Los ingresos públicos sí alcanzarían
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Rafael Morgan Ríos
cp_rafaelmorgan@hotmail.com
Algunos lectores de esta columna piden se aporten ideas que permitan aumentar las posibilidades de mejorar la economía, habría que repasar primero lo que el gobierno federal ha estado decidiendo, porque parte de las ideas y soluciones está en detener unas y estimular otras de esas decisiones y políticas gubernamentales:
1. En primer lugar, hay que aclarar que el TMEC no aportará mucha sustancia, pues el tratado anterior ha estado vigente para todo lo referente a importaciones y exportaciones con los países socios; además de que, una vez aprobado, se requieren una serie de reglamentaciones en los tres países para que funcione en la práctica en cuanto aranceles y cuotas y sobre todo en lo referente a las nuevas obligaciones para México sobre mano de obra y contenido de 70 por ciento de partes de Estados Unidos. En suma, el TMEC poco aportará en 2020 y parte de 2021, pero traerá más exigencias.
2. La idea de resucitar a Pemex, aunque se lograra, tendría resultados hasta en tres o cinco años, pues la producción de crudo sigue muy baja y para colmo, los precios internacionales disminuyen ante la caída de la economía China y los pronósticos negativos para la economía global. Que las cosas no van bien en Pemex, se demuestra con la colocación de bonos a un plazo de 40 años, con una tasa cercana a 7 por ciento anual que es altísima, pues los mercados internacionales no pagan ni el 3 por ciento; cualquier financiero pudiera haber asesorado al gobierno que un plazo mayor a 30 años es absolutamente negativo para Pemex, pues la amortización del capital en los últimos 10 años es casi nula. El gobierno tuvo que ceder en tasa y plazo para poder obtener recursos para pagar deuda de vencimiento próximo de Pemex.
3. La estrategia de cortísimo plazo ha sido la de los recortes presupuestarios, tanto de recursos, como de personal y de obra pública, pero aún el presupuesto recortado y aprobado, o no se entrega o no se ejerce por las dependencias. Las consecuencias han sido una caída en la eficiencia, calidad y cantidad de los servicios públicos, pues se han detenido o eliminado servicios cuya recuperación llevará años.
4. Ante la falta de recursos financieros y como se ha declarado que no se aprobarán nuevos impuestos ni se aumentarán los existentes y como los programas asistenciales están consumiendo los ingresos públicos, así como los proyectos del Tren Maya, del aeropuerto Santa Lucía y de la nueva refinería, se ha tenido que echar mano de las reservas, tanto del Fondo de Estabilización de Ingresos como del Fondo Mexicano del Petróleo, con todo el riesgo de que ante una auténtica emergencia ya sea climática, de terremotos o de salud, no se cuente con los recursos necesarios para enfrentarlas.
5. Se ha estado obligando a estados y municipios, con los recortes que se les han aplicado, a buscar ingresos con deuda y a proponer nuevos impuestos y derechos, lo cual no parece mal, pues los derechos de agua y drenaje han sido históricamente muy bajos y con una muy deficiente cobranza; lo mismo pasa con el Impuesto Predial en cuanto a la eficiencia de su recuperación. Finalmente, tal vez el Gobierno Federal no se endeude ni aumente impuestos, pero parece que los otros dos órdenes de gobierno sí lo tendrán que hacer.
Si no hay más impuestos, ni más deuda y las reservas ya casi se consumieron, ¿cuáles serían algunas alternativas?
a) Recuperar a Pemex, pero obteniendo los recursos petroleros a través de la inversión privada, nacional y extranjera. El caso del último descubrimiento del yacimiento petrolero Zama, por la compañía Talos Energy, que se contrató otorgando el 70 por ciento de lo encontrado a Pemex, sin embargo, se ha entrado en conflicto pues la paraestatal se quiere “rajar” y lo exige todo, enviando mensajes muy negativos a los inversionistas.
b) Una estrategia agresiva para incorporar a la legalidad a la economía informal tal vez con cuotas fijas, aunque sean menores, en impuestos o para el IMSS, en beneficio de los trabajadores y con dispensa de trámites y papeleo.
c) Determinar cuál de los cuatro proyectos principales del gobierno es el más redituable o el menos costoso o bien el que deje más beneficio social, para continuarlo o terminarlo, dejando pendientes los otros tres.
d) Ayudar a estados y municipios a mejorar sus ingresos propios y vigilar la correcta aplicación de los recursos federales.
e) Ordenar más y mejor los programas asistenciales y eliminar los que no estén cumpliendo con su objetivo.
Parecen soluciones difíciles, pero no más que lo que se está haciendo con tanto costo social.