Sequía se extiende, lluvias se retrasan en Sinaloa; la crisis hídrica continuará: Conselva
En la Perspectiva Climática para Sinaloa en los próximos tres meses, el Servicio Meteorológico Nacional marca importantes variaciones en los patrones de lluvia y temperatura
#EmergenciaAgua es una serie periodística producida por Conselva para impulsar en la agenda pública la discusión sobre la crisis hídrica y promover soluciones basadas en la naturaleza dentro de los marcos legales y sociales.
La temporada de lluvias comenzará con retraso en Sinaloa, de acuerdo con la Perspectiva Climática para Sinaloa del Servicio Meteorológico Nacional, el cual estima que el mayor volumen se concentrará en el sur del estado en junio, julio y agosto.
Y dado el comportamiento errático de las lluvias que se concentrarían en el sur del estado y las altas temperaturas que se esperan y que evaporan la humedad, se considera complicado que las presas recuperen un nivel óptimo, más si se considera que prácticamente están vacías.
Además, el fenómeno de La Niña, que se estima que también ocurra entre junio y agosto podría alterar los pronósticos, pues si bien provocaría fuertes lluvias en el Golfo de México, quizá no ocurra igual en el lado del Pacífico.
En 2020, se instaló La Niña y fue uno de los años más secos en Sinaloa de los últimos 40 años, según los registros de la Estación Climatológica de la Facultad de Biología y de la Comisión Nacional del Agua, recuerda César Higareda Romero, investigador de la UAS.
El pronóstico hasta el momento
El reporte de Conagua describe que las lluvias de junio oscilarán entre 10 y 70 milímetros, concentrándose la mayor cantidad en el oriente del estado, es decir, en la frontera con Durango. Pero si se precipita en sitios deforestados, no se tendrá una recarga significativa de ríos y acuíferos.
“El pronóstico que se tiene es con un inicio con cierto retraso, lo que es junio y parte de julio pudiéramos tener esta tendencia de un comportamiento con un déficit, pero que puede ser recuperable entre julio y agosto”, señala Jesús Ernesto Castro Castro, jefe del Servicio Agrometeorológico de Confederación de Asociaciones Agrícolas del Estado de Sinaloa.
Para julio, podría llover más, entre 100 y 300 milímetros de lluvia. Se esperan precipitaciones torrenciales principalmente en el sur del estado, así como en algunos puntos de los municipios de Sinaloa y San Ignacio.
“La zona sur va a ser la más favorecida, se espera que ahí haya mayor acumulación de lluvia. Las precipitaciones se irán comportando gradualmente desde los 100 milímetros en la zona norte, hasta los 250 milímetros en la zona sur”, explicó Castro Castro.
El SMN anticipa para agosto acumulados de lluvia entre 150 y 300 milímetros, con probabilidades de alcanzar hasta 400 milímetros en el sur del estado.
La crisis de agua no se soluciona con lluvias
Si bien la esperanza de Sinaloa está en que los pronósticos antes mencionados se cumplan, aunque parezca contradictorio, la crisis de agua no se solucionará con la llegada de las lluvias, asegura Conselva, Costas y Comunidades A.C.
De acuerdo con la organización, los efectos de la sequía en la infraestructura verde son acumulativos, esto significa que los daños provocados en las cuencas por el estiaje no se restauran completamente con la llegada de la época de lluvias, sino que cierto daño prevalece y es este el que se va acumulando, empeorando cada año las condiciones de las cuencas y reduciendo así su capacidad de captar e infiltrar agua.
“Aunque llueva vamos a captar e infiltrar menos agua, porque nuestras cuencas siguen dañadas. Para superar la crisis de agua y prevenir que volvamos a estar en esta misma situación el próximo año, se requiere que la lluvia sea efectiva, es decir que se recargue el manto freático y se formen ríos”, expone Sandra Guido Sánchez, directora ejecutiva de Conselva, Costas y Comunidades A.C.
“Para ello se requiere restaurar la vegetación y el suelo, que son la infraestructura verde que capta el agua en la cuenca”.
De lo contrario, las lluvias pronosticadas podrían traer más afectaciones que beneficios, pues de ser torrenciales afectarían aún más el estado del suelo de la cuenca, que al estar desnudo (sin vegetación que amortigüe la caída del agua) sufrirá erosión hídrica provocando el levantamiento de sedimento que suele ser arrastrado a ríos, y posteriormente a nuestras presas, azolvándolas. (Para más información >>> Escasez de agua: ¿Por qué las cuencas son la respuesta ante la crisis en Sinaloa?).
Presas pudieran recuperarse... solo un poco
El jefe del Servicio Agrometeorológico de CAADES expuso que, en condiciones normales, las presas de Sinaloa pudieran alcanzar entre el 50 y el 60 por ciento, pero los niveles en los que actualmente están, es posible que no alcancen esos porcentajes.
Dijo que, aunque se prevén lluvias importantes para la zona serrana, donde están las cuencas que alimentan los ríos que van a las presas, en los últimos años las precipitaciones han sido más erráticas y ha llovido más en el valle o en la costa que en las partes altas.
“Es difícil estimar de acuerdo a estos modelos qué tanto pudieran recuperarse las presas, porque están a niveles muy bajos”, insistió.
Estos pronósticos para Sinaloa destacan la importancia de la implementación de la Agenda Hídrica Integral para Sinaloa, propuesta por Conselva, para fortalecer la producción de agua y eficientar su uso.
PARA QUE EL AGUA ALCANCE debemos contar con lluvias efectivas. Estas se lograrán con la protección y restauración de la infraestructura verde, como Conselva propone en el punto 1 de la Agenda Hídrica Integral para Sinaloa, Proteger y restaurar las cuencas que son el origen del agua y otros servicios ambientales.
La propuesta es ubicar las áreas de mayor producción de agua de las 11 cuencas sinaloenses, que alimentan arroyos y ríos, los cuales, y por lo tanto a las presas, para declararlas zonas protegidas.
Y en un segundo término, restaurar la vegetación y suelos para fortalecer la capacidad de producción hídrica.
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