Piñateros de Navolato brindan alegría para las fiestas de Navidad

Gabriela Martínez
18 diciembre 2023

El colorido de las piñatas luce en la carretera de Navolato, donde artesanos y comerciantes ofrecen distintos tamaños y precios

De colores brillantes, papel china y cartón están hechas las piñatas que disfrutan todos cuando es época navideña, y son los vendedores que año con año se preparan para brindar alegría a las festividades.

Por la carretera de Navolato están comerciantes con la venta de piñatas. Están por la misma calle, sólo que a metros de distancia y cada uno conoce que cuando se acerca la temporada decembrina, tienen que sacar la mercancía afuera de sus negocios. Son de distintos tamaños y precios que rondan desde los 250 hasta los 2 mil pesos.

Uno de los vendedores es Luz María Hernández Ramos, un ama de casa de 58 años que vive a las afueras de Navolato. Recientemente comenzó en el negocio de la venta de piñatas, pero le lleva un día hacer sólo una, ya que hace todo el procedimiento sola.

“Yo nunca hago piñatas, pero como tuve un problema lo hago para no pensar mucho. Ya vendí las primeras que hice y me han encargado otras”, dijo Hernández Ramos.

A unos metros más, está Magdaeli Sánchez González, una mujer que tiene 20 años trabajando con don Juan Valdez López y su esposa en la realización de piñatas. Cada año comienza su labor desde el primero de diciembre y perdura hasta principios de enero, después del Día de Reyes.

“Comenzamos porque mi esposa empezó a hacer, me dijo que se vendían y nos agarramos de ahí. Año con año desde hace 20 años estamos vendiendo piñatas, todos los diciembres”, comentó Valdez López.

Luego están Luis Ángel Sandoval y su familia, que por diversión hacen y venden piñatas todos los diciembres desde hace 14 años.

Todo el año se preparan para realizarlas, pues no esperan a que llegue diciembre para la producción, ya que, prefieren que cada miembro haga lo que le corresponde y después que llegue la temporada navideña, sacarlas para obtener ganancia.

“Cada quién tiene su oficio y ya para final de año ya está todo acumulado. Como un sistema que armamos nosotros. Está muy sistematizado el asunto este”, explicó Luis Ángel.

Añadió que su negocio se llama Piñatas El Mono, y le pusieron así porque cuando jugaban él y sus hermanos, se decían mono araña y por la nostalgia, decidieron hacerle honor a su infancia.