Retoma Sandra Robles la vida para hacer arte

Elizabeth Gámez
26 octubre 2017

"La artista habla del vínculo de cariño entre ella y Periódico Noroeste, al saber que será la primera culiacanense en ser reconocida en NorArte, en Mazatlán"

Sandra Robles Montijo será la primera artista no mazatleca en ser distinguida en NorArte, evento que organiza Editorial Noroeste en conjunto con La Gran Plaza, en el puerto. Ello hace que la pintora hable de ese vínculo de cariño recíproco con este medio, en sus 35 años de carrera.

"Desde que inicié en el 82 en una exposición individual que inauguró doña Esthela Ortiz de Toledo Corro, en el entonces Difocur, y hasta la fecha me han apoyado muchísimo, realmente han estado al pendiente de lo que he hecho a lo largo de 35 años, y ha sido una retroalimentación", expresa la artista.

Los diferentes periodistas culturales de este medio, agrega, se han preocupado por investigar más allá de lo informativo, de la vida que respalda a los artistas.

"No nada más somos lo que mostramos en una exposición, es una serie de vivencias, de pleitos cotidianos y una forma de afrontar y ver el mundo actual, enclavado dentro de una ciudad que no es perceptiva y que no promueve mucho lo que son las artes visuales, no me refiero a las instituciones sino en general; sin embargo, es una ciudad sensible, las personas aunque no se den cuenta estamos sensibilizados por el entorno que nos tocó vivir", indica.

"Sinaloa es un estado privilegiado, nos motivan muchísimas cosas que nos hacen reflexionar tanto negativas como positivas, de toda esa forma de vida que he tenido en el arte en Culiacán retomo cosas, retomo lo que a mí me afecta, lo que influye en mi vivir cotidiano y eso lo proyecto en la obra que hago".

Para quien ha expuesto en países como Italia, España, Estados Unidos, Periódico Noroeste ha sido un "cómplice maravilloso" dentro de su actividad como pintora, como promotora cultural, aventurera y exploradora.

"Me ha acompañado en los nuevos proyectos que siempre estoy realizando, nunca he sentido un detente, un rechazo, siempre han sido muy colaborativos, solidarios con mi trabajo y yo estoy sumamente agradecida con eso".

La emoción previa por la sorpresa a esta distinción que vivirá este viernes, se ve en su mirada, la manifiesta también en su voz, y dice llega en el clímax de todas las dificultades por las que ha pasado en estos siete lustros de trayectoria.

"Inicié mi carrera en el 82, pero antes de exponer empezaba a hurgar en el mundo del arte, era muy difícil en esa época, ahorita es muy fácil para los artistas contemporáneos abrirse camino", platica.

Y como mujer, afirma, implicó más abrirse paso, porque la época de los 70 el mundo de las artes visuales, el teatro, era del hombre.

"Poco a poquito nos fuimos involucrando, haciendo presencia en diferentes áreas del arte, muchas mujeres, no nada más yo... Abrimos varias mujeres camino", agrega.

"Soy muy privilegiada de poder platicar algunas cosas que sucedieron que tuvimos que sortear para seguir en el arte activas, constantes y trabajando, haciendo cosas".

Actualmente, dice, Culiacán tiene mucha actividad dentro de las artes visuales, hay muchos jóvenes talentosos que están tratando de tener presencia, y la dificultad de estos tiempos radica en lo que se está volviendo "costumbre de merecer apoyos".

"En mi época, no existían las becas, apoyos, nada... si acaso te prestaban un espacio en una galería, pero no existían tantos programas establecidos oficiales, que son un privilegio para los artistas; sin embargo, es una ventaja y al mismo tiempo es una trampa porque dejas de luchar como debes de luchar para conseguir lo que quieres", subraya.

"El mundo del arte es un camino difícil que requiere de constancia, mucho esfuerzo y dedicación, y no claudicar, no tenemos tiempo de rendirnos, porque así como el gobierno y las instituciones culturales existen para promover, apoyar y fomentar, el artista existe en una ciudad para crear".

El ser constante va implícito con la vida de una persona, asegura la también artesana.

 

La felicidad de vivir en el arte

De estos 35 años de carrera, Robles Montijo destaca un par de logros, y se llena de alegría al referirse cómo viven el arte también sus hijos.

"Hay dos cosas que siento: el haber logrado sentirme plena y feliz de vivir en el arte todos los días, de convertir el arte en mi vida cotidiana, y el haber transmitido a mis hijos ese amor y esa pasión por el arte, fue un contagio natural y ahorita ya estoy viendo los resultados".

Daniel es percusionista y cantautor, Mariana, violinista y DJ, es una joven fuerte y tiene fija sus metas; es amable, cordial que su pasión es la música y la va a llevar a donde quiere llegar, dice; Cristian vive en Canadá y es pintor de tiempo completo que se está abriendo camino en el mundo internacional; Ernesto, el mayor es de profesión arquitecto e innovó en la fabricación de cajones flamencos en Culiacán.

