Iniciamos ayer la semana con una jornada mixta en los principales mercados accionarios de Asia y Europa, pero positiva para los de América. El mercado de valores estadounidense concretó ayer un rebote tras el sentimiento negativo que dominó la semana pasada, sin muchos datos nuevos, pero a la espera de importantes actualizaciones. El Nasdaq y el SP500 registraron su primera alza en cinco días de operaciones, mientras que para el Dow fue el primer avance en cuatro sesiones. El índice industrial presentó su mayor subida desde el 15 de junio y fue el que más se alejó de los tres de su peor nivel en al menos dos semanas. Los tres índices vienen de una semana de pérdidas, que fue la peor desde marzo para el índice tecnológico y para la canasta de 500 emisoras.
El mercado continuó sopesando por un lado el ánimo generado por una ruta de política monetaria más clara (y tal vez menos agresiva) y por el otro la agitación motivada por la degradación crediticia estadounidense. La semana pasada un dato positivo de nómina no agrícola estadounidense (con desaceleración en el aumento de empleo), que abonó a la idea de menores presiones inflacionarias y menor agresividad monetaria, no pudo revertir la ola de ventas desatada por la decisión de Fitch Ratings. Ahora, los inversionistas esperan para los próximos días los datos de inflación al consumidor y al productor de julio, luego de antecedentes que dejaron buena impresión en estos días.
En cuanto a reportes trimestrales, 84 por ciento de las emisoras del SP500 han revelado sus números, con 65 por ciento de sorpresas positivas en ingresos y 79 por ciento para ganancias por acción. Sin embargo, la temporada no ha sido necesariamente positiva, pues 30 compañías han emitido guías de ganancias positivas para el tercer trimestre, contra 49 estimados considerados negativos. Temas geopolíticos también preocupan a los inversionistas, como el reciente repunte del petróleo a partir de la extensión de los recortes de producción de Arabia Saudita y Rusia, además de la guerra en Ucrania.
En México, el mercado de valores conservó el tono positivo de la jornada del lunes, aunque lo redujo a un desempeño casi plano, en medio de actualizaciones económicas locales mixtas. Los indicadores, que alcanzaron a subir sustancialmente por la mañana y después borraron casi todas las ganancias, registraron su tercera jornada positiva consecutiva, después de una semana de pérdidas. El Índice de Precios y Cotizaciones reafirmó por segunda jornada seguida la recuperación de la zona de mercado alcista, al estar más de 20 por ciento por encima de mínimos recientes.
La semana pasada datos como una positiva inversión fija bruta o el continuo avance de producción de autos local impulsaron apetito por riesgo pero no salvaron el desempeño semanal. En la jornada de ayer los operadores incorporaron que el reporte de Confianza del Consumidor en México subió en julio para alcanzar su mayor nivel en 20 meses. Por otro lado, los puestos de trabajo registrados en el Instituto Mexicano del Seguro Social bajaron en julio por primera vez en el año, convirtiendo al mes pasado en el segundo peor julio en 18 años (solo detrás del de 2020, afectado por la pandemia).
En temas energéticos, tenemos que los precios del petróleo registraron una caída de medio punto este lunes, con lo cual le pusieron pausa al repunte mostrado en las últimas semanas debido a que los inversionistas esperan una reducción en la demanda por parte de China y Estados Unidos. Así, el contrato de crudo estadounidense, West Texas Intermediate, cerró 82.37 dólares el barril, mientras que el crudo europeo, Brent del Mar del Norte, cerró en 85.73 dólares por barril. Antes de la caída, el crudo subió luego de un ataque a un centro clave de exportación de petróleo de Rusia y los recortes de producción extendidos por parte de Arabia Saudita y el Kremlin.
El principal exportador del mundo, Arabia Saudita, extendió el jueves pasado su recorte voluntario de producción de un millón de barriles por día hasta finales de septiembre y, en comunicado oficial, señaló que podría haber más. En correspondencia a los recortes de producción, Saudi Aramco elevó el sábado los precios de venta oficiales en la mayoría de los grados que vende a Asia por tercer mes en septiembre. Rusia se sumó a la escasez de suministro con su anuncio de que reducirá las exportaciones de petróleo en trescientos mil barriles por día en septiembre.
En asuntos cambiarios, tenemos que el peso mexicano finalizó la jornada con pocos cambios, mientras que los inversionistas se mostraron cautelosos ante la próxima lectura de los datos de inflación en Estados Unidos y México. De acuerdo a los registros de Banco de México, la moneda mexicana cerró en 17.04 unidades por dólar en su modalidad interbancaria, una apreciación del peso de cuatro centavos respecto a la jornada anterior. En tanto, el Índice Dólar, DXY, que rastrea el comportamiento de la divisa estadounidense frente a una canasta de seis monedas, cerró en 102.08 unidades.
Los inversionistas se mostraron cautelosos ante el dato de inflación de julio de Estados Unidos. Dicho dato, en conjunto con las cifras de la nómina no agrícola, son fundamentales para el siguiente movimiento de tasas de la Reserva Federal. También en México que conocerá el reporte de inflación, de la cual se espera ver mayores señales sobre el descenso de los precios, en especial en el rubro subyacente. Por otra parte, la fortaleza del dólar también obedece a que el Departamento del Tesoro dijo la semana pasada que incrementará el ritmo de crecimiento de la deuda, lo que implica una mayor emisión de activos del Departamento del Tesoro, ocasionando una caída en su precio y un aumento de las tasas en el mercado secundario. Sigamos atentos; nos vemos el próximo martes.
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