Triste deceso

Guillermo Fárber
22 diciembre 2021

El Jártur: “Este texto es de mi amiga española Lola Sánchez Fernández, poeta que vive en Soria:

Ayer nos fuimos a dormir con la noticia de la muerte de Verónica Forqué, gran actriz. Estoy segura de que no hay nadie que no la quisiera porque con su sonrisa y su mirada limpia y clara nos predisponían a disfrutar con ella viniese lo que viniese. Verónica se ha ido sola y triste como se van los que ya no pueden más con su vida. Hoy he leído que no fue demasiado feliz sobre todo en los últimos años, cuando necesitó ayuda psicológica.

Pero ni extrañarnos. Porque esto que nos pasa está llevando a mucha gente a sentir que se le derrumban los pilares de su casa interior, los que nos sostienen durante la vida. No tanta estadística, tantos números y tantas imágenes de miedo, de tanta soledad y tanto abandono, de tantas promesas desde arriba, que nunca llegan y más atención a las personas que lo necesitan. Las enfermedades mentales declaradas y las disfunciones emocionales que aumentan de forma galopante en esta sociedad histérica y mentirosa, tales como la depresión y la ansiedad, deberían ser tratadas con dignidad, respeto y profesionalidad. Deberían dejar de ser una cola que espera la pastilla de turno y convertirse en un lugar protegido y amable donde quien lo necesitara pudiera expresar lo que tanto le duele a su corazón.

Seguro que todos tenemos algún familiar que en un momento dado ha pasado por algo así, o peor, alguno que ha pasado a mayores y parece irrecuperable. Cuán injusto es saber que con otra clase de atención esa persona habría podido superar su enfermedad y seguir su vida como cualquier otra. Pero se tiende a pensar que esas cosas no tienen importancia, que se pasan solas o que pasan porque aquel que las tiene se lo ha buscado.

Mal vamos, y ahora en estos tiempos abonados de incertidumbre, donde se prohíbe el abrazo, los besos, el compartir y todo lo que nos hace feliz, mucho peor.

¿Nadie piensa como yo que el AMOR ES LA MEJOR MEDICINA?

Nota de Google: ‘La actriz Verónica Forqué fue hallada muerta este lunes en Madrid, en su casa, y las primeras hipótesis, por cómo apareció su cuerpo, apuntan al suicidio’.

Wikipedia:

Verónica Forqué Vázquez-Vigo (1955-2021) fue una multipremiada actriz española, galardonada con cuatro Premios Goya.

Estudió arte dramático e inició la carrera de psicología, nunca concluida. Se inició en el mundo del cine y se convirtió en actriz de comedia.

El gran salto en la carrera cinematográfica de Verónica Forqué se produjo cuando Pedro Almodóvar la convirtió en la entrañable Cristal de ¿Qué he hecho yo para merecer esto? (1984).

Su amistad con Fernando Colomo se tradujo en dos comedias de gran éxito Bajarse al moro y La vida alegre, por esta última película, se le otorgó su primer Goya como actriz protagonista; y en ese mismo 1988 también ganó un segundo Goya como actriz de reparto por Moros y cristianos. Fue la primera intérprete femenina en ganar dos Goya en la misma ceremonia, cosa que no ocurriría hasta 29 años después.

Colaboró con Manuel Gómez Pereira en las comedias Salsa rosa o ¿Por qué lo llaman amor cuando quieren decir sexo?, colaboración que se repitió en 2005 con Reinas. En 1993 obtuvo un cuarto Goya por su papel protagonista en Kika, de Pedro Almodóvar, con quien había trabajado anteriormente.

También en la televisión ganó gran popularidad.

En el teatro, destaca el papel de Carmela en la obra ¡Ay, Carmela! (1986). Como directora escénica destaca la obra Adulterios, de Woody Allen en 2009.

En cuanto a su vida personal, en 1980 inició un romance con el también actor Joaquín Kremel. En 1981 se casó con el director de cine Manuel Iborra, de quien se divorció en 2014. Tuvieron una hija en común.

Ya había intentado provocarse la muerte en al menos otra ocasión”.