Ciudad de los Niños, una institución de oro
"Con 50 años de ser el hogar de niños desamparados, ha forjado ciudadanos de bien con el apoyo de la comunidad"
Mazatlán._Los murmullos y sonrisas de sus pequeños habitantes, el cacaraqueo de las gallinas que pasean por la gran área verde y la paz que irradian las religiosas forman parte de la esencia y alegría de Ciudad de Niños.
La institución fue creada hace 50 años para dar protección a todo huérfano, abandonado o desamparado, y ha formado, de manera integral, a un sinfín de generaciones, logrando incorporarlas positivamente a la sociedad.
Sus inicios fueron en una pequeña casa en la Colonia Juárez, que se hizo grande con tejabanes y sus 24 habitantes.
Un año después surgió una oportunidad para mudarse a su actual edificio, en obra negra; no contaba con agua, luz, drenaje, ventanas ni puertas, pero aún así predominaba la felicidad de los niños, quienes tenían su gran espacio para correr, jugar, dormir y comer.
“En 1970 fue inaugurada la Cuidad de los Niños, de los 24 que teníamos, a los dos meses ya eran 54. Hemos tenido hasta 80 niños; ya ni sabíamos cómo nos llamábamos, pero siempre confiamos en el Señor”, explica la Hermana Velia Morales, encargada de la institución.
“Aquí estamos por obra de Dios, por la ciudadania mazatleca, bienechoras y el comité que nos ayuda. Todo es bien recibido, por ejemplo, los que traen ropa usada y que no les queda a los niños, se venden en un bazar en la Flores Magón”.
La Ciudad de los Niños recibe ayuda, pero tiene necesidades como alimentos, productos de aseo personal y uso doméstico, así como el pago de los servicios para su funcionamiento diario.
Para obtener recursos, el patronato, que acaba de renovarse, realiza diferentes actividades, como la rifa de mil dólares y próximamente una gala.
“Queremos establecer la gala de la Ciudad de los Niños, ayudada por el patronato y Raúl Rico. Siento que esta gala será algo muy fuerte económicamente”, comparte Clara Pelayo, presidenta del patronato.
Damas del patronato y religiosas de Ciudad de los Niños, durante la venta de pasteles en Un Día para Ayudar.
“Aunque haya ayudas, no se pueden mantener nada más con eso; se tienen que crear otros eventos para que puedan solventar estos gastos tan fuertes”, amplía.
Otro de los eventos recaudatorios en los que participan es la kermés Un Día para Ayudar, en la que han estado presentes desde la primera edición y se iniciaron con la venta de dulces, después ceviche y ahora pasteles, que son todo un éxito.
Los niños realizan diferentes actividades por la tarde, como tareas y juegos.
“Los pasteles son donaciones de varias personas, los invitamos a la kermés el domingo y felicito a Noroeste y Tecmilenio porque hay mucha gente necesitada”, menciona Clara.
“A veces no ponemos la suficiente atención, no nos damos cuenta de esta pobreza que tenemos. Hay que ponernos las pilas todos los mazatlecos para ayudar a todas esas personas tan necesitadas”.
EVENTO
Un Día para Ayudar
Organiza: Noroeste y Tecmilenio
Fecha: Domingo 25 de noviembre
Lugar: Universidad Tecmilenio
Horario: De 14:00 a 19:00 horas
Habrá: Venta de comida, bebidas, postres, juegos y espectáculo musical