Pradera Dorada, Villas del Sol y periferia de Mazatlán, focos rojos en violencia de género: Immujer
Emma Rodríguez Choreño, directora del Instituto Municipal de las Mujeres, declaró que existe un concentrado de mujeres vulnerabilizadas y en situación de violencia familiar
La directora del Instituto Municipal de las Mujeres, Emma Rodríguez Choreño, mencionó que tienen un registro sobre las colonias con mayor incidencia en violencia hacia la mujer, por lo que canalizan sus programas en estas zonas.
“Estamos ahorita en las praderas Pradera Dorada, Villas del Sol, es en donde tenemos más incidencia, también están las colonias que están en la periferia, por ejemplo Rincón de Urías, tenemos Casas Económicas”, detalló la directora de Immujer.
Rodríguez Choreño declaró que existe en el municipio un concentrado grande de mujeres vulnerables y vulnerabilizadas, en situaciones de violencia motivadas por el consumo de sustancias como alcohol y drogas, que potencializan los índices de violencia familiar principalmente.
“La violencia familiar se adhiere a dos situaciones a la ignorancia y desafortunadamente a la ingesta o adquisición de los desinhibidores, a la droga más común que es el alcohol que abre las puertas a otras”.
Explicó que en Immujer se enfocan en el empoderamiento de la mujer mediante la revolución de las conciencias, la cual implica el hacerle saber los derechos y obligaciones que tienen según lo que dicta la Constitución, haciendo énfasis en la conceptualización de la igualdad y la equidad.
“Equidad es lo que nos falta, igualdad es lo que merecemos, entonces haciendo incidencia en el conocimiento de todo lo que tenemos las mujeres por derecho constitucional”, dijo.
“Primero así la forma empoderarla y también adiestrarla en diferentes actividades, la libertad económica, eso ya nos permite tener poder y tener no tolerancia a ningún hecho de violencia”, añadió.
Los reportes que se dan en su mayoría son por violencia física, violencia psicológica, violencia jurídica, en cuanto a la violencia física las agresiones pueden ir desde algo tan mínimo como un pellizco, lesiones más graves como golpes o hasta terminar con la vida de la víctima.
Por esta razón, y con el objetivo de educar y concientizar a las mujeres, en la tipificación de la violencia y de esta manera puedan identificar si están sufriendo alguno de estos tipos de violencia, se les proporciona un violentómetro, que el Instituto Politécnico Nacional diseñó en base al análisis de estas conductas.
“Ahorita tenemos aquí la oportunidad de dar el violentómetro que es una escala de detección que estamos sufriendo violencia, desde las lesiones incluso las invisibilizadas, por ejemplo un desaire, una palabra, una denostación, hasta situaciones que generan más y están de acuerdo al semáforo”.
“Nos permite ubicar, visibilizar y dejar de ser violentadas y recurrir alguna posibilidad psicológica, de ayuda jurídica o de trabajo social para ser fortalecidas”, expresó.