Julio Urías vuelve a crecerse en la postemporada
En siete juegos de postemporada durante los últimos dos años, el lanzador sinaloense tiene ahora récord de 5-0 con un salvado y efectividad de 1.29
SAN FRANCISCO._ Otra postemporada, otra gran demostración del mexicano Julio César Urías.
El zurdo de los Dodgers de Los Ángeles lució la noche del sábado permitiendo una sola carrera y tres hits, con cinco ponches, en cinco entradas de labor en el triunfo 9-2 sobre los Gigantes de San Francisco en el Juego 2 de la Serie Divisional de la Liga Nacional, una labor que ha podido ser más larga de no ser porque el mánager Dave Roberts decidió sacarlo por un bateador emergente en la parte alta del sexto durante lo que terminó siendo un rally de cuatro rayitas.
En siete juegos de postemporada durante los últimos dos años, Urías tiene ahora récord de 5-0 con un salvado y efectividad de 1.29, producto de apenas cuatro carreras limpias permitidas en 28 innings de labor.
Después de la derrota 4-0 que le propinaron los Gigantes el viernes a los Dodgers en el primer juego de la serie, Urías le dio a su equipo lo que más necesitaba: ponerlos arriba en la pizarra temprano en el juego. Luego de que el abridor de los Gigantes, Kevin Gausman, boleó intencionalmente a AJ Pollock, Urías inició un rally de dos rayitas con un hit remolcador al jardín derecho, seguido por otro sencillo impulsor de Mookie Betts.
“Eso fue grandísimo. Algunas veces – y quizás es una mala comparación – es como cuando Steph Curry encesta la primera”, dijo Betts, comparando el sencillo de Urías con un lanzamiento de tres de la estrella de la NBA. “Simplemente necesitábamos anotar una carrera. Desde ese punto hicimos lo que sabemos podemos hacer. Creó el momentum”.
“Yo bateé un hit después de eso y luego fuimos consistentes a lo largo del juego, anotando carreras en todo el juego en vez de sólo uno o dos innings”.
Con la forma en la que Urías, de 25 años, suele lanzar en la postemporada, los Dodgers no necesitan anotar rayitas todo el encuentro.
La rotación de los Dodgers tiene nombres más grandes, ninguno más rutilante que Max Scherzer, que abrirá el Juego 3 la noche del lunes, o incluso Clayton Kershaw, que no lanzará esta postemporada debido a molestias en el antebrazo y el codo izquierdo. Walker Buehler, que inició el Juego 1, es también más famoso.
Pero quizás va siendo hora de que Urías reciba más atención. Este año, el culichi tuvo foja de 20-3 con efectividad de 2.96 para convertirse en el 12do ganador de 20 juegos en la historia de los Dodgers. Si bien las victorias de los pítchers como estadística individual no ocupan el lugar que alguna vez tuvieron, no hay forma de obviar que los Dodgers tiene marca de 27-6 (incluyendo el juego del sábado) cuando abre Urías, y han ganado sus últimas 12 aperturas.
“Julio, durante un buen tiempo, ha sido de alguna manera subestimado, y ahora la gente está empezando a darle su crédito”, siguió Betts. “Siempre ha sido muy bueno. Este año fue realmente consistente. Ésa ha sido la diferencia.
“Obviamente, en la postemporada siempre ha sido muy bueno, pero a lo largo de la temporada regular había tenido sus altos y bajos. Este año se mantuvo consistente, uno de nuestros mejores brazos, y esta noche lo demostró”.
La forma en la que Urías manejó el segundo inning, que inició dando un boleto al venezolano Wilmer Flores, quien luego anotó con un elevado de sacrificio del colombiano Donovan Solano, demostró por qué los Dodgers suelen ganar cuando Urías está sobre la loma.
“Yo pienso que mantuvo su compostura, él sólo se controló”, explicó el mánager Dave Roberts. “Para mí, eso muestra lo que ha crecido, ser capaz de limitar el daño”.
Urías probablemente será una pieza clave a medida que la serie avance. Con sólo 72 pitcheos lanzados el sábado, no es descartable que pueda ser utilizado como relevista en el Juego 4. Si la serie se va al máximo de cinco encuentros, sería candidato a iniciar ese último duelo. Los Gigantes dejaron récord de 80-35 esta campaña contra abridores derechos. Incluyendo el juego del sábado, su foja ante iniciadores zurdos después del Juego de Estrellas es de 11-11.
Sin importar cuándo le toque lanzar, Urías ha demostrado que tiene la personalidad y el talento para manejar cualquier asignación en octubre.
“Yo lo trato como cualquier otro juego”, dijo. “Es un juego importante y todo eso, pero uno simplemente se enfoca y pone su energía en cada pitcheo”.
(Con información de MLB)