Propone Labastida nueva lectura
"El poeta sinaloense asegura que el poema de José Gorostiza está en la cima de la poesía mexicana"
CULIACÀN._ Muerte sin fin, de José Gorostiza, es el modelo de un gran poema metafísico y está en la más alta cima de la poesía mexicana, aseguró el poeta Jaime Labastida.
Durante la conferencia Una nueva lectura de Muerte sin fin, el sinaloense que actualmente preside la Academia Mexicana de la Lengua, consideró que este es uno de los poemas a los que debemos volver los ojos y tenerlo como meta insuperable.
"Su verdadero valor consiste en ser el poema que ha inscrito a la poesía mexicana por derecho propio en el campo ético contemporáneo, osea, en la tradición culta, rigurosa de la más alta literatura universal".
El también miembro de El Colegio de Sinaloa dijo que este poema ha sido leído y elogiado por los más grandes escritores de México, empezando por Alfonso Reyes, para quien con su certero sentido crítico era comparable a Paul Valery, y lo llamó el diamante de la poesía mexicana.
"A su vez supieron que era poema aparte, todos los poetas de su generación, de Jorge Cuesta a Javier Villaurrutia, lo han leído con devoción Alí Chumacero y Rubén Bonifaz Nuño, y en fechas recientes se han publicado al menos tres libros en los que se ha intentado develar su sentido", apuntó.
Y sin discutir ninguna de esas interpretaciones, argumentó que entre las que de verdad alumbran los rasgos del poema son las hechas por Paz, Salvador Elizondo, Mónica Mansour y acaso la más rigurosa la de Arturo Cantú.
"Muerte sin fin posee un sentido unívoco, aunque su posible interpretación no excluya otras lecturas. No me satisfacen las lecturas que se han propuesto, por eso me atrevo a proponer otra lectura del poema", dijo.
"No quiere decir que mi interpretación sea la única válida, por lo contrario, asumo que el poema de Gorostiza admite múltiples lecturas que han de elevar su número con el tiempo, lo que harán que el poema siga vivo como el más alto paradigma de la poesía de México".
Ante decenas de lectores y personalidades dedicada a las letras, que se reunieron en El Colegio de Sinaloa, advirtió que ninguna de todas las interpretaciones podrá sustituir la lectura y disfrute directo, y que la mía no es otra cosa más que una invitación a su propio goce.
"En la lectura de Paz, los significados se multiplican al infinito, en la mía el sentido es unívoco".
Muerte sin fin, consideró, responde a una estructura arquitectónica, así lo haya sabido o no su autor, que crece desde dentro hacia afuera, hasta formar un libro de versos.
Destacó que las tres citas de los proverbios de Salomón, con las que se abre muerte sin fin, son las que dan la clave central del poema.
"Nadie que yo sepa las ha tomado en cuenta hasta ahora, el mismo Cantú las menciona pero no trae conclusión alguna y sólo dice que la traducción a la que se acoge Gorostiza, es presumiblemente la hecha por Reina y Valera, a finales de 1500".
Labastida, Premio Letras de Sinaloa, señaló que la primera parte del poemario es una versión estilizada del mito de Narciso, una teogonía y junto con ella una cosmogonía
Al final consideró que ningún otro poeta, de ningún otro poeta mexicano, ha alcanzado la dimensión, densidad y estatura que este poema.
A SABER
Jaime Labastida (Los Mochis, 1939) es poeta, periodista, ensayista, filósofo y académico. Autor de los libros Estética del peligro, El amor, el sueño y la muerte en la poesía mexicana, La palabra enemiga, Humboldt, ciudadano universal, Cuerpo, territorio, mito, y poemarios como El descenso, La feroz alegría, A la intemperie, Animal de silencios, Elogios de la luz y de la sombra, entre otros.