenimiento a los planteles escolares.

“De un total de 238 mil escuelas de preescolar a educación media superior, 26 mil 463 operan sin servicio de electricidad; 56 mil 109 sin agua; 43 mil 558 sin lavamanos; y, en 5 mil 950 no hay sanitarios. En conjunto, cuatro cada 10 escuelas carecen de los cuatro servicios básicos completos”, informó Mexicanos Primero sobre la infraestructura.

Informó también que el equipamiento de las escuelas con computadoras de uso pedagógico y acceso a internet son también deficientes al señalar que solamente el 46.3 por ciento de los planteles escolares en el País cuentan con computadoras de uso pedagógico y 29.3 por ciento tienen acceso a internet.

“Es decir, en el país, un cuantioso número de escuelas carece de lo básico para propiciar un ambiente favorable al aprendizaje de las y los estudiantes, lo que contraviene los principios de inclusión y de equidad, en detrimento de la garantía del derecho a aprender”, denunció.

Explicó que garantizar lo básico en las escuelas de preescolar, primaria, secundaria y media superior para que las y los estudiantes cuenten con las condiciones mínimas indispensables para ejercer este derecho requiere de una inversión estimada de 51 mil 932 millones de pesos, equivalente al 0.15 por ciento del Producto Interno Bruto (PIB).

Agregó que para que cada escuela cuente con al menos un salón de cómputo se requiere invertir 165 mil 700 millones de pesos, y para servicio de internet y equipamiento satelital en las escuelas de zonas rurales, una inversión anual de 1 mil 325 millones de pesos. De esta forma, la inversión total estimada asciende a 273 mil 080 millones de pesos.

Aprendizajes fundamentales y perfil docente

Mexicanos Primero resaltó el problema del rezago en los aprendizajes fundamentales, que se agravó con el cierre de las escuelas durante la pandemia por Covid-19.

La organización apuntó que por este motivo, en México, las y los estudiantes perdieron 1.5 años de educación presencial.

Asimismo, Mexicanos Primero destacó los resultados de la prueba PISA, aplicada en 2022, los cuales indican que 2 de cada 3 estudiantes de 15 años no pueden usar sus aprendizajes en matemáticas para resolver problemas de la vida cotidiana y 1 de cada 2 no comprende lo que lee.

“Frente a estos resultados, es indispensable insistir en la necesidad de priorizar el desarrollo de los aprendizajes fundamentales en la escuela, así como de hacer el seguimiento de los avances mediante la evaluación sistemática, periódica y metodológicamente consistente, de los logros de aprendizaje, la cual requiere complementarse con la evaluación de los distintos componentes del Sistema Educativo Nacional. Sólo con base en la evidencia que aporten estas evaluaciones será posible mejorar el diseño e implementación de las políticas educativas”, informó.

Habló sobre el perfil de desempeño profesional de los docentes para conducir un proceso de enseñanza y aprendizaje apropiado a cada contexto.

Apuntó que la formación inicial del personal docente no atiende los desafíos que enfrentan en el ejercicio de su profesión relacionados con distintas situaciones sociales, culturales e incluso emocionales del estudiantado; los diversos tipos de servicio educativo (escuelas multigrado o telesecundarias, por ejemplo); el desarrollo de las tecnologías digitales; o la protección y cuidado de las y los estudiantes en las escuelas.

Señaló que es indispensable asegurar opciones de formación continua que respondan efectivamente a las necesidades de cada docente y garantizar su operación en condiciones óptimas.

De acuerdo con un análisis de Mexicanos Primero sobre el presupuesto de egresos de la federación, los recursos para formación continua equivalen a 96 pesos anuales por docente son insuficientes para atender la demanda.

La organización sostuvo que es necesario mejorar las condiciones de trabajo docente con una remuneración digna y justa para maestras y maestros, proporcional a la relevancia y trascendencia de su labor educativa.

“La normatividad que regula la carrera profesional docente requiere ofrecer posibilidades de desarrollo basadas en evaluaciones de desempeño pertinentes y con reglas claras, cuya implementación se haga conforme a lo dispuesto en la norma y de forma transparente”, señaló.