En Valle Alto, Culiacán, el agua les llega al pecho
"Dos horas y media de intensas lluvias bastaron para que el agua subiera casi dos metros en este sector"
Mientras Alicia Pinto platica que la lluvia de ayer le dejó inservibles todos los enseres domésticos que había en su casa, un refrigerador de dos metros de largo flota a su lado llevado por la corriente de agua que se formó en la Calle Siete Valles, en el fraccionamiento Valle Alto en Culiacán.
El volumen de agua que cayó en Culiacán ascendió a los 235 milímetros, más de 100 colonias en la capital Sinaloense resultaron afectadas por la precipitación que empezó desde la madrugada, pero que se intensificó desde las 7:30 a las 10:00 horas. Dos horas y media bastaron para inundar el Fraccionamiento Valle Alto.
Nadie avisó, nadie previó esta lluvia que dejó sin nada a muchas familias de Valle Alto, una de las zonas más afectadas por las precipitaciones; justo a la entrada del fraccionamiento, se ve un auto arrastrado por la corriente del canal de Bacurimí, la lluvia al parecer tomó por sorpresa a todos.
Alicia Pinto viene caminando de la mano de sus rescatistas, quienes se describen como trabajadores de Cristo. Con un semblante débil y aguantando el llanto relata cómo vivió la inundación.
"Perdimos todo, cocina, refrigerador, pero mira bendito sea Dios estamos bien", dice.
--¿A qué hora empezaron a ver mucha lluvia?
--Como a las siete y media, cuando abrí el portón y vi que estaba todo inundado fue como a las ocho u ocho y media, ya para adelante no paró.
Mientras habla, un refrigerador blanco de aproximadamente dos metros es llevado por la corriente, ya tenía aproximadamente dos horas que había dejado de llover, pero aún había fuertes caudales de agua en las calles del fraccionamiento que también sufrió los daños que dejó el Huracán Manuel hace 5 años.
Alicia se aferra a las manos de los dos jóvenes que le ayudan a caminar entre las aguas color café de la calle donde vive, no tiene más que palabras de agradecimiento a ellos y a quien la ha apoyado.
--¿Ha sido difícil la evacuación, la han apoyado las autoridades?
--Sí, unos vecinos nos ayudaron a quitar la protección para que pudiéramos salir de la cochera y ya ahorita que llegan ellos y los soldados bendito sea Dios que nos los mandó estamos aquí.
--¿Usted vivió el Huracán Manuel?
--Sí.
--¿Se puede comparar?
"Lo que pasa que no pensamos que con esta lluvia fuéramos a inundarnos, porque si te acuerdas el Huracán Manuel fue cosa fuerte, y se inundó así de una, y esto, tampoco lo esperábamos pues osea, fue algo inesperado".
Adentrándose más hacia el corazón de Valle Alto, justo antes de llegar a la calle Valle Sereno se encuentra Germán, él pide no salir en cámara "woa llorar" bromea, pero accede a platicar cómo ha vivido la inundación.
Acompañado de su vecino y su mascota, un pitbull al que el agua casi lo tapa, cuenta que la sala de su casa quedó inservible. A unos pasos de la puerta de su hogar se ve cómo el agua sale a presión por debajo de su puerta.
Más al fondo se ve un camión de volteo que quedó varado en medio de la calle Sereno, al caminar, los más jóvenes posan para la lente de los fotógrafos, pareciera que no han perdido nada, sin embargo, la gente mayor denota tristeza, no sabe qué hará mañana.
Los mismos jóvenes que posan para la cámara ayudan a mover la "góndula" que se encuentra inerte en medio de la corriente, a esa altura, el nivel del agua les llega a todos al pecho, es el lugar más profundo del sector, quien vive en esta zona, afirma que el nivel del agua llegó casi a los dos metros de altura.
Los muchachos son apoyados por elementos de la Policía Municipal para mover la maquinaria de 10 toneladas, alrededor de 20 personas logran mover un poco la "góndula" lo suficiente para sacarla un poco del agua para ver si la pueden echar a andar, sin embargo, al intentarlo, la unidad empieza a "echar" humo, denotando que el esfuerzo no sirvió de mucho.
Ya casi todas las personas son evacuadas de sus casas, todos apoyan, vecinos con sus camionetas, el Ayuntamiento con sus camiones pesados y el Ejército con sus vehículos se disponen a sacar de sus hogares a las familias damnificadas.
Todos van a la Iglesia de Valle Alto, la cual, abrió sus puertas a los damnificados desde las 8:00 horas, cuenta el sacerdote... poco a poco la gente es llevada a un lugar seguro, hay quienes se fueron con un familiar, con un amigo, pero la mayoría acudieron al albergue ubicado en la Universidad Autónoma de Occidente.