El tradicional Guayabo, el bar más famoso de Culiacán.

27 junio 2018

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TheJoy

Cuando en Culiacán se habla de un buen pollo con papas fritas, cerveza, buen ambiente y música en vivo, es muy común que se piense en El Guayabo. Emblemático bar que se ubica en el Primer Cuadro de la ciudad, desde 1953, por la calle Francisco Villa, esquina con Vicente Riva Palacio.



En cuanto se entra, el primer recibimiento lo brinda el aroma a pollo frito que penetra el lugar; luego, otro sentido que El Guayabo despierta es el de la vista, pues es un lugar muy peculiar, tiene una gran palapa de palma, sostenida por grandes barrotes.

La cara de las mesas es de lámina blanca con las patas de madera, al igual que las sillas, de madera, típicas de cantina; como parte de la decoración, del techo cuelgan piñatas a lo largo de la palapa. Mientras retumba la banda, sinaloense a veces, en otras ocasiones tipo orquesta, se escucha el bullicio de la gente.

Al fondo, del lado izquierdo, se observa un mural en la pared, a un lado de la cocina, es una pintura de Rubén Rosas, mejor conocido como “El Zurdo”, mesero con 42 años de servicios ininterrumpidos en el bar, si se visita el lugar y se cuenta con suerte, puede que sea él quien atienda.



Con la banda de fondo, cuenta el Zurdo que se ha percatado durante todos los años que tiene en la empresa, que como en todo negocio que tiene su éxito, para El Guayabo lo importante no es que llegue, sino que perdure la cúpula, mantener la preferencia.

“El Guayabo nunca había tenido el éxito que tiene actualmente, todo se debe a Julio Aguilar, el propietario, y obviamente a los colaboradores, pero la máxima autoridad acepta sugerencias en beneficio del negocio y se llevan a cabo, poco a poco ha crecido el negocio”, señala.

Dice que, aunque se cuenta con público de todo tipo, desde hace 15 años aproximadamente, los asistentes son en su mayoría profesionistas, burócratas, empresarios y deportistas, por eso es por lo que se pusieron pantallas para transmitir eventos deportivos y satisfacer hasta al más exigente.

Los secretos

El fuerte de El Guayabo sigue siendo el pollo frito con papas, pero actualmente se incluyeron otras cosas en el menú, como lo son las alitas en diferente variedad de salsa y los camarones cocidos, cerveza y refresco.



Dice que la clave del éxito es además de la receta secreta de el pollo, la actitud de buen servicio, estar pendiente de una buena atención, que se sirva bien, se atienda rápido y se coloquen bien los cubiertos, pues todo cuenta en un restaurante o en este caso un bar, para que la gente vuelva.

Ramón Ibarra, gerente operativo de El Guayabo dice que sin duda uno de los factores de éxito es la disciplina y constancia en estandarizar los procesos de trabajo, en cuanto a la calidad del producto que en el caso del pollo es lo que los distingue.



Señala que siempre se está pendiente de que, aunque sea personal nuevo cuente con previa capacitación para que todo sea igual siempre, que es lo que de seguro permitirá que El Guayabo cumpla sus 65 años de trayectoria próximamente.

“Es casi parte de una tradición de Culiacán la visita a El Guayabo, nos han visitado muchas personalidades y es prueba de que estamos haciendo las cosas bien, de buen servicio, buen ambiente y poco a poco se ha ido quitando ese estigma de cantina, ya que a nivel Sinaloa se piensa en cantina a un lugar exclusivo para hombres y nosotros hemos roto esos paradigmas”, destacó.

El gerente operativo dijo El Guayabo es un bar de respeto al cual pueden asistir sin problemas personas de cualquier género y actualmente se está impulsando el servicio del restaurante, en la sucursal de las Quintas, para la convivencia con la familia, niños, jóvenes y adultos.



El zurdo dice que no es fácil mantenerse en la cúspide, por eso es por lo que siempre le da gracias a Dios que siga teniendo ese trabajo, porque para él es importante mantenerse en El Guayabo, por eso siempre que va a la iglesia es por lo que pide, por el éxito del bar.

“Se ha hecho popular y famoso incluso a nivel mundial, nos ha ayudado la providencia, aquí yo te he atendido a catedráticos de diversos continentes, americano, europeo, asiático, gente de cultura que viene a Culiacán”, advierte.

El Guayabo ha sido el lugar ideal para muchos que han decidido celebrar allí su cumpleaños, bodas y diversos festejos de aniversario, pero hay otros que, en su extremo, han dejado la petición de ser la última parada antes de ir al panteón.

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Fotografía: Internet

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