Panchoe Ayala combina su carrera como bombero y su labor altruista en Escuinapa
Con 13 años en cuerpos de emergencia, Francisco Ayala compagina su trabajo en Protección Civil y Bomberos con su faceta de creador de contenido y su labor como instructor de natación, buscando siempre apoyar a quienes lo necesitan
ESCUINAPA._ Con camisa amarilla, roja, como instructor de natación o subiendo un video a redes sociales como creador de contenido, Francisco Ayala Delgado celebra ser bombero en Escuinapa.
“Panchoe Ayala”, como es conocido, se asemeja a un personaje de una película mexicana de la Época del Cine de Oro, pues su día va entre ser elemento de Protección Civil y “brincar” en el mismo momento a sus labores como bombero.
En su día de descanso, se le ve con una cámara, buscando casos y cosas de gente que necesita algo y así consigue apoyos para ellos. Esas inquietudes le llevaron a hacer un personaje con un amigo al que llaman “el Árabe de Escuinapa”, hecho solo para labores altruistas.
“Tengo 13 años en los cuerpos de emergencia, tres años fui voluntario y luego ya pasé a tener paga en Protección Civil; ahí tengo 10 años y en Bomberos tengo cinco años”, explica.
Francisco es un bombero al que pareciera que le gusta la farándula, pero la farándula con fines de servicio a la población, pues señala que su pasión es estar en estos cuerpos de auxilio, en las labores de rescate.
“En esto se debe sentir pasión, hay compañeros muy comprometidos, que están al 100, así me siento yo, apasionado, prácticamente aquí vivo (en la base), solo tengo un día de descanso y es cuando me voy a la calle”, expresa.
Panchoe, quien se desempeña como maquinista del camión de Bomberos, explica que esto debe ser una pasión para poder estar horas trabajando, combatiendo un incendio o soportar el equipo de trabajo para realizar un rescate.
En su caso, estar en cuerpos de auxilio le interesó desde que estaba en un internado de la Secundaria Técnica Pesquera de Teacapán, donde aprendió a nadar en mar abierto y hoy esos conocimientos los transmite a los niños y la gente que tiene cerca.
“A mí me gusta entrar a pozos a rescatar gente, irme al mar a buscar cómo rescatar, en accidentes. Parece fácil, pero usar el equipo de bomberos es pesado, tienes que tener condición física, en el último rescate en que usé las quijadas de la vida, pedí al comandante me dejara hacerlo, pero sí fue pesado”, relata.
Panchoe también se desempeña como instructor de natación y trabaja principalmente con niños. Estar en las corporaciones de auxilio le ha ayudado a “pulir” conocimientos que ya tenía y que afortunadamente son para ayudar en temas de prevención.
Para Francisco, ser bombero es satisfactorio y motivante. Aunque su función es estar pendiente de las condiciones del camión, de que tenga los niveles de aceite adecuado y que el agua que se tiene en la cisterna sea la necesaria, a veces también hay que entrar en acción, en apoyo, porque son pocos elementos.