Presuntas negociaciones ilícitas, lo que puso a Héctor Cuén Díaz ante a un Juez

Humberto Quintero
26 septiembre 2023

Desde jabón, un tractor, carnes o jeans, el ex Director de Bienes y Suministros de la Casa Rosalina es señalado de orquestar una serie de compras irregulares, a sobreprecio y sin licitar, mismas que desataron un proceso bajo el cual la UAS dice defender la autonomía universitaria

El 20 de septiembre de este año se dio a conocer una denuncia penal en la que señalan a Héctor Melesio Cuén Díaz de presuntamente haber cometido el delito de negociaciones ilícitas como funcionario dentro de la estructura de la Universidad Autónoma de Sinaloa, en donde ocupó el cargo de Director de Bienes e Inventarios.

Dicha denuncia provocó que el hijo de Héctor Melesio Cuén Ojeda, ex Rector de la UAS y fundador del Partido Sinaloense, fuera llamado a comparecer ante un juez de control el próximo 10 de octubre a las 09:00 horas, bajo el cuadernillo 1098/2023.

Héctor Melesio hijo ejerció en dicha Dirección de la universidad, hasta que renunció el pasado mes de mayo en medio de señalamientos en su contra a raíz de reportajes de investigación con que Noroeste exhibió redes de proveedores ligadas a la familia Cuén Díaz y el PAS.

El primer caso fue de la red vinculada con la funcionaria de la Facultad de Informática, Yareli López Sotelo, cuyo esposo facturó a la Universidad hasta 123 millones 886 mil 915 pesos solo en 2022 por conceptos como equipos de cómputo, obras y otros productos; estas compras se hicieron a través de 5 mil 643 facturas pulverizadas, mismas que evadieron los límites de la licitación.

Posteriormente, fue descubierta la red de la familia López Imperial, en la cual están implicados Gloria Edna Imperial López y Jesús Ramón López Solís, casados entre sí, además de la empresa Comercializadora Kilider S.A de C.V, de la que es socio López Solís; entre los 3 facturaron a la UAS 118 millones de pesos en 2022 pulverizados en 5 mil 215 folios fiscales, las compras fueron desde jabón, mesa metálica o un tractor.

Luego, está el caso de Perla Viridiana Duarte Cervantes, una proveedora con el mismo domicilio fiscal que el yerno de Héctor Melesio Cuén Ojeda, quien vendió a la UAS 95 millones de pesos entre brochas, pinturas, cisternas, mingitorios u hojas triplay, todos los productos con sobreprecios que alcanzaron el 114 por ciento.

También se vio favorecido el negocio familiar de Héctor Cuén hijo, pues su inmobiliaria Luis XV cobró un millón 734 mil 466 pesos a la casa rosalina por “alimentos y bebidas”, por consumo en el restaurante Casa María también propiedad de la familia, mientras el propio Cuén Díaz fungía como Director de Bienes de la institución.

Por otro lado, desde 2017 un ex socio de Cuén Díaz recibió hasta 61 millones de pesos de la UAS gracias a la venta de lonas y uniformes a través de la empresa Publicidad Creativa de Culiacán, propiedad de Luis Alberto Aguilar Mendoza, con quien Héctor Melesio hijo fundó esta empresa.

Debido a la compra de carnes, pollos, pescado y huevos que representaron 61 millones de pesos a la UAS, el Rector Jesus Madueña Molina, ex Rector Juan Eulogio Guerra Liera y Comité de Adquisiciones de la casa de estudios, incluido Héctor Cuén Díaz, ya comparecieron ante un Juez y este caso continuará el 11 de octubre.

En esas operaciones figuró como proveedora María de la Luz Palazuelos Meza, militante del Partido Sinaloense que dirige el ex Rector Cuén Ojeda; dentro de las irregularidades están los 98 pesos por un pollo entero, cuando el precio promedio era de 50, o un kilo de carne a 198 pesos cuando la Profeco lo cotizaba en 180.

Noroeste también documentó la adquisición de equipos, refacciones y mantenimiento de aires acondicionados de la universidad a 107 millones 942 mil 321 pesos, sin haber actas de licitación en favor de Lenin Alonso Castro Armenta, empleado de confianza como Coordinador nivel “I” del departamento Centro de Instrumentos, dependiente de Bienes y Suministros que lideraba Cuén Díaz.

Mediante 5 mil 699 folios logró vender a la institución 49 millones 890 mil 84 pesos a la empresa Meve Climas, 34 millones 722 mil 3 pesos a Climas Triple E, y 23 millones 330 mil 224 pesos a Diseño y Vanguardia de Refrigeración.

La última compra irregular de la cual se tiene conocimiento fue la consistente en 14 millones de pesos por fumigaciones pagados a Héctor Guadalupe López López, quien cotizó el metro cuadrado de fumigación en 75.4 pesos, cuando el precio promedio es de entre 8 y 15 pesos.

No obstante, Héctor Cuén Díaz también protagonizó tratos como la compra de un pedazo de terreno junto al estacionamiento de la Torre Académica de la UAS, esto el 23 de septiembre de 2014; en dicho sitio, su esposa Belinda Portugal Domínguez puso una tienda de regalos, además de ser sede de una tintorería administrada por la familia Cuén Díaz.

De esta manera, la Universidad Autónoma de Sinaloa ha registrado compras sin licitar, con sobreprecios y a proveedores ligados entre sí por hasta 648 millones 270 mil 451 pesos y, hasta el momento, la UAS no se ha pronunciado al respecto.

Acerca de estas operaciones que han llevado a funcionarios de la UAS a procedimientos penales, la casa rosalina no ha emitido un posicionamiento concreto, y los señalados se han centrado en acusar al Gobierno del Estado de actuar en una persecución política en su contra.

En ese sentido, mencionan que todo deriva de que los universitarios han externado su rechazo a la Ley General de Educación Superior de Sinaloa publicada en el Periódico Oficial del Estado el 28 de febrero del 2023.

Así, durante ese lapso de tiempo han realizado movilizaciones bajo la consigna de “defender la autonomía universitaria”; lo han establecido en marchas como la del Día del Trabajo, o en las diferentes comparecencias del Rector en la Sede de Justicia Penal, a donde los uaseños han acudido en centenares para mostrar su apoyo a Jesús Madueña Molina.