"Yo estoy segura de lo que ellos están haciendo. Sé que como artistas están formándose y van a seguir formándose con más fuerza".

 

Fundadora del Salón de la Vida y la Muerta

Robles Montijo menciona además como un logro importante en su carrera haber llevado el Salón de la Vida y la Muerte a galerías de otros países, que miradas extranjeras dieran lectura y descubrieran esta tradición mexicana en el extranjero.

"Aquí valoramos la tradición mexicana y todas las expresiones, las exposiciones son basadas en la tradición yoreme, ellos me enseñaron. No pongo altares ni ofrendas como en el sur porque no es nuestra costumbre, pero sí tenemos una costumbre prehispánica basada en los altares, responsos y ofrendas yoremes, y esa es mi aportación como artista", asegura.

Este Salón de la Vida y la Muerte que la pintora fundó hace 18 años, se ha tornado en una celebración comunitaria, participan tanto artistas veteranos como emergentes, incluso alumnos de la Escuela de Artes Plásticas de la UAS, se ha abierto a la técnica de fotografía, artesanal.

"Veo que hay un interés grande en la comunidad de Culiacán por aprender el arte, por acercarse a las técnicas, por tener maestros que compartan sus conocimientos", indica.

Con satisfacción detalla que este año, el Salón de la Vida y la Muerte, que se inaugura el 31 de este mes, se vuelve internacional, pues participarán pintores de Perú, Venezuela, Argentina, además de Puebla y Ciudad de México.

Y para más alegría, esta tradicional exposición tendrá una réplica por primera vez en San Ignacio, el 1 de noviembre, con el apoyo del ayuntamiento, el Isic, promotores culturales, entre otros.

"Siento que se está abriendo un parteaguas en la ciudad con respecto al arte. Siento que así como artistas plásticos están consiguiendo logros fuera de aquí afianzándose más, en la comunidad necesitan más de nosotros, más de los maestros, de los artistas, que compartamos lo que hemos aprendido durante tantos años, es uno de los principales objetivos del artista, compartir sus conocimientos".

Además de tener su estudio de arte, donde se imparten diversos talleres, Robles Montijo creó la empresa Ofrenda Cultural que prevé sea sede además de talleres, de conferencias, intercambios de artistas, para compartir el arte de Sinaloa con otras latitudes y viceversa.

A donde dirige su mirada, hay un motivo que le inspira hacer arte: cuando camina, cuando admira la naturaleza, cuando toma fotografías, eso lo platica con una sonrisa.

"No hago nada que no esté relacionado con el arte, consciente e inconscientemente. En lo cotidiano descubro mucha felicidad", comenta.

Robles Montijo se dice una voluntaria del arte, pues nunca ha cobrado por proyectos, por representar a Sinaloa en el extranjero. Nunca ha esperado recibir nada, pero ha recibido mucho más que si le hubieran pagado, expresa.

 

Injusticia que lastima

Robles Montijo no se permite perderse en el mundo del arte y se dice lastimada por la injusticia, preocupada por la falta de humanidad en las personas, por la pérdida del entorno.

"Emodificando todo lo que somos y no estamos haciendo nada por recuperarnos a nosotros mismos, me preocupa mucho ver que la violencia se ha instalado en espacios que antes habitábamos con armonía, algo tenemos que hacer para parar esto... las desapariciones, quitar la vida a mujeres a hombres se está convirtiendo en cotidiano, eso es terrible para todos", expresa.

"Muchos estamos tristes y enojados, pero tenemos esperanzas, las nuevas generaciones, los jóvenes tienen que ser más fuertes, ellos cambiarán todo, no les queda de otra, y nosotros deberemos de ayudarlos con todo de lo que seamos capaz".

 

PARA SABER

Sandra Robles Montijo es pintora, artesana, promotora cultural, fotógrafa y amante de la gastronomía.

Fue de suma alegría ser la primera artista en Sinaloa en recibir el reconocimiento del Foeca a la creación artística y cultural.

Ha expuesto en Florencia, Italia, Chicago, Nueva York, España, Washington, entre otros sitios incluidos de México.

Es creadora del Salón de la Vida y la Muerte, que llegará a su décima octava edición con invitados de otros países, y una réplica en San Ignacio.

Esta tradición del Día de Muertos basada en la tradición yoreme la ha compartido en el extranjero.

 

NORARTE

Sandra Robles Montijo fue elegida para ser la artista homenajeada en la edición número 18 de NorArte, un evento con el que Editorial Noroeste en coordinación con La Gran Plaza realizan año con año para impulsar a los artistas plásticos locales.

 La pintora, fotógrafa y artesana culiacanense expondrá junto a un grupo de creadores de la entidad, en la plaza.