Santiago Roel, creador del programa Semáforo Delictivo que mide la incidencia de comisión de delitos, señaló que Sinaloa atraviesa por una “tormenta perfecta” al dispararse las cifras de homicidios y robo de autos.
“La tormenta perfecta” es un libro y película homónima que narra la terrible combinación de efectos meteorológicos que se convierten en funesto peligro para una embarcación en altamar.
No hay que temer a las tormentas. Lo que se debe temer es no contar con un capitán que capaz de enfrentarlas y sortearlas. Negar la realidad o referir que sólo es cuestión de percepción no es la solución.
“Cerrar los ojos... no va a cambiar nada. Nada va a desaparecer simplemente por no ver lo que está pasando. De hecho, las cosas serán aún peor la próxima vez que los abras. Sólo un cobarde cierra los ojos. Cerrar los ojos y taparse los oídos, no va a hacer que el tiempo se detenga”, señaló Haruki Murakami.
La “tormenta perfecta” no es fruto de una súbita erupción violenta, sino que se fue formando por nuestro descuido y desinterés, escribió Enrique Krauze en noviembre de 2012.
Sin embargo, toda tormenta es remontable, como mostró Hirokazu Koreeda en la película “Después de la tormenta”, en que narró la historia de un escritor que malgastó su vida y fortuna, al grado de no contar para su madre y su hijo hasta reencontrarse consigo mismo después de un tifón.
“Y una vez que la tormenta termine, no recordarás cómo lo lograste, cómo sobreviviste. Ni siquiera estarás seguro si la tormenta ha terminado realmente. Pero una cosa sí es segura. Cuando salgas de esa tormenta no serás la misma persona que entró en ella. De eso se trata la tormenta”, insistió Murakami.
¿Cómo enfrento la tormenta? ¿Salgo fortalecido?
rfonseca@noroeste.com
@rodolfodiazf
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