‘Yo me considero un escritor... guionista es una palabra peyorativa’, dice Guillermo Arriaga
El autor participa en una charla virtual con Paco Ignacio Taibo, en la página del Fondo de Cultura Económica
Cuando le preguntan cuándo volverá a la literatura, Guillermo Arriaga responde: “nunca me he ido”, y es que escribir para cine lo hace escritor, no un guionista.
“Yo me considero un escritor, guionista es una palabra un poco peyorativa porque es quien hace guías, y creo que es un poco insultante a veces la palabra porque yo no hago guías, hago una obra”, señaló durante la charla con el escritor Paco Ignacio Taibo, para el programa Desde El Fondo, del Fondo de Cultura Económica.
“Es un poco feo la palabra guion y guionista, siempre me he opuesto a ella, yo creo que a un escritor de teatro no le cuestionan, es escritor y punto. Yo quisiera que a los dramaturgos de cine también se les considerara escritores y autores por valía propia”
Durante la conversación en la que además del director general del FCE, participaron Andrés Ruiz y Sandra Montoya, Arriaga, Premio Mazatlán de Literatura 2017, habló sobre todo del oficio de escribir.
Al darle la bienvenida, Taibo dijo que lo iba a tratar de chantajear para que le diera un cuento, para hacer una edición de Vientos del pueblo de 40 mil ejemplares, porque no pueden publicar sus novelas porque están en manos de otra editorial.
Pero la charla se enfocó principalmente en el cine, dado que Arriaga es autor de novelas, guiones, ha hecho películas de textos propios y ajenos.
“Y vaya, atacar el primer mito, de que el cine nunca hace justicia a la novela, ¿es cierto eso?”, cuestionó.
“Ha habido muy pocas ocasiones en que una gran novela se convierte en una gran película, Muerte en Venecia es de las pocas en que la película y la novela son dos grandes obras por sí mismas. Pero también dicen que mala novela es una gran película y gran novela mala película, una de las mejores películas que se han adaptado de un libro y me gusta mucho es Los puentes de Madison, que la novela es verdaderamente espantosa y la película es muy buena”, respondió Arriaga.
El autor de... señaló que es difícil adaptar un libro y él ha evitado hacerlo, pese a que le han ofrecido muchas veces incluso obras de autores que quiere mucho, como Faulkner y Hemingway.
Consideró que hay novelas aparentemente cinematográficas pero una cosa es ser visual y otra que pueda ser adaptada.
Al comentario de que les gustaría ver ‘El salvaje’ en la pantalla, Arriaga comentó que también se ha resistido a hacerlo.
“Siempre he dicho que con una muy buena cantidad de dinero me van a convencer de que es adaptable, pero la mayor parte de lo que sucede en ‘El salvaje’ sucede hacia adentro de un personaje, claro todo es susceptible de ser adaptado y yo creo que lo mejor que podemos hacer es lo que decía Hemingway: ‘Take the money and run’...”, lo que hizo a todos soltar las risas.
Sobre su proceso creativo, compartió que no hace ni diagramas ni estructuras y que al inicio tiene una idea vaga de lo que será la novela y un argumento muy escueto.
“Lo que me va pasando lo voy metiendo y sobre eso la voy construyendo sobre la marcha, no tengo idea de los personajes, de hacia dónde va a ir, mucho menos el final. Muchos dicen ‘si no sabes el final no escribas’, y yo pienso que si ya tengo el final para qué escribo, a mí me gusta escribir como lector, es lo más divertido”, aseguró.
“Yo no tengo idea de nada, me van saliendo las cosas, por ejemplo si llueve, en la novela llueve. ‘El salvaje’ es una historia que quería contar desde chico, desde que tengo como 14 años, aunque no tengo claro hacia donde voy, el inconsciente se empieza a meter”.
Como cineasta, reconoció que siempre ha tenido libertad creativa, y que si alguien quiere conocer su obra cinematográfica pueden empezar con Amores perros, su primera cinta.
“Cuando me preguntan qué quería decir, siempre les digo: nada, sólo quería contar una historia, la de mi barrio, la de mi perro, pero la visión política, filosófica que puedas tener, se trasmina porque eres un ser un ser político, filosófico, un ser vital”.
Guillermo Arriaga es escritor, guionista, productor y director cinematográfico, conocido por contribuir con los guiones de películas como Amores perros, 21 gramos, Babel, Los tres entierros de Melquiades Estrada y The Burning Plain.
Es autor de Salvar el fuego, con el que ganó el Premio Alfaguara de Novela; El salvaje, Dulce olor a muerte, entre otros.
En 2017 ganó el Premio Mazatlán de El salvaje.