Siqueiros murió hace 43 años. Conoce cinco de sus murales más famosos
"El artista mexicano se destacó por ser aguerrido, polémico y plasmar en sus obras la política de la que no se podía desprender"
Melissa Sánchez
La política y el arte se unieron inexorablemente en la vida de David Alfaro Siqueiros, uno de los pintores más prolíficos de México y del que hoy se conmemora su 43 aniversario luctuoso.
José de Jesús Alfaro Siqueiros, su nombre de pila, nació en Camargo, Chihuahua, el 29 de diciembre de 1896, y a los 16 años se enlistó en el Ejército constitucionalista para luchar en la Revolución mexicana.
Polémico, encarcelado varias veces y hasta exiliado, su intensa actividad política y sindical, así como sus viajes militares y los artísticos por Europa, determinaron el destino que tomaría su pintura, enfocada al muralismo, con el que intentaba encontrar dinamismo en las figuras para crear movimiento.
Así, Alfaro Siqueiros se convirtió en una de las máximas figuras de esta expresión artística, junto a Diego Rivera y José Clemente Orozco, por lo que hoy recordaremos cinco de sus murales más importantes:
'LA MARCHA DE LA HUMANIDAD EN LA TIERRA Y HACIA EL COSMOS'
El Foro Universal del Polyforum Cultural Siqueiros, ubicado a un costado del World Trade Center de la Ciudad de México, alberga en su interior este mural, considerado el más grande del mundo, con una estructura de 2 mil 400 metros cuadrados. El lugar cuenta con una plataforma giratoria y un espectáculo de luces y sonido, además de la narración del propio pintor, para hacer más vívida la experiencia del expectador. Fue inaugurado en 1971.
¿QUÉ REPRESENTA? La evolución del ser humano a través del tiempo y una visión futurista del mismo.
'DEL PORFIRISMO A LA REVOLUCIÓN'
Este mural ocupa la Sala de la Revolución del Museo Nacional de Historia, en el Castillo de Chapultepec. En 1954, el pintor chihuahuense recibió la comisión de realizar este trabajo, hecho con acrílico y piroxilina sobre madera forrada con tela. Está dividido por cinco secciones: "La dictadura", "La represeión", "La huelga", "Los socialistas" y "La marcha de los revolucionarios", y fue inaugurado en noviembre de 1966.
¿QUÉ REPRESENTA? En esta alegoría se confronta el petrificado régimen de Porfirio Díaz con las filas cerradas de los combatientes revolucionarios. Es una lección de historia cuyo elementos fundamentales son el tiempo y el acontecimiento.
'EL PUEBLO A LA UNIVERSIDAD Y LA UNIVERSIDAD AL PUEBLO'
David Alfaro Siqueiros empezó a trabajar en este mural desde 1952 y fue inaugurado en 1956 dentro de las instalaciones de la Universidad Nacional Autónoma de México. Está compuesto por tres escultopinturas de relieve en estructuras de hierro revestidas de cemento y cubiertas con mosaicos de vidrio, de más de 304 metros cuadrados, y se ubica en el muro sur del edificio de Rectoría.
¿QUÉ REPRESENTA? a cinco estudiantes subiendo por unas escaleras, llevando en las manos objetos representativos de los conocimientos adquiridos en la universidad; se dirigen de vuelta hacia el pueblo cargados de nuevas ideas que aplicar.
'TORMENTO DE CUAUHTÉMOC' Y 'APOTEOSIS DE CUAUHTÉMOC'
Ambos murales, ubicados dentro del Museo del Palacio de Bellas Artes, en la Ciudad de México, pueden apreciarse como una sola pieza, un díptico que integra una narración sobre la conquista de México. El primero capta el momento en que el gobernante mexica es sometido a tortura para que revele el lugar donde se ocultan los supuestos tesoros que guardaba la gran Tenochtitlan; mientras el segundo celebra un episodio ficticio, imaginario: Cuauhtémoc conduce a su pueblo con valentía frente al enemigo.
¿QUÉ SIGNIFICA? Alfaro Siqueiros los señaló como un "canto a Cuauhtémoc y una imagen de la lucha que tienen que sostener los pueblos débiles". Además, estableció un paralelismo con la historia contemporánea, al relacionar la escena con la necesidad de que México se libere de la política estadounidense de la posguerra.
¿Y FUERA DE MÉXICO?
'AMÉRICA TROPICAL'
En 1932, el pintor mexicano terminó este mural en el centro histórico de Los Ángeles, California; sin embargo, en su momento causó polémica por la ideología comunista que manifestaba. Al año, el trabajo quedó sobrepintado parcialmente a raíz del sentimiento anticomunista de la época y una década más tarde quedó totalmente cubierto. En 2012, 80 años después de su culminación, el Instituto de Restauración Getty decidió renovarlo y reinaugurarlo en la calle Olvera.
¿QUÉ REPRESENTA? Aunque la intención nunca fue restaurarlo a su estado original, aún conserva su esencia: una América oprimida por Estados Unidos que lucha por su libertad.