Regresa a Hollywood

UNIV
15 noviembre 2015

"Regresa a Hollywood"

LOS ÁNGELES (UNIV)._ Tras una senda de varios años por el desierto de la irrelevancia, Kevin Costner está de vuelta en la cima de Hollywood; así lo refleja su trayectoria en los últimos meses y lo confirma McG, el director de su última película, 3 Days to Kill, quien pronostica que 2014 será el año del actor. 

El principio de esa resurrección artística comenzó con la miniserie para televisión Hatfields & McCoys (2012), un éxito de audiencia en EU que además le granjeó un Globo de Oro y un Emmy a Costner como Mejor Intérprete. 

El actor de 59 años capitalizó ese reconocimiento con una intervención memorable en Man of Steel y exhibiendo sabiduría en la reciente Jack Ryan: Shadow Recruit, pero es ahora, con 3 Days to Kill, de estrenó el viernes en EU, donde descubrirá si su nombre aún mantiene el atractivo para llenar las salas como protagonista. 

"Kevin Costner es la película", afirmó McG en una entrevista. "Está prácticamente en cada escena. Espero que exista apetito por ver una cinta liderada por su talento. Kevin está en un momento interesante de su carrera y eso me atrajo a tomar las riendas del proyecto. Sabía que era un reto que iba a exigir sacar lo mejor de mí". 

Costner encarna a un espía internacional que decide poner punto y final a sus arriesgadas aventuras y mejorar la relación con su exesposa e hija cuando descubre que le quedan unos pocos días de vida a causa de un cáncer terminal. 

Sin embargo, justo cuando emprende esa tarea, la CIA le propone una última misión por las calles de París que, de saldarse de forma positiva, le abriría las puertas a un tratamiento capaz de neutralizar la enfermedad. 

McG, un especialista del género de acción gracias a películas como Charlie's Angels, Terminator Salvation o This Means War, se proclama un fan del actor y asegura que No way out es una de sus películas favoritas, por lo que trabajar con Costner le resultó un privilegio y una responsabilidad. 

"Creo que ha manejado su carrera de forma inteligente", indicó el realizador. "Tiene tres hijos pequeños y ha encontrado tiempo para su familia, pero no ha parado de encadenar éxitos tras Hatfields & McCoys", agregó. 

"Con suerte le pasará como a Clint Eastwood, que también se retiró un tiempo, se tomó un periodo de introspección y volvió en este mismo punto de su carrera para hacer sus mejores trabajos". 

El actor de películas como The Untouchables, Robin Hood: Prince of Thieves, Field of Dreams o JFK estrenará en mayo Draft Day, de Ivan Reitman, donde regresa al mundo de los deportes que tanto disfruta, mientras prepara dos trabajos más para finales de año. 

Lógicamente, McG sabía que debía imponer su criterio al mismo tiempo que se beneficiaba de los consejos de Costner, ganador del Óscar al Mejor Director por Dances with wolves. 

"Si eres listo, debes escuchar. Le gusta discutir con pasión qué considera que es adecuado. Disfruto colaborando así. Él tiene más experiencia en ciertos aspectos y a mí me interesa hablar con gente muy inteligente para mejorar el resultado final de la película", declaró. 

Aunque la cinta lleva el sello frenético de Luc Besson como productor y coguionista, la historia presta más atención al conflicto familiar que a las explosiones, los tiroteos y las persecuciones de coches, ingredientes que aparecen como homenajes a películas icónicas de la década de 1970, como Rendezvous o The French Connection. 

De hecho, el filme, en el que aparecen Hailee Steinfeld y Amber Heard -la prometida de Johnny Depp-, supone una curiosa mezcla de géneros a medio camino entre el drama y la acción, salpicados con personajes secundarios repletos de humor. 

"No queríamos hacer un película de acción sin sentido, sino un trabajo de calidad donde primaran los personajes. Costner rezuma carisma y experiencia. Los espectadores ven en él a alguien al que le ha pasado factura su dedicación al trabajo y sienten empatía. Es un héroe desde la inteligencia y la eficiencia, no a través de las artes marciales", declaró McG. 

Costner, cuya fama de cowboy es objeto de burla en el filme, cumple a la perfección como figura de acción e incluso se permite un homenaje a The Bodyguard en el tramo final, pero también es capaz de emocionar en las escenas donde enseña a su hija a bailar y a montar en bicicleta, o cuando asiste al nacimiento de una recién nacida.
"Si he logrado sorprender a la gente y que salga contenta del cine, habré hecho bien mi trabajo", finalizó el cineasta.