Con un sabor agridulce, el pintor Sergio Ramírez culmina su mural en Agua Verde
El retraso en la firma del contrato y entrega del depósito, así como un mal comentario de una autoridad, fueron algunas de las dificultades a las que el artista se enfrentó
EL ROSARIO._ Con la satisfacción de poder aportar su talento a su tierra, pero con los sinsabores de la falta de apoyo de las autoridades, el reconocido artista Sergio Ramírez anunció que concluyó su obra en la sindicatura de Agua Verde.
A la obra, el artista además de firmar en los arcos de acceso, y dio por título “El arco de la abundancia”.
Los trabajos se concluyeron el pasado domingo y se firmaron el martes, aunque sin una develación oficial.
“La verdad sí estoy feliz con el resultado y creo que la gente también está feliz con la entrada como quedó. No he visto un mal comentario de nada y yo pienso que eso es lo importante, es en lo que yo estaba más enfocado, independientemente de todo lo que batallé para que se lograra”, afirmó.
Entre las complicaciones, explicó, que estuvo el retraso en la firma del contrato y entrega del depósito, al tiempo que sostuvo nunca había batallado tanto para realizar un proyecto.
“Y si se entregó en febrero fue porque los seguí correteando un mes yo, me entregan el contrato y nunca se entregó ese depósito, hasta que yo ya me iba a venir, ese depósito me lo entregaron en abril y en abril es cuando el mural debió haber quedado terminado, ese fue el problema”, argumentó.
Otro disgusto, aseguró, fue que tras hacer públicas las razones del retraso del mural se tuvo respuesta de la autoridad con andamios y el jefe de personal le realizó el desafortunado comentario: “Ya vi la publicación, como siempre haciendo escándalo como las putas”.
“Y la verdad pues sí terminé con un mal sabor de boca y triste la verdad por la falta de apoyo en un proyecto tan bonito y según con el apoyo de la cabecera municipal cuando nunca hubo nadie ahí, sí me llevaron los andamios, llegaron y se fueron”.
Señaló que es una pena que los arcos no estén iluminados aun cuando tienen la instalación eléctrica para que resalte la pieza por las noches, además de pagar por su cuenta para que se limpiara para que la suciedad no opacara el mural.
Por ello, enfatizó que el compromiso nunca fue con las autoridades sino con el pueblo que lo vio crecer.
Sobre la inspiración, comentó: “Mi inspiración en esta obra nace del agradecimiento a Dios por las bendiciones que nos manda día a día y que hacen de nuestro pueblo un pueblo rico y abundante, y por nuestro meramente pescador Jesús... representado por sus manos tejiendo una red para pescar y que es recibida por uno de sus hijos pescadores de Agua Verde”.
Asimismo, sostuvo que otro tributo importante fue al indígena totorame, y su herencia en la sabiduría para trabajar y explotar nuestras riquezas naturales a través de actividades primarias.