Hay que igualar la cancha entre mujeres y hombres: Tatiana Camps

Alex Morales
11 noviembre 2023

La escritora del Best Seller ‘Liderar desde lo femenino’ concluyó que la humanidad debe adoptar características catalogadas como propias de uno u otro género por un mundo con desarrollo sostenible

CULIACÁN._ En el trayecto hacia el desarrollo sostenible, Tatiana Camps Reyes, autora de ‘Liderar desde lo femenino’, propone, en su libro, las estrategias para empatar la cancha entre la humanidad, que ha sido dividida por un manual de vida escrito por hombres.

La escritora chilena visitó Culiacán para participar en el Summit Empresarial 2023, donde presentó su obra, un Best Seller en su país natal, en el que responde la pregunta ¿Cuál es el valor estratégico que las mujeres traemos a las organizaciones?.

“No es que ‘yo quiero ser tratada con igualdad’, para ser tratadas con igualdad hay que igualar la cancha, y al entender eso nos permite apropiarnos de ser agentes de la transformación cultural para la equidad de género y el empoderamiento femenino”, manifestó Tatiana Camps.

Según palabras de la autora, el libro parte de dos ejes centrales; el primero, en el que habla de contexto histórico-cultural entre géneros, para después ofrecer herramientas para aprovechar habilidades, que han sido encasilladas como femeninas, en un ámbito de liderazgo.

La chilena inició su investigación cuestionando los motivos por los que las mujeres ameritan exigir derechos que no fueron otorgados por nacimiento, como en el caso de personas del otro género.

“¿Por qué necesitamos hablar del liderazgo desde lo femenino? Es esta cultura del patriarcado y el lugar donde ha puesto a los hombres y a las mujeres, entender eso, tenerlo presente, y las implicancia profundas que trae”, señaló.

“Creo que es fundamental para las mujeres de hoy tener esta perspectiva histórica, entender que lo que está pasando tiene una explicación histórica”.

Por medio de entrevistas con féminas líderes, en diversos sectores, que nutrieron la indagación, surgió una nueva inquietud por resolver en la mente de Camps: ¿Por qué las mujeres no quieren ser vinculadas con lo femenino?

“Hay mujeres que no querían ser asociadas con lo femenino, porque se ha entendido lo femenino como lo débil, como lo sometido”, explicó.

Que muchas mujeres se avergüencen de su femineidad tiene que ver con las respuestas filosóficas, antropológicas, políticas, biológicas y psicológicas fueron planteadas por hombres desde una perspectiva unilateral, enalteciendo el género masculino.

“Lo que entendemos por femenino ha estado construido de una conversación entre hombre, y de esa conversación entre hombres lo femenino era lo menor, lo que había que dominar, lo que había que proteger, lo que había que ayudar, lo inseguro, lo emocional con una carga negativa de lo que es lo emocional”, agregó.

Esto, ha orillado a muchas a adoptar actitudes catalogadas como masculinas desde tiempos inmemorables, para posibilitar obtener cargos de poder o, simplemente, ser reconocidas por su labor.

“La cantidad de mujeres que han reconocido haberse masculinizado alguna vez, yo misma me di cuenta como me había masculinizado, como yo creía que femenino e inteligente no podían convivir en una misma persona y yo tenía que elegir o era femenina o eres inteligente”, agregó.

Tras plantear los antecedentes que han dividido al mundo en una guerra de géneros en un mundo definido por hombres, indicó los resultados de su investigación, que reveló un estilo de liderazgo desde lo femenino, fundamentalmente, por la capacidad de relacionarse de manera respetuoso, afectiva, cercana, autoconsciente, que incorpora el pensamiento sistémico y la sostenibilidad.

En comparación con la dirección desde una perspectiva masculina, el liderazgo se ha reconocido como el que implementaron los conquistadores que oprimieron a civilizaciones enteras para obtener bienes propios, por medio de la jerarquía, autoritarismo, imposición y dominio.

Explicó que denominar ciertos rasgos como propios de un género u otro carece de fundamentos biológicos, pues está idea de las energías femeninas y masculinas emergen de un fenómeno cultural.

“Esos fundamentos biológicos-culturales son inseparables, y en rato, la cultura nos transforma, y puede hacer que lo femenino y lo masculino estén disponibles para todos”, agregó.

El libro ‘Liderar desde lo femenino’ no solo plantea las brechas entre la humanidad impuestas siglos atrás, pues, en un intento por alcanzar el desarrollo sostenible del mundo, Tatiana anhela igualdad que beneficiará no solo a mujeres oprimidas desde tiempos inmemorables, sino también para permitirle a los hombres vivir en libertad.

“Detenerse a pensar y poner en valor lo femenino no es estigmatizar, es libertad de elección y dar libertad de integrar lo humano para hombres y para mujeres”, le dijo a Noroeste.