Erosión de la autoestima

Rodolfo Díaz Fonseca
29 enero 2020

""

rfonseca@noroeste.com
@rodolfodiazf

 

La autoestima es la opinión o concepto que tiene una persona de sí misma. A través de esta valoración el individuo se percibe como alguien capaz y competente para enfrentar los distintos problemas y desafíos que se le presentan, o a la inversa.

Las personas con baja autoestima se deprimen porque no se consideran guapas, atractivas, inteligentes, brillantes, simpáticas o cualquier otra cualidad que consideran esencial. Sienten que no son dignas de ser amadas o estimadas, de ahí que se menosprecien, amarguen, frustren y depriman. Estos sentimientos de minusvalía pueden generar conductas agresivas y violentas hacia las personas de su entorno, con tal de compensar su baja consideración.

Los patrones de belleza y éxito que se manejan en esta sociedad consumista no estimulan el óptimo desarrollo y equilibrio de la autoestima, antes bien, se le erosiona. Por eso, la chica que no se siente agraciada con su físico recurrirá a las cirugías plásticas para obtener los estándares estéticos que se manejan. De igual forma, si las personas buscan frenéticamente vestirse con ropas de marca es porque se les hace creer que valen por lo que parecen y no por lo que son.

Asimismo, es común que los jóvenes ansíen pertenecer a algún grupo disidente, violento, criminal o mafioso para sentir que cuentan, que son alguien y que así acaparan el respeto de los demás. Lamentablemente, buscan fuera el cariño, aceptación y acogida que tal vez no encontraron en su casa, escuela y ambiente familiar.

En el libro El valor de educar, el filósofo español Fernando Savater señaló que tenemos en contra de la sana autoestima los “modelos brindados por los edificantemente nada edificantes medios audiovisuales, las bandas callejeras, las sectas integristas o los movimientos políticamente violentos y tantas otras ofertas ominosas”.

¿Tengo sana autoestima?