Conoce qué tipos de retiros existen por desempleo en Afore
Perder el trabajo es una situación difícil de enfrentar. La persona tiene que sobrellevar los gastos cotidianos, pagar sus deudas o cubrir costos de emergencia. Por eso, es necesario considerar todas las opciones disponibles y saber qué tipos de retiros existen por desempleo en Afore.
El retiro parcial es un derecho que adquieren los trabajadores al cotizar en el IMSS o el ISSSTE. Pero, ¿qué tipos de retiros existen por desempleo en Afore? Son dos las únicas razones por las que alguien puede sacar dinero de su cuenta de ahorro con anticipación: por quedarse sin trabajo y por matrimonio.
Hablemos del primer caso. El apoyo económico que se ofrece por desempleo es tomado del dinero acumulado en la cuenta individual correspondiente a la pensión. Aún así, hay un aspecto positivo: sirve como comodín si la persona transita por una etapa difícil para conseguir recursos. Por lo tanto, podría decirse que es un préstamo recomendable para solventar emergencias.
Para iniciar el trámite de retiros parciales de Afore por desempleo, se solicita tener mínimo 46 días inactivos en el mercado laboral y no haber atravesado este mismo proceso en los 5 años anteriores. Además, es necesario presentar los documentos básicos: comprobante de domicilio, identificación oficial y los datos de dos referencias mayores de edad.
Los requisitos se clasifican en dos modalidades:
● Tipo A
Se concede a los adscritos al IMSS con al menos tres años de antigüedad en el sistema y doce bimestres de cotización. La cantidad que pueden retirar son 30 días de su último salario base de cotización (SBC).
● Tipo B
Pone como condición contar con al menos 250 semanas cotizadas al momento de solicitar el retiro por desempleo. De ser así, se entrega la cantidad que resulte menor entre: recibir 90 días del salario base de cotización (SBC) o 11.5 por ciento del saldo de la subcuenta de retiro, cesantía y vejez (RCV).
Para afiliados al ISSSTE, se transfiere la cantidad menor entre 75 días del sueldo de los últimos cinco años o el 10 por ciento del saldo de la subcuenta de RCV.
Otros requisitos son: que el candidato actualmente no contribuya con el seguro social, haber cotizado durante dos o más años antes de la solicitud, tener tres o más años de registro en la Afore y contar con los recursos indispensables.
El trámite puede agilizarse si se inicia en línea, desde la página web de la administradora de fondos o desde la aplicación Afore Móvil, siempre y cuando se tenga el expediente digital biométrico actualizado.
Con una solicitud completa y autorizada por la Afore, el dinero puede entregarse después de tres días hábiles según la forma de pago seleccionada.
De la cantidad tomada, se descontarán semanas (no días) de cotización proporcionales al préstamo. Como resultado, es normal que disminuya el saldo de la cuenta y que se vea afectada la pensión.
Cabe señalar que para poder jubilarse bajo el régimen del año 1997, hay que alcanzar 1250 semanas cotizadas.
Quien decide tramitar este apoyo por parte de las Afores, también debe considerar que después puede devolver el dinero, así no verá disminuido ni afectado el rendimiento de su ahorro para el futuro.
De esta forma, una vez que la persona vuelve a integrarse en el mercado laboral, tiene la posibilidad de reponer de manera total o parcial el dinero solicitado a la Afore mediante aportaciones voluntarias. Esto es igual a compensar las semanas cotizadas que se restaron por consecuencia de la solicitud del retiro parcial.
La reintegración del monto prestado es sencilla, sólo hay que acudir a uno de los módulos de atención donde se indicarán los pasos a seguir. Será rápido y práctico, pero sobre todo es la mejor opción para recuperar el dinero guardado e invertido para cubrir el estándar de calidad de vida deseada durante la vejez.