Comparte Guillermo Arriaga las aventuras de William Burton
El escritor, guionista, productor y director cinematográfico presentó ‘Extrañas’, su más reciente novela; el coahuilense Sergio Avilés presenta a su vez Joya de la familia.
Las fascinantes aventuras en el año de 1781 en Inglaterra de William Burton, fue presentada en Extrañas del autor Guillermo Arriaga.
En el recinto de Casa Haas que lució con lleno total, el autor describió al personaje principal como una anomalía que aparece cada 300 años.
El escritor, guionista, productor y director cinematográfico mexicano, conocido principalmente por escribir los guiones de películas como Amores perros, 21 gramos, Babel, Los tres entierros de Melquiades Estrada y The Burning Plain, estuvo acompañado por la poeta mazatleca Ana Belén López de Pruneda y el también escritor y cineasta coahuilense Sergio Avilés.
En la velada ambos escritores presentaron sus respectivos libros, Arriaga “Extrañas”, en tanto que su amigo, quien radica desde hace un tiempo en Celestino Gasca, Elota, presentó la obra “Joya de la familia”.
La anfitriona de la noche, Ana Belén López de Pruneda hizo una pequeña semblanza de Arriaga, y el mismo autor comentó su entrañable amistad que tiene con su amigo Sergio Avilés.
Avilés en su intervención explicó que Extrañas es una novela de aventuras con una carga de amistad, de compañerismo; una obra fascinante y de belleza extraordinaria, que describió como la obra maestra del escritor Arriaga.
La novela es la historia de William Burton, un joven noble que afronta un encuentro cuya intensidad marca y cambia su vida. Luego, se embarca en una aventura donde conoce a los genios de la época, de quienes absorbe cuantos conocimientos y experiencias ponen a su alcance para encarar situaciones extremas.
En su presentación, Arriaga de manera muy agradable y con un lenguaje fluido y lleno de ingenio para atrapar el público, comentó que en este libro decidió tomar algunos riesgos, ya que una carrera literaria sin riesgos, es una literatura sin interés.
“Antes de entrar al cine escribí cuatro libros Retorno 201, que escribe como a las 24 25, 26 años, luego Escuadrón Guillotina que escribí a los 29, y luego Un dulce olor a muerte que escribí a los 33, y El búfalo de la noche, y ya después El salvaje, y yo creo que una carrera literaria sin riesgo, es una carrera literaria sin interés, y yo sí quiero arriesgarme, siempre quiero arriesgarme”, dijo.
“En El salvaje me arriesgué de cierta manera, y ahora en Extrañas traté de salirme en lo que era común para mi, que es el barrio donde crecí, la unidad Morelos de la Delegación de Iztapalapa, un barrio que amo con toda mi alma, y decidí hacer algo distinto, y si es cierto de Sergio, yo y él íbamos en una carretera cuando de pronto no se de donde llegó la imagen de las Extrañas, no le diré que son las Extrañas porque sino los spoiler muy gacho, pero son seres que solo aparecen cada 300 años, es una anomalía única y muy especial, cuando lean el libro lo descubrirán”, comentó.
De ahí nació el querer escribir historias de esos seres, seres en distintas épocas y lugares.
“Quería escribir la historia de estos seres, estas Extrañas, en Mongolia del año mil, y como sólo aparecen cada 300 años yo hice mis cálculos, Noruega en 1400, en Mongolia era en el transcurso de la guerra, luego en Noruega como eran el catolicismo y cristianismo en Noruega contra los dioses paganos, luego tenía una en México contemporáneo, y luego Inglaterra, escribí como 170 páginas de esas otras historias”, compartió.
La historia inglesa empezó a crecer dentro de él y se dio cuenta de que en Inglaterra en siglo 18 fue el gran despegue de la ciencia, y una de sus intenciones cuando escribió el libro fue que sí se sentía el siglo 18 sin que estuviera escrito en lenguaje antiguo, entonces se dedicó a usar palabras que solo fueron acuñadas antes de 1790.
“Eso hizo que sacará decenas de palabras para mi tristeza, ya casi entregaba el libro cuando me dije voy a ver si la palabra consultorio se usaba y no, la palabra consultorio es como de 1920, no se usaba antes, no puedo usar palabras como optimista, ni pesimista, tenía un personaje que decía es un optimista compulsivo, pues ni optimista ni compulsivo”, comentó.
De manera muy graciosa explicó que dejó fuera palabras del vocabulario como el que, para que y aunque, así como evitó escribir palabras con el adverbio en terminación mente.
“Darle vuelta a una novela de 500 página para que no tenga ningún que, tiene sus dificultades; entonces le quite todos los que, ¿Cuál fue la razón?, que ustedes tendrían que estar leyendo un lenguaje que pueden leer, pero que es diferente a lo que están usando en el día a día. Tampoco use el adverbio terminado en mente, y no quise tener la trampita de manera exclusiva, me obligue a escribir de forma distinta. El punto y seguido es una versión moderna, antes se escribía con comas, pues me puse a escribir con comas, lo mejor que me ha pasado es que mucha gente me ha mentado la madre porque no tiene capítulos, ni puntos. Entonces dicen son las 4 de la mañana, entró a trabajar a las 7, y sigo leyendo porque no sé dónde detenerme, eso da cuenta de que la pasan bien”, explicación que hizo reírse a los presentes.
En el corazón de la novela habita una profunda reflexión sobre la insondable condición humana y asoma con empatía al mundo de lo diferente y lo anómalo, en un desfile de personajes entrañables y con vidas al límite.
Presenta Sergio Avilés ‘Joyas de la familia’
En la velada, el también escritor y cineasta coahuilense, Sergio Avilés presentó Joya de la familia.
Una historia real que está basada en una alhaja que llegó a Saltillo proveniente de la casa real de Rumania.
Hace 30 años, Sergio Avilés recibió a una amiga en casa, quien le mostró una misteriosa joya que le había regalado la abuela de su marido, era extraña y tenía que ver con la casa real de Rumania.
Eso despertó el interés del escritor que se dio a la tarea de investigar de dónde provenía dicha joya.
La novela de editorial Alfaguara, comienza en Saltillo con Rubén Pablo Alcocer, detective de 54 años que relata la historia de la joya, la cual atraviesa los destinos de diversas dinastías europeas e incluye la presencia de Napoleón, la reina Victoria y hasta el conde Drácula.
Por su valor, porque no es algo que se pueda usar se dio cuenta de que venía de la corona de Rumania y es real. Después, en la novela, llega a las manos de Rubén Pablo, el protagonista, quien se niega a regresar el anticipo que le pagaron por la investigación. Está secuestrado y tiene una bolsa de plástico amarrada sobre la cabeza. Efectivamente, se encuentra en los últimos instantes de su vida, por eso él nos lleva a descubrir todo el misterio.
Firma de libros
Al final, ambos escritores estuvieron realizaron la firma de sus libros.