Gran Acuario Mazatlán Mar de Cortés, de 2023 a 2289, un sueño hecho realidad: Tatiana Bilbao
La arquitecta mexicana con proyección internacional y encargada del proyecto del nuevo recinto marino de Mazatlán narra cómo fue construido realidad el sueño apoyado por el empresario hotelero Ernesto Coppel
MAZATLÁN._ El Gran Acuario Mazatlán Mar de Cortés es un sueño hecho realidad, construido en 2023, pero que emergió y fue encontrado en 2289, narró la arquitecta mexicana, Tatiana Bilbao, encargada de este proyecto, que este martes 30 de mayo fue inaugurado oficialmente.
Ante el desarrollador y empresario turístico Ernesto Coppel Kelly; del Secretario de Turismo federal, Miguel Torruco Marqués; del Gobernador Rubén Rocha Moya; de la Secretaria de Turismo estatal, Estrella Palacios; del Alcalde Édgar González; de Guillermo Zerecero, director del proyecto; y demás invitados especiales, Tatiana Bilbao narró la historia de cómo surgió este proyecto hasta que se hizo realidad.
“Estoy aquí muy emocionada, hoy en un día muy especial, hablando ante ustedes simplemente como una representante de todos los muchos miles de seres vivos que participaron directa e indirectamente para hacer este proyecto realidad, ante la imposibilidad e incluso vergonzoso desconocimiento del nombre de la mayoría de los implicados en este proceso, sí quiero mencionar el de algunos cuántos. Gracias Ernesto, gracias por creer en ésto, gracias por creer en tu ciudad, gracias por creer en tu gente, gracias por creer en nosotros. José Luis Mogollón, gracias por ser clave en este proceso, Sandro Landucci, que no nos pudo acompañar pero que ha sido determinante para esta creación; Guillermo Zerecero, Martín Martínez, pero sobre todo y ante todo mis socios, Alba Cortés, Soledad Rodríguez, Mariano Castillo, Juan Carlos Benlliure y Catia Bilbao”, dijo.
La arquitecta agradeció a sus progenitores, su mamá presente y su papá desde el cielo.También agradeció a las ballenas y a las tortugas que no fueron invitadas.
“La arquitectura se construye por y sobre un colectivo, normalmente no se reconoce y es el nombre de todos esos personajes conocidos, sobre los cuales a mí me gustaría hablar aquí, no solamente es aquél que hizo cada tornillo que estuvo puesto en esto, cada persona que amarró los alambres, si no cada piedra que se extrajo para poder producir este edificio, pero además ese edificio, es el edificio que no se puede reconocer tampoco muy fácilmente, no solo las manos y los cuerpos que lo produjeron, pero porque no tiene una etiqueta, es un edificio que habla de un tiempo pasado pero en el futuro y eso igual no es fácil de entender”, señaló ante los presentes.
“Su historia empezó hace mucho, pero tal vez podemos decir que falta mucho para que empiece, Cuando Ernesto, Sandro y Guillermo se acercaron a nosotros, nos hicieron un llamado a hacer un edificio que se viera como un acuario, pero que la vez se arraigara como una pieza identitaria de esta ciudad, y sobre todo que pudiera hablar de todo el Mar de Cortés. Cuando recibimos esa petición, para mí fue muy difícil tomar esa decisión de aventurarme a hacer algo así, y les platicó brevemente por qué”.
Dijo que se le vino a la mente el mural de Diego Rivera, al escuchar la palabra Acuario.
“Al escuchar la palabra Acuario me viene a la mente el mural de Diego Rivera, llamado el hombre controlador del universo, un mural que se pintó en 1934 y está en el Palacio de Bellas Artes en la Ciudad de México, después de un mural que fue borrado del Rockefeller Center en Nueva York, aquí en este mural se ve a un hombre que cree que con las máquinas todo lo domina, un acuario para mí hace exactamente eso, a través de la tecnología hemos logrado traer a nuestro mundo un mundo que no podemos ver, que la mayoría que nuestros ojos no pueden percibir, pero creo profundamente que esa relación que desarrollamos en nuestro entorno, pensando y creyendo que podemos dominarlo e incluso ahora hablamos que lo estamos destruyendo”.
Bilbao señaló que el ser humano se ha alejado del ecosistema.
“El mundo nos está expulsando de él, digo que creemos que lo dominamos ahora estamos pensando que en algún momento lo podemos destruir, lo único que está pasando es que este sistema, este ecosistema natural, este planeta nos está expulsando a nosotros, nosotros somos los que nos hemos alejado de este ecosistema al cual pertenecemos, nosotros somos naturaleza, y nosotros no dominamos ni destruimos a esta, sino es ella la que lo hace, entonces cómo hacer un acuario así, cómo hacer un edificio que pudiera responder a ello, cómo hacer un acuario que pareciera un acuario como el Mar de Cortés”, narró la arquitecta.
“Y entonces nos contamos una historia para poder imaginarnos, porque no había una referencia con la que pudiéramos trabajar, pensamos y nos imaginamos que habíamos llegado al año 2289 y nos habíamos encontrado un edificio construido en 2023, sin saber para qué ni por qué, lo único que supimos es que en el 2100 el agua subió tanto del mar, que lo inundó, el agua sabemos que recedió (retrocedió) en el año 2227, cuando llegamos abrimos caminos, generamos escaleras, y abrimos posibilidades para encontrarnos con un mundo que había tomado nuestro espacio, y esta es la historia que nos contamos para imaginarnos todo ello, los muros, las escaleras, los patios, las fuentes, y las peceras donde están los animales hoy, así con este cuento y con imágenes se lo presentamos a Ernesto, ante su mirada atónica, continuamos con la historia que al final del día nos encontramos en ella, platicando uno a uno, como si habláramos en el pasado, nos encontramos en la Atlántida, y nos encontramos también en el Mazatlán del 2289, por eso estoy profundamente agradecida a Ernesto que haya creído en esa ficción que nos hizo hacer realidad este increíble edificio”.
“Creo que teníamos dos objetivos fundamentales, el primero era cómo nosotros los seres humanos podemos a través de un edificio, como este, entender que somos naturaleza, y lo segundo cómo podemos regresar a pertenecer a ese ecosistema que tanto nos necesita para poder sobrevivir en este planeta. Yo espero por lo pronto llegar al año 2289 para comprobar que seguimos vivos porque lo logramos”, concluyó.