Firmas

"El sistema mexicano de pensiones"

Jesús Héctor Muñoz Escobar

Recientemente un estudio de la OCDE (Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico) determinó que México es el último país (de los 16 miembros) en hacer cambios a sus sistemas de pensiones, asimismo obtiene el peor rendimiento y generación de montos para los jubilados.
Como se recordará, primero surgió el Sistema de Ahorro para el Retiro (SAR), y después las Administradoras de Fondos para el Retiro (Afores), como parte sustancial de las reformas. Ambas, incluida esta última (aprobada en 1996 e implementada a partir de 1997) tenían como propósito explícito la reducción de la presión sobre las finanzas públicas, la liberalización de esos recursos para el sector financiero, bajo esas dos premisas, supuestamente fortalecer las pensiones para los trabajadores.
Después de 10 años, en tanto en los demás países las pensiones bajaron de un 66.5% de su salario promedio a un 55.8% de éste, en México, donde un trabajador se retiraba con el 72.5% de su salario promedio, ahora lo hará con sólo el 35.8%.
Por otro lado, la baja depresión a las finanzas públicas sólo se cumplió mínima y parcialmente, pues las pensiones siguen siendo un gran boquete para el presupuesto. El fortalecimiento del sistema financiero privado se obtuvo exitosamente, pero a cargo del trabajador, que representa el único propósito no sólo incumplido, sino con un déficit superior al 50%.
Antes de la reforma, el sistema de pensiones en México estaba en quiebra, pues aunque la ley estipulaba un monto de jubilación, era imposible para el gobierno seguir cumpliéndolo. Para intentar resolver el asunto, se creó el SAR y las afores.
Las empresas contribuían con el 2% del salario base del trabajador y el resto de la pensión lo aportaba el Gobierno. Ahora, el trabajador aporta el 1.125% de su salario base, la empresa el 5.5% del salario base y el Gobierno pone un 5.5%. El año pasado, el Presidente Felipe Calderón logró sacar adelante la Ley de Pensiones del ISSSTE, sin embargo está pendiente que cada estado haga lo propio y para que usted se dé una idea de esta realidad, si un trabajador de un gobierno estatal, ayuntamiento u organismo descentralizado en el país se jubila, quien tiene que absorber la carga es el ente gubernamental y esto con el paso de los años se ha convertido en una bola de nieve que está por reventar; en Sinaloa, Óscar Lara Aréchiga ya tomó cartas en el asunto y está trabajando junto con Quirino Ordaz y Octavio Aguilar en el desarrollo de una nueva Ley de Pensiones Estatal que se prevé que el Congreso apruebe y promulgue este año.

Élmer Mendoza
Un valor sinaloense, presentó su libro Balas de Plata, que fue galardonado con el premio Tusquets. Élmer tiene muchas virtudes y anécdotas; se dice que en su época de estudiante en el Politécnico, en los años de los 70, donde cursó la carrera de Ingeniería Electrónica, vivía en una casa de estudiantes en la Col. Tabacalera atrás del frontón México. Quienes vivieron en la misma casa, como Manuel Hernández, dicen que Élmer desde muy joven ya expresaba sus inquietudes por las artes y por las ideas políticas de ese entonces, incluso dicen que pintó un cuadro que lo llamo ?Realidad, así te siento?.

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