"INMIGRANTES: El sueño americano y el abrazo de los sinaloenses"
Claudia Beltrán / Sibely Cañedo
A más de un mes de su peregrinaje en las entrañas de la “bestia”, que inició en la frontera de México con Guatemala, los integrantes de la Caravana Viacrucis “Migrantes en Lucha” se adentraron en la ruta del Pacífico y llegaron a Sinaloa, donde la sociedad civil se ha preparado para cobijar su sueño americano, que en la mayoría de las historias significa el reunirse de nuevo con su familia o alcanzar asilo político en los Estados Unidos.
Por la tarde de este jueves el tren se detuvo en Mazatlán, donde cerca de 400 migrantes centroamericanos hicieron una escala en su larga travesía, donde fueron asistidos por voluntarios de la parroquia San Francisco de Asís, ubicada en la colonia Salvador Allende a un lado de las vías.
En ese punto de la periferia de la ciudad, un grupo de mujeres del Comedor Franciscano para el Inmigrante recibió a cada uno con una ración de caldo de pescado, arroz con papa y zanahorias, tortillas y café, con lo que aliviaron el cansancio y el hambre.
VIDEO: Narra migrante viacrucis en La Bestia en su travesía rumbo a la frontera
Por iniciativa propia, algunos ciudadanos regalaban ropa y zapatos a quienes descendían de los vagones para hidratarse y alimentarse, y así tomar fuerzas para continuar.
Rodrigo Abeja, uno de los coordinadores de la Caravana, señaló que además de este grupo se espera que por la noche o madrugada de este viernes lleguen mujeres con bebés o niños de hasta diez años, quienes serían recibidos en dicha parroquia, para después continuar el viaje y reencontrarse con el resto del contingente más adelante.
“Ellos van buscando su derecho al asilo, que es un derecho internacional que tiene toda persona que sufre de la violencia en sus ciudades o país de origen, donde su vida corre peligro o simplemente no tiene sentido en ese lugar”, comentó el activista, parte de la organización Pueblos Sin Fronteras.
A diferencia de otras ocasiones, apuntó, la mayoría (80%) de quienes integran el “Viacrucis” provienen de Honduras, donde tras un proceso electoral convulso el pasado 26 de noviembre, la represión del Ejército ha provocado la huida de cientos de personas.
Se organiza sociedad civil para recibir en Culiacán y Mazatlán a migrantes
El resto de la caravana lo componen personas de El Salvador, Guatemala y Nicaragua, países que se enfrentan a la presencia histórica de pandillas criminales, como las Mara Salvatrucha, la crisis económica y, en años recientes, la invasión del narcotráfico.
Josué, quien busca reencontrarse con su familia luego de dos años sin verla, es uno de los desplazados por esta problemática.
“Muchos salen por la delincuencia, yo tuve amenazas de los pandilleros que decían que me iban a matar, cosas así… Otros salen por cuestiones económicas, pero está aumentando la violencia en El Salvador, aumenta, cada vez está peor: por eso muchos deciden emigrar”, relató.
Apostados en este lugar de descanso, agentes del Instituto Nacional de Migración (INM) se encontraban verificando que los migrantes contaran con su permiso de internación o de tránsito.
“En este caso los que están aquí traen permiso, no se arriesgan a transitar sin él, se les otorga este permiso para que puedan realizar su trámite si cumplen con la normatividad”, explicó el delegado, José Antonio Hayashi Ayala.
En tanto, continuaban las largas filas para recibir los alimentos que fueron llevados por los voluntarios a bordo de camionetas, por un angosto camino junto al ferrocarril.
“Gracias, México”
Los migrantes en tránsito aseguran que con el apoyo de la sociedad civil, su peregrinar se ha tornado menos doloroso.
Hasta el momento, no han sido violentados por grupos delincuenciales debido en parte al apoyo de organizaciones, que se han coordinado para pedir apoyo de Cruz Roja, Protección Civil, Derechos Humanos y Seguridad Pública.
“Estábamos un poco nerviosos al entrar a Sinaloa, pero todo ha estado tranquilo”, dijo uno de los migrantes, originario de Nicaragua.
Como informó Noroeste con oportunidad, en Culiacán, el albergue Jesús María Echavarría Aguirre se encontraba ayer (jueves) preparado para recibir a la Caravana. Sin embargo, en su paso por Mazatlán, los coordinadores señalaron que seguirían su camino directo hacia la ciudad de Hermosillo, pues tenían la meta de llegar en cinco días a la línea fronteriza.
"Vamos a ver la manera, en casa de que sea un grupo grande, ubicarlos dentro de la casa y estén seguros mientras pasan por Culiacán", explicó por la mañana el padre Miguel Ángel Soto Gaxiola en la capital sinaloense.
Al ponerse el sol, la “bestia” rugió de nuevo. Eran casi las 19:30 horas. Los voluntarios se despedían de los peregrinos con un “Dios los bendiga”. Mientras de arriba del tren, ellos gritaban: “Gracias, México”.
Su llegada a Culiacán
En Culiacán, los sacerdotes Jaime Marvin Quintero Corrales y Miguel Ángel Soto Gaxiola, se organizaron para recibir a los migrantes entre la noche de ayer y la madrugada de este viernes.
