Despertar en un lado, recogerse en otro

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klaishu@hotmail.com

Tengo 45 días de estar dando actualizaciones diarias en Twitter, acerca de la epidemia de coronavirus en China. Desde hace dos semanas las cosas ya están estabilizadas en los números; la mayoría de las provincias ya reportaba “status verde”, que quiere decir que ya no se reportaban casos nuevos por más de cinco días consecutivos. La vida está volviendo a las calles y las tiendas abren. La pregunta que más me hacen es, “entonces ¿China ya abre de nuevo?” La respuesta sigue siendo: aún no. Las razones son dos.
La primera es un problema logístico monumental. La epidemia nos sorprendió en plenas vacaciones de Año Nuevo, cuando 300 millones de personas, yo incluido, vamos a casa de la familia para pasar las fiestas. Esto pasa todos los años y la infraestructura de transporte del país lo soporta perfectamente. Pero ahora, 40 días después de empezar la cuarentena y con el país con su base industrial paralizada, hay que empezar a volver al trabajo. Eso significa 300 millones de movimientos de personas, algunas de las cuales inevitablemente estarán infectadas. Causar otro brote en estas circunstancias es impensable, es un riesgo que de ninguna manera se puede tomar. De modo que se está haciendo muy cuidadosamente y a través de “Códigos Verdes” de viaje, que indican que una persona tiene por lo menos 15 días en casa u observando la cuarentena y sin ningún síntoma. Es mi caso y el de mi familia, pero como estuvimos recluido en una zona de alta alerta (más de 140 casos), necesitamos Código Verde de donde partimos, y otro de la ciudad a donde llegaremos; todo esto toma tiempo. De hecho, mi oficina en la ciudad donde trabajo ya está abierta y mi equipo está de vuelta, yo soy el único que falta.
La segunda razón es que desde hace dos días ha habido un repunte pequeño en el número de casos sospechosos, que ya estaba a la baja definitivamente desde hacía dos semanas. ¿La razón? Gente infectada en aviones llegando de Europa, en especial Italia. En los últimos tres días se identificaron 60 casos positivos y 200 sospechosos, puestos todos en cuarentena directamente; pero esto ha suscitado nuevas preocupaciones ya que el virus se ha globalizado.
Muchas fábricas han abierto al 20 ó 30% de capacidad, y las exportaciones siguen virtualmente paralizadas; pero el riesgo es muy alto y aún falta un buen tiempo para que las cosas vuelvan a la normalidad y todos estemos en “Código Verde”.
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