Atención a datos de inflación
Iniciamos ayer la semana con una jornada bursátil mixta para las bolsas del planeta. El mercado de valores estadounidense concluyó la sesión del lunes con cautela, pasando de negativo a mixto, atentos a novedades corporativas y a la espera de información económica los siguientes días. Mientras que el Nasdaq y el SP500 presentaron su segunda baja seguida, el Dow subió por tercera ocasión en cuatro días. El índice industrial de 30 emisoras y la canasta de 500 empresas siguen muy cerca de sus máximos históricos.
La semana pasada los datos de empleo de Estados Unidos para febrero fueron más sólidos que lo esperado, pero las revisiones a la baja de las cifras de los meses anteriores, junto con un menor crecimiento en los salarios, redujeron la presión inflacionaria en el mercado laboral. La tasa de desempleo aumentó del 3.7 al 3.9 por ciento. Las bolsas de Estados Unidos terminaron la semana a la baja, con una caída del 1.2 por ciento en el Nasdaq, del 0.9 por ciento en el Dow Jones y del 0.3 por ciento en el SP500.
Los operadores probablemente toman posiciones de cara a los datos económicos de los próximos días, como la producción industrial, las ventas minoristas y la confianza del consumidor, entre otros. La información que más impactará las cotizaciones será la inflación al consumidor (para la que se espera un 3.1 por ciento anualizado), que alimentará o lastimará las expectativas de una dinámica de precios camino a ser controlada que permita la reducción de tasas de interés. El mercado viene de recibir comentarios de la Reserva Federal en cuanto a que no está muy lejos de adquirir la confianza suficiente para bajar tasas y datos de empleo mixtos, con un alza en la tasa de desocupación.
En México, el mercado de valores logró cerrar al alza una sesión plana que parecía más alineada con las pérdidas el lunes, ante algunas novedades locales y a la espera de importante información principalmente estadounidense. Los indicadores, que por la mañana presentaban ligeras pérdidas, presentaron su primera alza en cuatro días de intercambios, aunque no se alejaron significativamente de mínimos de seis semanas.
La jornada de ayer los inversionistas incorporaron que la llegada de turistas internacionales a México subió 3.6 por ciento durante enero, mientras que las ventas de vehículos pesados subieron 28.6 por ciento durante febrero. Para los siguientes días la agenda local es limitada, con indicadores como las reservas internacionales y la producción industrial en el plano local.
En el ámbito internacional Japón revisó al alza su desempeño económico del cuarto trimestre de 2023, en tanto, medios reportaron que en China la venta de autos cayó casi 20 por ciento en febrero. Localmente, el mercado está a la expectativa de cuándo podrá el banco central estadounidense iniciar el recorte de tasas de interés, mientras que en México se espera que el ciclo de disminución de tasas comience la próxima semana.
En asuntos energéticos, observamos que los precios del petróleo finalizaron con desempeño mixto, mientras que los inversionistas aguardaron información de inflación en Estados Unidos que ayude a determinar el futuro monetario. Así, el precio del contrato de abril del barril de petróleo estadounidense, West Texas Intermediate, perdió 8 centavos para marcar 77.93 dólares, mientras que el precio contrato de mayo del crudo europeo, Brent del Mar del Norte, subió trece centavos para cotizarse en 82.21 dólares por barril.
Los operadores del mercado aguardan los datos del índice de precios al consumidor y al productor, que se publicarán esta semana, para ver señales adicionales de cuándo la Reserva Federal podría recortar las tasas de interés. La mayoría de los inversionistas esperan que la Reserva Federal reduzca las tasas en junio. Las tasas más bajas suelen estimular el crecimiento económico, lo que alimentaría la demanda de crudo.
En temas cambiarios, observamos que el peso mexicano sumó su octava sesión de ganancias, en medio de especulaciones sobre los datos de inflación en Estados Unidos, pues de ellos dependerán, en gran medida, los planes de política monetaria. De acuerdo con los registros del Banco de México, la moneda nacional cerró en 16.80 pesos por dólar en su modalidad interbancaria, lo que representa una ganancia de poco menos de un centavo respecto al cierre previo del viernes, para mantenerse en su nivel más fuerte en más de seis meses. Por su parte, el Índice Dólar, DXY, el cual rastrea el comportamiento de la divisa estadounidense frente a una canasta de seis monedas, se mantuvo casi sin movimientos cerrando en 102.85 unidades.
De esta manera, el peso sumó ocho días de ganancias, su mejor racha desde finales de noviembre, cuando sumó 11 días de apreciación ante el dólar. En cambio, el DXY frenó siete días de pérdidas consecutivas. Los inversionistas operaron con cautela de cara a conocer datos de inflación en Estados Unidos que podrían fijar el próximo movimiento de la Reserva Federal para la reunión de política monetaria de esta semana. Sigamos atentos; nos vemos el próximo martes.