Domingo de Ramos, el bálsamo en el alma de culiacanenses entre la incertidumbre de la inseguridad
La ciudad se siente adormecida este domingo debido a un operativo en la zona norponiente de la mancha urbana, pero la celebración religiosa del Domingo de Ramos regaló a la ciudad un momento para aferrarse
CULIACÁN._ Después de haber escuchado las detonaciones de armas de fuego durante la madrugada, Culiacán se ha mantenido en silencio, a la expectativa de que algo ocurra.
En el centro de la ciudad las personas caminan de prisa, entrando y saliendo sin detenerse más tiempo en los establecimientos. Los transportes urbanos tardan más de lo usual, uno que otro carro pasa esporádicamente, nada es normal, pero la gente trata de mantenerlo así.
El cielo pareciera ponerse de acuerdo con el ambiente de la ciudad, ya que el gris de las nubes juntas ocultando el sol nos comunica las emociones de lo que últimamente se ha presentado, a un paso del abismo de lo que pudiera convertirse en histeria.
Por la mañana la ciudad se aferró a la esperanza, pues en medio de una amenazante inseguridad el Domingo de Ramos ofreció un bálsamo en el alma de los feligreses.
Fieles católicos de Culiacán se congregaron en la Catedral Basílica de Nuestra Señora del Rosario donde protagonizaron una sencilla procesión en referencia a la aceptación de Jesús como Rey de Jerusalén.
Recordando la historia bíblica que describe cómo los discípulos de Cristo tapizaron de palmas la entrada de Jesús a Jerusalén mientras este montaba en un burro, se realizó en Catedral, la procesión en remembranza al hecho y al inicio de la Semana Santa.
Durante la misa se procedió a leer el evangelio de San Marcos, para proceder con la semana de la pasión, muerte y resurrección de Cristo.
Ahí fue ofrecido durante unos minutos un santuario entre la incertidubre que envuelve la capital sinaloense desde el viernes, cuando a primeras horas 66 personas fueron arrancadas de sus hogares dejando un vacío por horas.
Entre los privados de la libertad hubo 22 niños y niñas.
Para este domingo ya fueron liberadas 58 personas, y todos los niños y niñas están en sus casas. Pero quedan 8 personas sin ser localizadas.
Este domingo, a las 2:00 horas un enfrentamiento entre Guardia Nacional y civiles armados dejó un elemento sin vida y a otro más herido. Por ello fue cerrado el Malecón Nuevo y la zona norponiente de la ciudad es testigo de un operativo que consiste en el cierre de algunas vialidades por parte de la milicia.
Alrededor de las 14:00 horas, por el cierre del nuevo malecón el tráfico se agolpaba por el bulevar Universitarios, con los carros que trataban de avanzar lo más rápido que podían, porque era la única salida que había.
Por la misma zona, en un jardín de niños de la colonia Obrero Campesina se situaron elementos de la Secretaría de la Defensa Nacional, dando un contraste con las armas, los uniformes y la expectativa de ellos, con los vivos colores rojo, verde, amarillo, y azul de las llantas semienterradas que los niños usarían en un día normal para jugar.
Un helicóptero se hace escuchar por la zona norte de Culiacán, no se sabe a quién busca, pues la autoridad federal no dice mucho.
La expectativa de que la situación se transforme de un momento a otro en un Jueves Negro mantiene a los culiacanenses en sus hogares, adolecidos y temerosos.
El sector Tres Ríos, punto comercial más importante en Culiacán, solo registra susurros a pesar de ser el primer fin de semana de las vacaciones escolares de primavera.
Tal vez en unos meses la distancia le permita a Culiacán entender lo que ocurrió este fin de semana en la ciudad, pero de momento no se entiende y nadie explica.