Celebran a la música
"Con un concierto de clarinete, trombón y guitarra, la Banda Sinfónica Juvenil del Estado celebró el Día Internacional de la Música en el Socorro Astol"
En el marco del Día Internacional de la Música, la Banda Sinfónica Juvenil del Estado realizó como cada año su tradicional concierto para celebrar a la música con un programa que incluyó un concierto para clarinete y uno más para trombón el cual se realizó en el Teatro Socorro Astol del Isic.
“Estamos muy contentos de celebrar como cada año el Día de la Música, evento que desde hace 20 años de manera puntual cada 21 de junio festejamos con un concierto especial, siendo precursores en el estado de este tradicional festejo para los que nos dedicamos a la música”, señaló el maestro Baltazar Hernández Cano.
El director de la banda sinfónica platicó que para esta ocasión se preparó una presentación especial con la participación de dos músicos solistas venezolanos, el tromboísta José Alfredo León, y el clarinetista Alberto José Estrada, creando una fusión interesante con los jóvenes de la banda.
El concierto inició con la interpretación de la pieza Pilares de la Tierra, una obertura para banda del compositor Frank William Erickson, una balada lírica del siglo 12 que se desprende del libro de Ken Follet que lleva el mismo nombre.
Ante un público que llenó el recinto, el programa continuó con la presencia de solista venezolano Alberto José Estrada, quien ofreció el concierto para clarinete número 1 del compositor Óscar Navarro, una pieza dividido en tres secciones, las cuales fueron claramente identificables.
Sobre el escenario, el clarinetista invitado dio muestra de su virtuosismo regalando sonidos constrastantes que iban de lo étnico a lo new age, ligeros toques de jazz, hasta para culminar con un allegro el cual fue bien recibido por el respetable contestando con un sonoro aplauso al solista venezolano.
Luego llegó el turno del maestro José Alfredo León, con su concierto para trombón y banda, interpretando la pieza Colores del compositor Bert Appermont, una pieza moderna dividida en cuatro movimientos en el que cada uno representaba un color y un sentimiento.
El amarillo para una movimiento maestoso, el rojo para el vivace con espirito, el azul para un largo expressivo, y el verde para un allegro, emociones que el tromboísta y actual integrante de la OSSLA logró expresar al público a través del sonido de su trombón, perfectamente armonizados con el sonido de la banda.
Para cerrar la celebración, el concierto culminó con la presencia del guitarrista Christian Eduardo Núñez, quien mostró su virtuosismo al interpretar la pieza sinfónica Egmont, también del compositor belga Bert Appermont.
La pieza recreó un pasaje de la historia de España y la lucha de los países Bajos contra la dominación del rey Felipe II. Incluyó cuatro movimientos sobre La boda de Egmont, con música festiva; Felipe y Egmont, en la que participa en la guitarra el joven Chistian Núñez; Decapitación en Bruselas en la que muere el héroe, y Unidos contra España, que marca la rebeldía de los países bajos, con lo que cerró el festejo.