A su vez, el activista Tiago Ventura Cárdenas se unió a la causa convocando a la ciudadanía ayudar a los migrantes, entre ellos mujeres, hombres y niños.
Soto Gaxiola mencionó que en Culiacán el albergue Jesús María Echavarría Aguirre se preparó para recibir a la caravana.
Mencionó que la Casa del Migrante tiene la capacidad para recibirlos y proporcionarles ropa, alimento y estancia.
"Vamos a ver la manera, en caso de que sea un grupo grande, ubicarlos dentro de la casa y estén seguros mientras pasan por Culiacán", explicó.
Agregó que por la mañana el espacio que es comedor, por la noche se pueden acomodar colchonetas, para que los migrantes duerman ahí.
Expuso que las habitaciones no podrían darse abasto para tanto migrante.
"Tenemos alimento, ropa, tenemos lugar, ya todo listo para en cuanto lleguen y los que quieran quedarse en la Casa del Migrante, tenemos un lugar disponible".
Soto Gaxiola agregó que quien guste unirse en solidaridad, adelante.
Destacó la generosidad de la sociedad de Culiacán.
"La sociedad de Culiacán es muy generosa, atiende a nuestros hermanos que van de paso, siempre hemos recibido bien a quien nos visita".
Expuso que el migrante es una persona necesitada, que anda buscando mejores condiciones de vida.
"No son malandrines, no son asesinos, no son rateros, nosotros nada más nos vamos a encargar de asegurarnos que esa gente buena no le pase nada durante el trayecto por Sinaloa".
A su vez, Quintero Corrales, conocido en esta ciudad como el 'Padre Jimmy', llamó a la sociedad a solidarizarse con estas personas que están viajando en el lomo del tren, con todos los riesgos que ello implica.
Comentó que en el viaje vienen mujeres, hombres, niños que necesitan el apoyo de la sociedad culiacanense y sinaloense en general.
La ciudadanía puede donar productos no perecederos, ropa, huaraches, tenis, sábanas, medicamentos, los cuales entregarán a los migrantes cuando lleguen a esta ciudad.
Productos enlatados, como sardinas, atunes, ensaladas de verduras, jugos, así como agua embotellada, toallas sanitarias, papel higiénico, parte de lo que la ciudadanía puede donar.
'Burritos' para entregar en cuanto lleguen y cenen, más de lo que la ciudadanía puede aportar, como una manera de tender la mano a los migrantes centroamericanos que buscan otro país buscando mejorar su calidad de vida.
Ayer puso como centro de acopio a la iglesia San Miguel Arcángel, colonia Rosales, frente al Hospital General, a entregar cualquier ayuda.
Fray Carlos Aviña Aviña, quien atiende el Comedor Franciscano para el Inmigrante en la colonia Salvador Allende en Mazatlán, indicó que los migrantes que viajan están huyendo de la violencia de sus países, la mayoría proceden de Honduras, El Salvador y Guatemala y carecen de la posibilidad de cubrir sus necesidades básicas.
¿Qué se necesita?
En vista de la urgencia de ayudarlos, los activistas hicieron el llamado a la comunidad a que apoyen con medicamentos básicos, alimentos enlatados, ropa, calzado, agua embotellada, cobijas y colchonetas, por ser los artículos más apremiantes en este momento.
Son bienvenidos voluntarios, hombres o mujeres que se desempeñen en las siguientes profesiones: psicólogos, médicos, enfermeros y defensores de derechos humanos.
"Son personas que están viviendo una realidad muy complicada en sus lugares de origen, tienen muchas necesidades, el llamado es a ayudarlos, alimentarlos en su peregrinar y no dejarlos solos", indicó Fray Carlos.
Además, agregó el sacerdote Quintero Corrales, la ciudadanía puede donar productos no perecederos, ropa, huaraches, tenis, sábanas, medicamentos, los cuales entregarán a los migrantes cuando lleguen a Mazatlán y a Culiacán.
También se puede donar productos enlatados, como sardinas, atunes, ensaladas de verduras, jugos, así como agua embotellada, toallas sanitarias, papel higiénico, parte de lo que la ciudadanía puede donar.
'Burritos' para entregar en cuanto lleguen y cenen, más de lo que la ciudadanía puede aportar, como una manera de tender la mano a los migrantes centroamericanos que buscan otro país buscando mejorar su calidad de vida.
Todavía se puede donar
Aunque la Caravana reanudó su viaje a la frontera con Estados Unidos, todos los días se brinda atención a migrantes en tránsito.
En Mazatlán
La Caravana Viacrucis "Migrante en lucha" arriba hoy a Mazatlán. Se espera que entre las 17:00 y 18:00 horas llegue el contingente de alrededor de 650 personas, entre ellas 250 mujeres y niños a la parroquia San Francisco de Asís, en la colonia Salvador Allende, informó Fray Carlos Aviña Aviña, quien atiende el Comedor Franciscano para el Inmigrante.
El Comedor Franciscano para el Inmigrante se ubica en calle Alfonso G. Calderón número 309, en colonia Salvador Allende. Interesados en ayudar, pueden llamar al teléfono 6161199164.
En Culiacán
Si alguien desea ayudar a los migrantes, puede acudir a la iglesia San Miguel Arcángel, colonia Rosales, frente al Hospital General, a entregar cualquier ayuda.