No hay por dónde, es lo que nos trae más intrigados, dice tío de Rubén, desaparecido desde febrero
El trabajador de la electricidad salió en busca de un cliente en la zona de La Cohetera, al sur de Culiacán, y no regresó; su familia realiza movilizaciones
Jaime García recalca que su familia, en el ámbito gremial, es muy conocida, y también en el deportivo, porque la mayoría practica el trote.
Aún con eso, han decidido salir a las calles, cada vez que se pueda, a recordarle a la sociedad que uno de los suyos, Rubén Antonio, está desaparecido desde el pasado 28 de febrero, que su familia lo espera en casa.
Por ello han implementado estrategias que no se ven en cualquier caso de desaparición: imprimieron pancartas, lonas y camisetas con el número 667457 9944 y arengan a la ciudadanía a que den información sin compromiso, sin investigación, y fuera del alcance de la Fiscalía.
“Fue a ver un trabajo, lo citaron una zona que le llaman La Cohetera, a un lado de La Costerita, el teléfono de donde lo llamaron, pues nada más ese día funcionó”, dice Jaime con tristeza.
“Se le llamó a su teléfono, estaba desconectado, o lo destruyeron el teléfono, hablamos con una persona que supuestamente se iba a ver, y resulta que tampoco; igual, ese teléfono, no está en servicio tampoco, ninguno de los dos; a la semana aparece la camioneta y pues nos quedamos en shock, peor todavía”.
El tío recuerda que la policía local halló la camioneta de Rubén en una de las calles del fraccionamiento nuevo que está a un lado del sector Bugambilias.
“Estaba perfectamente bien estacionada, cerrada y eso si no tenía nada adentro, evidencia de nada; yo personalmente fui a verla, a ver qué veíamos ahí, y no, no tenía nada, como que llegaron y la estacionaron ahí. Estamos demasiado pues con más dudas todavía”, señaló.
También descartó que haya tenido comportamientos anormales en los últimos días y horas previas a su desaparición.
“No, nada. Todo normal. Llamó el fin de semana para ver otro trabajo por allá por Durango, llegó desvelado y se levantó tarde, como si nada y le dijo a su señora ‘al rato nos vemos, voy a ver a dos clientes’, y primero fue a ver a uno de esos dos clientes, porque nosotros preguntamos y resulta que sí estuvo ahí, pero esa fue la última ubicación que nosotros supimos que iba a La Cohetera”, dijo.
“Nosotros, la forma en que trabajamos y hacemos deporte, pues somos muy conocidos, la familia García en el ramo eléctrico es muy conocida, en el ramo del deporte también, porque también corremos y todo eso; mucha gente nos conoce, pero queremos ampliar todo esto para la demás ciudadanía, para ver quién nos pueden mandar información”.
Recalcó que el número celular 667457 9944 lo publicaron, pero que no tiene relación ni conexión con el trabajo de la Fiscalía.
“Nos pueden mandar una nota... todo anónimo, ese teléfono no lo tiene la Fiscalía, que le esté llegando a la Fiscalía no, es un teléfono de nosotros que no se lo quisimos compartir para nadie, nada más exclusivo para recibir alguna información, alguna llamada, algún mensajito anónimo, nosotros no queremos nada, lo único que queremos es que nos lo regresen”, señaló.
Los datos los tiene frescos en la mente: día 28 de febrero, 3:30, a las cuatro vio al cliente y de ahí para delante ya no se supo de él.
“Ya se interrogó a mucha gente, al ayudante de él, a su señora, a su hermana. No sé qué sigue ahí”, expresó.
Alguien le preguntó directamente si tendría problemas de algún tipo.
“Nada, nada. Eso es lo que nos trae... si nosotros tuviéramos alguna línea, que dijera: ¿sabes qué? tuvo problemas aquí o hubo problemas. No, nada, ¿Problemas económicos o líos de faltas?, no, no, no. No hay por dónde, es lo que trae más intrigados”, lamentó.