Día del Padre: Con un significado muy especial para Tomás Canizález
El coach sinaloense de baloncesto, Tomás Rafael Canizález Moreno, suele pasar este festejo rodeado de su familia, aunque en ocasiones su celebración ha sido trabajando en la cancha
Desde su etapa de niñez, posteriormente ya de adulto ejerciendo su profesión en el baloncesto y desde hace 16 años ya con familia, el Día del Padre significa algo muy especial en la vida de Tomás Rafael Canizález Moreno.
El festejo del Día del Padre ha sido una fecha muy especial en la vida de Canizález Moreno, cuando desde su niñez y ya como profesional del baloncesto, su padre Samuel, mejor conocido en el ambiente como Don Sammy, trataba en la medida de lo posible acompañarlo en las canchas, de visita en alguna parte del País o de plano una llamada para estar siempre en contacto.
Hoy en día, ya sin su padre y sin las reuniones acostumbradas, el ex coach de Delfines, Tiburones y Náuticos de Mazatlán en el Circuito de Baloncesto de la Costa del Pacífico (Cibacopa) busca seguir festejando esa fecha tan importante al lado de su familia (esposa e hija), pero también junto con su madre y hermanos.
“El festejo del Día del Padre normalmente lo hago con mi familia cercana, somos muy unidos, intentamos en la medida de lo que se puede ese día estar juntos, a veces no se ha podido, pero cuando se puede, pasamos desde el desayuno, comida y cena, todos en familia”, recuerda Canizález Moreno.
El ex coach de la Selección Mexicana Femenil Mayor tiene muy presente las reuniones en su vida de soltero.
“De soltero las reuniones eran con mi papá (QEPD), estar juntos mis hermanos con él y con mi mamá, a veces salíamos a comer a un restaurante o comíamos en casa en Mazatlán hasta que me lo permitió mi profesión, ya después ya no podía estar y todo se resumía a una llamada por teléfono.
“Nunca fue lo mismo una llamada, pero se intentaba estar presente por teléfono y a últimas fechas ya a través de videollamadas”.
Festejo fuera de casa
Al coach internacional orgullosamente mazatleco le ha tocado también pasar el festejo trabajando y lejos de su familia.
“Sí me ha tocado estar fuera de mi casa y de mi familia, recuerdo una especialmente cuando nos estábamos preparando para los Juegos Centroamericanos y del Caribe, nos encontrábamos concentrados en el Centro de Alto Rendimiento y ahí me tocó el Día del Padre.
“No hubo mas que llamadas y videollamadas, es difícil de repente no estar en esas fechas, pero es parte de la profesión, no te puedes ausentar de tu trabajo, se nota muchísimo que no esté el head coach, recuerdo una en Cibacopa, era en playoffs, afortunadamente fueron en casa en Mazatlán”.
Celebración en la cancha
Hoy en día ese tipo de celebraciones las pasa al lado de su hija Samantha (Sam) Canizález Díaz y su esposa Gabriela Díaz Hernández.
“Tengo la dicha de ser papá desde hace 16 años, me han tocado al menos unas cuatro veces viajando o en torneos de mi hija o míos, en alguna ocasión se presentó ese día yendo a ver jugar a mi esposa, entonces como familia de basquetbol nos ha tocado celebrarlo en la cancha.
“Aunque han sido festejos distintos, pero por el amor al baloncesto no hay problema, nos encanta lo que hacemos, por lo que el lugar que sea, es válido para poderlo celebrar”.
Señaló que lo más importe del Día del Padre es pasarlo juntos, debido a que lo fundamental para ellos es la unión familiar en todo lo que llevan a cabo en la vida.
Coach internacional
Canizález Moreno recién en febrero dejó el cargo de entrenador de la Selección Mayor Femenil, acaba de certificarse en Estados Unidos para desarrollo de jugadores que se encuentran en ligas profesionales o ligas universitarias que están en División 1 y 2.
Además de entrenar de manera personalizada a jugadores en varias partes del País, continúa con sus campamentos y creciendo con su proyecto a nivel nacional de las Escuelas EDDI México.