Jesús Héctor Muñoz Escobar
Donald Trump en su candidatura a la presidencia de EEUU criticó duramente el mandato de Janet Yellen en la Reserva Federal (FED) a quien acusó de no aumentar la tasa de interés por respaldar al entonces presidente Obama, incluso la acusó de crear una “economía falsa” y de mantener fuerte el mercado artificial de valores. La semana pasada Yellen compareció por primera vez desde que inició la gestión del magnate ante el comité bancario del Senado en una reunión semestral, en la cual habló sobre el estado de la economía estadounidense y sobre si era necesario subir la tasa de interés o no.
En esta ocasión señaló que la economía estadounidense muestra señales de dinamismo, la tasa de desempleo cerró en enero en el 4.8% y se crearon 227,000 nuevos puestos, cifra superior a la estimada de 180,000 mientras la inflación en ese mismo mes registró un aumento de 0.6% respecto a diciembre pasado, el mayor incremento desde febrero de 2013 pero si la comparamos con enero de 2016 el incremento fue de 2.5%. La FED tiene una meta de inflación de 2% y sigue una medición de precios que actualmente está en 1.7%. Estos son las dos principales variables económicas que toma en cuenta la FED para aumentar las tasas. Otro dato que indican la fortaleza de la economía es el aumento de las ventas minoristas, en comparación con enero del año pasado subieron un 5.6%.
Sin embargo, la presidenta de la FED indicó que la preocupación en subir la tasas se centra en que Trump ha prometido una nueva reforma fiscal que disminuya los impuestos para los estadounidenses y por otra parte un aumento del gasto público al menos en infraestructura. Para ella la lentitud del crecimiento en el país es consecuencia del poco aumento de la productividad. Agregó sin querer entrar en detalles que la política migratoria tiene efecto económico puesto que si se reduce el crecimiento de la población activa la economía crece a un ritmo menor.
Por su parte los analistas económicos señalan que el aumento de la tasa de interés es inminente lo que aún no logran vislumbrar es si se llevará a cabo el próximo mes de marzo o será en junio, el último aumento se realizó en diciembre pasado y fue de 0.25%. La proyección es que este año se den tres subidas de la tasa de interés para que se sitúe entre 1.25 y 1.5% al terminar el año.
Finalmente, la decisión que tome Yellen no será sencilla si bien es cierto es que la economía esta recuperada no desea frenar el crecimiento económico al detener la política monetaria expansiva, pero por otro lado no quieren que la inflación se convierta en un dolor de cabeza. Asimismo, necesita información detallada sobre la política fiscal que pretender realizar Trump, más allá de que él diga que será fenomenal. Veremos pues si Yellen logra quedar bien con el presidente de la república, aunque claro está que la FED es un organismo autónomo, sino es así mínimo le escribirá un twitter como él acostumbra para criticarle su actuación.
Twitter: @jhectormunoz
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