España se da un festín en Córdoba y pasa a cuartos de la Nations
La selección, brillante de principio a fin, pasa por encima de Serbia con gran autoridad, gana por 3-0 y peleará por revalidar su corona en la competición
Al son que marcan las victorias, los triunfos y los éxitos, España se ha convertido en una máquina perfecta, infatigable, un equipo que juega bien, enamora, brilla y, normalmente, gana. Gana mucho y bien. Y lo hace porque juega con la convicción y la confianza de los grandes equipos. Lo ha demostrado una vez más esta noche en el Nuevo Arcángel de Córdoba, bajo un intenso aguacero y en el que los chicos de Luis de la Fuente han asegurado su presencia en los cuartos de final de la UEFA Nations League tras imponerse a Serbia por 3-0.
Es una selección en el que se demuestra que no hay nada más potente que la fuerza del colectivo y, precisamente por eso España no echa de menos nunca a nadie. Han faltado piezas tan importantes como Lamine Yamal, Nico Williams, Dani Carvajal, Rodri, Le Normand o Dani Olmo, pero quien los suple lo hace siempre con garantías y con las ideas claras.
El encuentro ante Serbia era decisivo para certificar la presencia en los cuartos de final y así lo ha afrontado el combinado nacional desde el primer minuto. En apenas un suspiro ya había abierto el marcador Aymeric Laporte y el guión del duelo siempre fue el mismo. España tuvo el balón, gobernó el partido, generó una ocasión tras otra y la goleada no fue todavía mayor porque faltó algo de puntería en el remate final.
Ni siquiera el 1-0 contentaba a una España desatada en busca de un segundo tanto que terminara de asentar la clasificación. Lo buscó con vértigo, pero sin ninguna prisa, cocinando cada jugada, buscando siempre la mejor opción. Y no solo encontró el segundo, sino también el tercero. Ese segundo tanto lo anotó un ejemplar Álvaro Morata, que llega a los 37 tantos con la ‘roja’.
Morata encontró el premio del gol con un gran disparo y, poco después, un pase mágico de Pedri al espacio terminaba en tarjeta roja para Serbia, falta al borde del área y un soberbio golazo de Álex Baena, un futbolista que este verano unió el oro olímpico con el título de la Eurocopa. Su tanto cerró la goleada, dio el pase a cuartos a España y culminó otra noche mágica para un equipo que no deja de crecer, de mejorar y de hacernos soñar.