Será Wendy defensora incansable de los derechos de los animales

16 noviembre 2015

""Veterinaria, porque me gustan mucho los animales, principalmente los perros de todas las razas, hay muchos en la calle y nadie los quiere ayudar, hay mucha gente mala que los golpea, yo quiero luchar por ellos", comenta"

ABRIL VALADEZ

MAZATLÁN.- Wendy Rubí Corrales Félix sueña convertirse en veterinaria, pues considera que se ha dejado en el olvido la salud y el cuidado de muchos animales, a quienes buscará ayudar.
"Veterinaria, porque me gustan mucho los animales, principalmente los perros de todas las razas, hay muchos en la calle y nadie los quiere ayudar, hay mucha gente mala que los golpea, yo quiero luchar por ellos", comenta.
Para su regreso a clases, la pequeña de 11 años con domicilio en la Colonia Ramón F. Iturbe, desea ingresar a su quinto grado de primaria en mejores condiciones que el año pasado, para alcanzar un mejor promedio.
Su calificación general es casi de 9 y no le gusta faltar a clases, cumple con sus tareas y se esmera por prestarle atención a sus profesores.
"Me gusta estar cerca de mis maestros para entenderles mejor, también me gusta hacer las tareas después de jugar con mis hermanitos, la verdad es que sí me gusta la escuela y ya quiero regresar", menciona Wendy, quien desea una mochila de la 'Virgencita plis', dibujo de la marca Distroller.
Aunque para ella se trate de un hecho emocionante el regreso a clases en la Primaria "Felipe Carrillo Puerto", a su mamá Rosa Isela Félix García la proximidad del nuevo ciclo escolar le provoca angustia, pues Wendy no es la única, su hermano mayor también retomará sus estudios en la secundaria, lo que les generará un gasto considerable.
Rosa se dedica sólo al hogar y al cuidado de sus hijos, por lo que el único sustento económico de la familia es su esposo, quien tiene un sueldo bajo preparando sushi.
"Es difícil para nosotros, porque mi esposo no gana mucho. Aparte de los dos niños que ya van a la escuela, tenemos otro de 3 años que también implica gasto. Lo que me preocupa es que a los dos que van a la escuela les piden cosas que no son muy baratas, no creo que le alcancemos a comprar a Wendy la mochila que quiere", dice.