Revive caso Tiburonario; aunque tenían acuerdo para el perdón, programan audiencia intermedia
"De acuerdo a la programación de audiencias, que se encuentra pública en la página web del Poder Judicial de Sinaloa, Dionisio Sánchez Félix, ex director de Control Administrativo; José Luis Ulloa Miranda, ex jefe del Departamento de Seguimiento Documental de Contratos, y Armando Trujillo Sicairos, ex Jefe del Departamento de Concursos y Contratos, tienen cita este jueves, a las 10:00 horas, para celebrar la audiencia intermedia"
Los tres ex funcionarios de la Secretaría de Desarrollo Urbano y Obras Públicas del gobierno de Mario López Valdez volverán al Centro de Justicia en una audiencia intermedia que ha sido programada, aunque ya habían logrado un acuerdo de reparación del daño y la suspensión del proceso en su contra.
De acuerdo a la programación de audiencias, que se encuentra pública en la página web del Poder Judicial de Sinaloa, Dionisio Sánchez Félix, ex director de Control Administrativo; José Luis Ulloa Miranda, ex jefe del Departamento de Seguimiento Documental de Contratos, y Armando Trujillo Sicairos, ex Jefe del Departamento de Concursos y Contratos, tienen cita este jueves, a las 10:00 horas, para celebrar la audiencia intermedia.
Según el sistema de justicia, en dicha audiencia se proponen las pruebas a favor y en contra, y el juez decide enviarlos o no a juicio oral.
Sin embargo, en la última aparición de los ex funcionarios ante el juez, habían logrado un acuerdo de reparación del daño.
Según la Fiscalía General del Estado, los acusados presuntamente asignaron contratos de manera irregular a empresas que no habían reunido los requisitos para participar, por lo que debían haber sido desechadas.
Tiburonario fue un robo en despoblado a la ciudad: Alcalde de Mazatlán
Los contratos, firmados para las empresas Osuna Osuna Arquitectos y Ecosistemas de México, llegaron hasta a 34 millones 640 mil pesos para la construcción de la tercera etapa del Tiburonario. El proyecto, que estaba proyectado para ser la principal atracción de Mazatlán, fue inaugurado en diciembre de 2016 y dos meses después el acrílico se rompió y colapsó.
En la última audiencia, los ex funcionarios habían logrado el acuerdo de retirar el acrílico fracturado y tapar el hueco con concreto en un lapso de seis meses, con el agregado de ofrecer una garantía de un año después de la fecha en que se realice la obra.
El acuerdo también incluyó residir en el mismo domicilio y acudir a firmar a la Unidad de Medidas Cautelares.
Tanto la Fiscalía, como el Gobierno del Estado y el Acuario de Mazatlán, estuvieron conformes con el acuerdo de la reparación del daño en la audiencia del 28 de octubre.