Manuel Clouthier a 31 años de su asesinato
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Según la historia, el domingo 1 de octubre de 1989 Manuel Clouthier del Rincón y su esposa doña Leticia Carrillo habían asistido a misa de 8 en la parroquia de la Sagrada Familia, desayunó y esperó al diputado Javier Calvo Manrique, líder del blanquiazul en Sinaloa. Salieron de la Colonia Chapultepec, continuaron por la Avenida Obregón para luego enfilar con rumbo a la carretera libre a Mazatlán.
Viajaban solos, sin escoltas ni chofer, sin acompañamiento. Pasaron el cerro del “elefante” poco antes de la laguna colorada, el crucero a Costa Rica, el Carrizal y unos minutos más adelante el Salado. Al llegar al kilometro 158 + 100, las versiones se contradicen, unos afirman que los impactó por alcance un tortón según constan algunas de las escasas imágenes del accidente, otros dicen que el conductor invadió carril al perder el control del volante.
Como sucede en estos casos, las contradicciones ministeriales dejaron lugar a más dudas. Relata Tatiana Clouthier en su libro “Maquío, mi padre” que, según los peritajes y las declaraciones del chofer del pesado automotor que acabó con la vida del empresario y su acompañante, el accidente ocurrió a las 9:13 am. Pero los testigos afirman que el accidente tuvo lugar entre 10:20 y 10:30 de la mañana. Lo cierto es que en la frecuencia de la Policía Ministerial sería hasta las 11 am que se reportaría el accidente carretero en donde ya señalaban dos víctimas mortales, masculinos y se alertaba para que se le diera aviso al Gobernador y al enlace de la Secretaría de Gobernación, “El muerto era el Maquío y un diputado de la oposición”. Tal vez ellos estaban enterados desde antes.
Manuel Clouthier había desafiado al PRI años antes, motivado por las profundas divisiones del empresariado mexicano con el partido hegemónico. Algunos en el tricolor habían optado por el camino de los asesinatos, en 1973 el empresario cervecero y filántropo mexicano Eugenio Garza Sada fue asesinado por supuestos integrantes de la Liga Comunista 23 de Septiembre. Aunque algunos afirman que no fue el caso de un secuestro mal planeado, sino una emboscada a mansalva.
Desde entonces Manuel vivió en lucha, perseguido por los fantasmas del comunismo disfrazado, de jóvenes encharolados por el Gobierno que servían de brazo armado para los trabajos sucios. Relatan que en 1973 y 1977 Clouthier había dejado cartas póstumas a sus hijos, “para abrirlas en caso de que le sucediera algo”. Ahí narraba su desconfianza al Gobierno, las amenazas veladas que en múltiples ocasiones recibió.
En una ocasión cuentan que el Gobernador sinaloense Alfonso G. Calderón mandó llamar a Manuel para contarle que habían detenido a unos “revoltosos” y que entre sus pertenencias estaba un mapa con detalles sobre la casa del Maquío. Según sus “investigaciones” la familia de Clouthier estaba en la mira de la “liga comunista” y era cuestión de tiempo para que el grupo rebelde perpetrara en contra de ellos un secuestro o un atentado.
Clouthier nunca creyó del todo, sabía que esa era también una forma de intimidación. Valiente y resuelto nunca bajó el tono de su critica al gobierno en turno y lejos de alejarlo con espantos de la política, las amenazas lo hicieron meterse más. Como hombre de fe, sabía que nadie se moría en vísperas y que él dejaría esta tierra cuando Dios dictara sentencia, ni antes, ni después.
El Maquío no ganó oficialmente ni una sola de sus elecciones, en la presidencial donde compitió Salinas quedó muy lejos del primer lugar. Pero en cada momento de su vida, en cada discurso y correspondencia demostró en los albores de la democracia mexicana que la congruencia puede dejar boquetes enormes en los muros del sistema de político autoritario que terminó por caer años más tarde.
Recordando la historia de Manuel Clouthier, mártir de la democracia mexicana, me pregunto: ¿Qué sentirán aquellos que mientras él luchaba contra la hegemonía de un partido de Estado, otros se desvivían en elogios tratando de hacer carrera de la mano de los poderosos en turno? ¿Se habrán olvidado que muchos de los asesinos del Maquío comparten intereses comunes en Morena? No recordarán que mientras Manuel hacía campaña en contra del PRI jugándose la vida en la oposición Otros comenzando con Andrés Manuel le decían con absoluto servilismo al poder sin contrapesos: ¡Sí, señor Presidente! Para que no se les olvide les recuerdo: Clouthier fue enemigo acérrimo del abuso del poder presidencial. Luego le seguimos…