Gaza: Israel bombardea una zona humanitaria en Khan Younis, la ONU condena el ataque
Los informes preliminares dan cuenta de unos 40 muertos y más de 60 heridos. António Guterres afirma que es inadmisible el uso de armas pesadas en zonas densamente pobladas y vuelve a pedir un alto el fuego inmediato
Las fuerzas israelíes bombardearon este martes un área densamente poblada en Khan Younis, Gaza, dentro de una “zona humanitaria” designada por el propio Israel, causando la muerte de al menos 40 personas e hiriendo a unas 60 más, según informes preliminares.
El Secretario General de la ONU, António Guterres, condenó categóricamente el ataque, afirmó su portavoz.
“El uso de armas pesadas en zonas densamente pobladas es inadmisible. Los palestinos se habían trasladado a esta zona de Khan Younis en busca de refugio y seguridad, después de haber recibido repetidas instrucciones de las autoridades israelíes al respecto”, dijo Stephan Dujarric en nombre de Guterres durante su encuentro habitual con la prensa.
El Secretario General “reitera una vez más su llamamiento a un alto el fuego inmediato y a la liberación inmediata e incondicional de todos los rehenes israelíes y de otras nacionalidades que siguen detenidos en Gaza”, puntualizó Dujarric.
En el mismo tenor, el coordinador especial de la ONU para el Proceso de Paz en Medio Oriente, Tor Wennesland, repudió el ataque en los términos más enérgicos y reiteró nuevamente su llamado a respetar las leyes humanitarias internacionales.
Cuando fue embestido, el campamento de Khan Younis albergaba a miles de gazatíes.
“Aunque las fuerzas israelíes dijeron que atacaron a militantes de Hamás que operaban en un centro de comando y control integrado en la zona humanitaria, el derecho internacional humanitario, incluidos los principios de distinción, proporcionalidad y precauciones en los ataques, deben respetarse en todo momento”, enfatizó Wennesland.
La masacre de civiles debe cesar
El enviado recordó que los civiles nunca deben ser utilizados como escudos, y agregó que esta última agresión subraya una vez más que ningún lugar es seguro en Gaza.
Wennesland volvió a conminar a todas las partes a llegar a un acuerdo que permita la liberación de todos los rehenes y un alto el fuego en Gaza.
La masacre de civiles debe cesar y esta terrible guerra debe terminar, recalcó.
El diplomático argumentó que, en última instancia, “sólo un camino político que trace pasos tangibles e irreversibles hacia el fin de la ocupación y el establecimiento de una solución de dos Estados puede poner fin de manera duradera al sufrimiento de palestinos e israelíes”.
La ONU está lista para apoyar todos los esfuerzos encaminados a ese objetivo, añadió.
Convoy humanitario detenido a punta de pistola
En tanto, la Agencia de la ONU para los Refugiados Palestinos (UNRWA) informó que el ejército israelí detuvo el lunes un convoy que se dirigía al norte de la Franja de Gaza para vacunar contra la polio a los niños y lo retuvo durante más de ocho horas, a pesar de que el operativo se había coordinado previamente.
El convoy transportaba personal nacional e internacional que viajaba para desplegar la campaña de vacunación liderada por la ONU en la ciudad de Gaza y el norte de Gaza, explicó el comisionado general de UNRWA, Philippe Lazzarini.
El titular UNRWA señaló que el convoy fue detenido a punta de pistola justo después del puesto de control de Wadi Gaza, y detalló que los trabajadores humanitarios sufrieron amenazas de detención.
Además, los vehículos blindados de la ONU fueron dañados con excavadoras.
Lazzarini indicó que el personal y el convoy fueron liberados y regresaron sanos y salvos a la base, pero advirtió que la campaña de vacunación estaba en riesgo.
“Este incidente es el último de una serie de violaciones contra el personal de la ONU, incluidos tiroteos contra convoyes y arrestos por parte de las fuerzas armadas israelíes en los puestos de control a pesar de la notificación previa”, apuntó.
“El personal de la ONU debe poder llevar a cabo sus tareas de forma segura y estar protegido en todo momento de conformidad con el derecho internacional humanitario. Gaza no está exento de esas leyes”, puntualizó.
Las excavadoras embistieron los vehículos con el personal dentro
Por su parte, Stephan Dujarric especificó que el convoy transportaba a doce miembros del personal y que su movimiento se coordinó plenamente con las fuerzas israelíes y todos los detalles se facilitaron con antelación.
“Cuando el equipo fue detenido en el puesto de control de Al Rashid, las fuerzas israelíes querían retener a dos miembros del personal de la ONU que se encontraban en el convoy para interrogarlos. La situación se agravó muy rápidamente y los soldados apuntaron sus armas directamente hacia nuestro personal en el convoy”, relató.
Prosiguió diciendo que los vehículos de la ONU fueron rodeados por las fuerzas israelíes y se dispararon tiros. “A continuación, se acercaron al convoy tanques de fuerzas israelíes y una excavadora, que procedieron a embestir los vehículos por delante y por detrás, compactando el convoy con el personal de la ONU en su interior”.
“Una excavadora dejó caer escombros sobre el primer vehículo, mientras los soldados israelíes amenazaban al personal, lo que les impedía salir de sus vehículos de forma segura. El convoy permaneció a punta de pistola mientras altos funcionarios de la ONU se pusieron en contacto con las autoridades israelíes en un intento de reducir la escalada de la situación. Los dos miembros del personal fueron interrogados y luego se les devolvió la libertad. Después de siete horas y media en el puesto de control, el convoy regresó a la base al no poder completar su misión humanitaria, pero todo el personal regresó”, declaró Dujarric.
La vacunación continúa
En un tuit publicado más tarde, la UNRWA anunció que, pese al retraso del convoy, sus equipos pudieron vacunar a miles de niños en el norte de Gaza hoy.
“Esta es una carrera contra el tiempo”, abundó el organismo. “La propagación de la polio es una amenaza muy real. Nuestros colegas siguen haciendo lo imposible para llegar a todos los niños menores de diez años en toda la Franja de Gaza”.
La Organización Mundial de la Salud (OMS) que lleva a cabo la campaña junto con la UNRWA y el Fondo para la Infancia (UNICEF), precisó que el convoy retrasado estaba compuesto por dos misiones: un equipo llevaba combustible y vehículos para la tercera fase de la campaña de vacunación, mientras que otro intentaba llevar combustible al Hospital Al-Shifa en la ciudad de Gaza, que lo necesitaba con urgencia.
El centro médico más grande de la Franja de Gaza reabrió su departamento de emergencias a principios de septiembre, después de que fuera destruido en una incursión israelí en noviembre de 2023, tras las denuncias de que grupos armados palestinos estaban utilizando el lugar con fines militares.
“No es un incidente aislado”, dijo el portavoz en Ginebra de la OMS, Tarik Jašarević, quien lamentó la falta de un “mecanismo de solución de conflictos que funcione” aún once meses después del inicio de la guerra de Gaza.
Entre el 7 y el 10 de septiembre, los equipos de la OMS intentaron llegar al hospital Al-Shifa cuatro veces sin éxito.
“Pero lo intentaremos de nuevo hoy. Hacemos todo lo posible, pero esto es una pauta: en agosto, el número de solicitudes de acceso denegadas se duplicó en comparación con los meses anteriores”, acotó.