Preserva Mario Iván Martínez el legado de ‘Cri Cri’

Noroeste/Redacción
25 julio 2019

"Ofrece a las nuevas generaciones la magia de don Francisco Gabilondo Soler"

A través del espectáculo “Descubriendo a Cri Cri”, Mario Iván Martínez preserva el legado artístico de Francisco Gabilondo Soler “Cri Cri”, el cual ha llevado a varios estados de la República Mexicana, cautivando a grandes y a chicos por igual y con el cual celebra el 110 aniversario del natalicio de quien debe ser el máximo exponente de música y literatura infantil de habla hispana.

El primer actor reveló que desde pequeño tuvo una conexión especial con la obra de don Francisco Gabilondo Soler, a través de su propia familia, y ahora busca subrayar su espíritu, su creatividad y lo mucho que dio y puede seguir dando a tantas generaciones.

“Mi padre me llevó al colegio cantando ‘Caminito de la Escuela’, como a muchos de mi generación. Por otro lado, la relación que gocé con mi abuela fue tan intensa, tan linda, tan entrañable, como la que don Pancho experimentó con la suya. Hay que recordar que le dedicó a su abuela dos canciones: ‘Di por qué’ y ‘El ropero’”, expresó.

El también productor no deja de descubrir e impactarse con la multiplicidad de aciertos en la obra de Gabilondo Soler, sus aciertos musicales, tonales, armónicos, literarios e imaginativos.

“Descubriendo a Cri Cri” es un espectáculo unipersonal, que no son sus canciones, que naturalmente se incluyen -como ‘El Ratón vaquero’, ‘El ropero’, ‘El baile de los muñecos’- sino también mucho material poco conocido de Cri Cri. ‘Pollitos jardineros, ‘Ratones bomberos’, ‘San Juan de los Charcos’, hay mucho material que vale la pena conocer”, aseguró.

Mario Iván Martínez reconoce que este es sin duda alguna el mayor privilegio de su carrera como cuentacuentos y actor, pero además es algo que está disfrutando mucho.

“Soy cuentacuentos en gran parte, debido a lo mucho que me hizo soñar despierto el ‘Grillito Cantor’. Al recibir el espaldarazo de don Tiburcio Gabilondo, hijo y heredero del material, del valiosísimo acervo de don Pancho, ser embajador de su obra sí constituye un enorme privilegio. A través de sus historias, de sus cuentos, de aquellos discos famosos de acetato de Reader’s Digest, de sus canciones, descubrí que era posible soñar despierto”, añadió.

* Con información y fotos de Internet.