En primer trimestre de 2024, desaparición de personas creció 52% en Sinaloa
Es necesario desarrollar nuevos y mejores protocolos de búsqueda, además de una mejor manera de registrar y documentar cada caso, para conocer el contexto de cada desaparición y con ello esclarecer más rápido cada situación, señala activista
Durante el primer trimestre del 2024, los registros por delitos relacionados con la desaparición forzada o privación de la libertad han aumentado hasta un 52 por ciento, comparado con los mismos tres meses del 2021.
Los datos del Secretariado Ejecutivo del Sistema Estatal de Seguridad Pública revelan que a marzo de 2021 documentaron 194 víctimas, mientras que para 2024 esa cifra creció a 296.
El 22 de marzo, en Culiacán, se registró una jornada en la que alertaron por la privación ilegal de la libertad de 66 personas, aunque las autoridades solamente contabilizaron 57 en las carpetas de investigación abiertas por esos hechos.
El incremento registrado por Sesesp va más allá de esos acontecimientos, ya que de enero 2021 a enero 2024 se presentaron nueve casos más; durante febrero fueron 19 más de 2024 respecto a 2021; y en marzo hubo 74 víctimas.
En la recopilación de estos datos, el Secretariado considera los delitos de privación ilegal de la libertad, desaparición forzada y desaparición cometida por particulares.
“Hay que cambiar el marco, no solo legal. Hay que diseñar un protocolo, ese tiene que cambiar, el protocolo de búsqueda tiene que actualizarse a la realidad”, señaló Javier Llausás Magaña, miembro de la organización Construyendo Espacios para la Paz.
“Algo urgente es que no se esperen 24 a 48 horas para iniciar la búsqueda, porque los primeros minutos son claves en la búsqueda. Yo cambiaría eso, que cuando una persona denuncia la desaparición, se active el mecanismo para que nuestras instituciones de seguridad pública empiecen a rastrear en todo el sistema que tienen ellos”.
“Si lo que estamos haciendo ahorita funcionara, no hubiera víctimas. Lo que estamos haciendo ahorita, de la forma en que lo estamos haciendo, no está funcionando. Si lo que estamos haciendo ahorita no da resultados, lo más inteligente es decir “oye, vamos cambiando”, vamos intentando otra manera”, señaló Llausás Magaña.
El activista subrayó que también se requiere perfeccionar la manera en que registran y visibilizan los casos de desapariciones, ya que una cifra en realidad representa una vida, además de que cada caso puede tener una razón y fondo diferentes.
”Tenemos que saber el nombre, la edad, el contexto de esas personas para poder decir y responder preguntas. ¿En dónde están? ¿Dónde pueden estar? ¿Qué podemos hacer para que no pase?”, comentó.
“Las personas desaparecidas, o que no llegan a casa, están en varios grupos. Pensamos que todos son de las personas desaparecidas que desafortunadamente se van a convertir en víctimas, pero no, hay un grupo que regresan, porque hay grupos de adolescentes, hay grupos de personas que se van de la familia y regresan”, puntualizó.