En la pelota

Juan Vené
06 noviembre 2015

"CUMPLEAÑOS INFELIZ DEL BAT. DESIGNADO"

CARACAS, Venezuela (VIP-WIRE).-“Toda persona que siempre dice lo que piensa, no siempre piensa lo que dice” LA PIMPI


¡Hace unos días, el seis de este abril, se cumplieron 35 años con el bateador designado estorbando en la Liga Americana! Cumpleaños infeliz.

Ese día de 1973, en Fenway Park, Ron Blomberg (Yanquis) fue el primer designado en tomar turno en Grandes Ligas. Había tres en bases en el primer inning, y Luis Tiant (Medias Rojas) le dio la base por bolas. Pero ganó Boston 15-5.

La Americana había aprobado ese décimo hombre en las alineaciones el 11 de enero. La Nacional lo rechazó. Curioso, porque en 1929 fue de la Nacional de donde surgió la proposición del designado, y no la aprobaron porque la Americana se negó a secundarla.

En 1973 se dijo que era un experimento. Y hace años los propietarios de equipos quieren eliminarlo, pero la Unión de los peloteros se opone. Incluso, han ofrecido aumentar el róster de los activos, de 25 a 26, para abrir así un nuevo puesto de trabajo. A eso ha respondido “no” Don Fehr, líder de los bigleaguers. Alega que ese nuevo sitio lo ocuparían con novatos, de sueldo mínimo, en vez de los veteranos que hasta cojeando ponen ahora a batear con honorarios de millones de dólares.

Pero esto no comenzó en 1973. Cuatro años antes, es decir, en 1969, se usó el designado en la Liga Mexicana del Pacífico, en la International League (AAA) y en la New York Penn League (A). Por cierto, en la Penn League, podía batear el designado en vez de cualquiera de los nueve en dos oportunidades por juego, pero no en el mismo inning.

Si algo debe cambiarse cuanto antes en el beisbol es lo del designado. Su eliminación sería provechosa para el espectáculo. Cuando Tony LaRussa fue contratado para dirigir a los Cardenales, procedente de Medias Blancas y Atléticos, dijo: “Ahora sí voy a tener que dirigir”. Y yo califico al designado de tan estorboso como un tercer elemento en la alcoba matrimonial.

Ahora, en 1973 no deseaban mejorar al beisbol con el designado. Fue un asunto estrictamente económico. Los equipos de la Nacional abandonaban a menudo los viejos parques para inaugurar modernos estadios. Los de la Americana, por diversos motivos, no podían hacer lo mismo. Por eso pensaron que debían inventar algo como atractivo para vender más boletos. Concluyeron en que si se hacían más carreras, estarían resueltos.

Curioso eso, porque si uno habla de un juego con pizarra final de 14-12 ó 16-4, en seguida se califica de muy malo, y se comparan con los resultados del basquetbol. Porque se consideran buenos los juego de beisbol de 1-0, 3-2 ó 5-2.


Lamentablemente, millares de fanáticos de 40 años o menores, solo han visto ese beisbol chucuto, con designado. Son tres generaciones contaminadas.
Pero bueno, ¿y qué?. cuando impusieron el designado en la Americana se había jugado sin eso durante 127 años.

El beisbol es un juego de estrategia. Con el designado no lo es.



Gracias a la vida que me ha dado tanto...