Atesoran el recuerdo

Isela Morales
10 noviembre 2015

"El pueblo de El Recodo tiene un museo y estatua del 'Padre de las Bandas' con la finalidad de que la gente no olvide a su máximo orgullo"

EL RECODO._ El pueblo de El Recodo ha sido el más fiel vigía para que el nombre de Cruz Lizárraga continúe siendo inmortal, y no sólo le erigieron una estatua en su honor a un lado de la Iglesia, sino que la casa en la que nació y creció es ahora un museo que sus seguidores pueden visitar.
El hogar que acogió al "Padre de las Bandas" refleja la humildad, pero también la calidez con la que vivió. De un solo cuarto, resume la condición modesta en la que Cruz Lizárraga llegó a este mundo.
Ahora, esa casa que guarda tantos recuerdos y que cobijó la infancia del pionero de las bandas tiene sus puertas de par en par, para que todo aquel que lo desee pueda abrazar parte de la vida del creador de Banda El Recodo.
La casa-museo es sencilla, no hay lujos, pero sí es evidente que ahí nació un triunfador, el mismo que prometió que no descansaría hasta que la música de banda se escuchara por todos los rincones del mundo.
La primera fotografía de Banda El Recodo, en 1938, el primer disco grabado en 1951, las almohadas que usó Cruz Lizárraga y hasta ropa que utilizó en los bailes y un clarinete, forman parte de esta galería.
La casa la mantiene impecable la familia Lizárraga, pero es Samuel Lizárraga quien se encarga de ser el guardián que vigila el lugar de más valor en el pueblo de El Recodo.
"Tengo nueve años al frente, fui yo quien buscó quedarse a cargo porque había gente que venía y quería conocer la casa. Yo me acerqué a Poncho, Joel y Chuyita Lizárraga para decirles que se abriera al público, porque la gente quiere saber más del Padre de las Bandas", comentó Samuel.
"Lo que Don Cruz hizo nadie lo ha hecho, él llevó el nombre de El Recodo a todo el mundo, siempre dijo que aunque el pueblo no existía en el mapa, no descansaría hasta que lo conocieran al igual que la música de banda".
Samuel no sólo es la persona que recibe a quien tenga curiosidad de entrar a ese hogar, él conoce con exactitud la vida de Cruz Lizárraga.
Samuel se ha convertido en el cronista de la historia de Cruz Lizárraga, sin que se le pregunte, por iniciativa propia, empieza a hablar y a contar infinidad de anécdotas del pionero de la música sinaloense. Dice que las fechas en que más visitantes recibe es en vacaciones de verano, diciembre y Carnaval.
"Mucha gente elige Mazatlán de vacaciones sólo para conocer El Recodo", asegura Samuel.
"A mí me ha tocado recibir gente de toda la República Mexicana y Estados Unidos y lo mejor es que vuelven con más familiares y amigos. Una vez me tocó recibir a unas personas que venían desde Israel.
La banda nos representa en otros países, antes era sólo el mariachi, pero ahora la banda está al mismo nivel o mejor aún".
Samuel presume que el museo se ha ido haciendo de más cosas, desde las portadas de discos, fotografías, reconocimientos y objetos personales, hasta la que fue su primera lápida, ya que tras ser sepultado en una tumba, hace unos años fue cambiado a una cripta.
Dentro de la muestra se encuentran una cañuela y un carrizo, para contar a los visitantes cuáles fueron los primeros instrumentos que utilizó el principal difusor de la música de tambora.
Y para sentirse aún más en el mundo en el que creció Cruz Lizárraga, el lugar cuenta con una grabadora en la que Samuel pone la música que Banda El Recodo ha creado en 74 años de trayectoria.
Cruz Lizárraga
no morirá:
Chuyita Lizárraga
La viuda de Cruz Lizárraga, Chuyita Lizárraga, comentó que la casa donde nació el fundador de Banda El Recodo se convirtió en museo por la gente que visitaba el lugar.
"No era la idea convertirlo en museo, sólo pretendíamos darle una 'manita de gato' a la casa donde nació y vivió mi esposo, pero se fueron dando las cosas. Primero, una estatua en la plazuela, la gente empezó a visitar más la casa y a llamarle museo y eso fue muy bonito para nosotros", relató.
"A través de Samuel Lizárraga, quien ha sido un incansable promotor de su pueblo, empezamos a decorar y a instalar en la casa recuerdos y detalles de mi esposo y Banda El Recodo", comentó.
La ahora directora de Banda El Recodo mencionó que ha sido misión fundamental de la agrupación mantener vivo el nombre de Cruz Lizárraga a través de distintas actividades.
"Queremos que siempre siga viva en la memoria de la gente el nombre de mi esposo, por eso la banda siempre será El Recodo de Cruz Lizárraga; a la par de eso, en México y Estados Unidos siempre hacemos actividades altruistas a nombre de mi esposo", afirmó.
"También Germán se ha encargado de hacer varios eventos para recordar a su papá, la familia completa se propuso siempre que Cruz Lizárraga continuara vivo a través de su recuerdo".
EL MUSEO
Está en el pueblo de El Recodo, ubicado a 45 kilómetros al noroeste de Mazatlán, transitando por la carretera internacional con dirección al sur, tomando la desviación que está un poco antes de llegar a la población de Villa Unión.