Derrick Rose, el MVP más joven de la historia, se despide del baloncesto

Tras 16 años de carrera en la NBA, Rose deja un legado imborrable en el baloncesto

Derrick Rose, el ex jugador estrella de la NBA, ha cerrado un capítulo significativo de su vida con una emotiva carta que refleja los altibajos de sus 16 años de carrera profesional.

El número 1 del draft de 2008 y el MVP más joven de la historia de la liga, anunció su retirada el jueves, dejando un legado imborrable en el baloncesto.

En su carta, Rose agradeció a los aficionados por su apoyo incondicional, incluso en los momentos más difíciles, y expresó que siempre llevará consigo el amor por el juego.

“El baloncesto fue y siempre será mi primer amor. Cuando era adolescente, tenía como meta convertirme en jugador de la NBA y lo logré. Esto no es un adiós al juego que amo; es un agradecimiento”.

A lo largo de su trayectoria, Rose enfrentó múltiples lesiones, pero su determinación y resiliencia lo llevaron a regresar a las canchas en varias ocasiones. Su paso por equipos como los Chicago Bulls, Nueva York, Detroit, Minnesota, Cleveland y Memphis, lo consolidó como un ícono del deporte.

En su última temporada con los Grizzlies, Rose reflexionó sobre el significado de volver a Memphis, donde todo comenzó. Su legado perdurará, no solo por sus logros, sino por la inspiración que brindó a muchos a lo largo de su carrera.

El playmaker se retira tras 723 partidos como profesional (en regular season) en los que ha anotado 12 mil 573 puntos, ha atrapado 2 mil 324 rebotes y ha repartido 3 mil 770 asistencias.

El base ha coleccionado numerosas distinciones individuales en su etapa como jugador: Novato del Año en 2009, parte del Mejor Quinteto de Rookies, tres veces All Star (2010, 2011 y 2012), parte del Mejor Quinteto de la NBA en 2011, campeón del Concurso de Habilidades en 2009 y, sobre todo, MVP de la temporada en 2011, el máximo premio de su carrera. Ese año, en su mejor temporada, Rose se convirtió en el jugador más joven de todos los tiempos en conseguir el galardón, algo que forma parte de su legado, en el que también figuran dos medallas de oro mundialistas con la selección de Estados Unidos, en 2010 y 2014.